[resumen.cl] A pesar de las fuertes críticas realizadas a la Superintendenta de Pensiones Tamara Agnic por permitir la fusión de Cuprum con Argentum que le permitió a Principal Financial Group -controlador de ambas entidades- ahorrarse unos 130 millones de dólares a través del "goodwill", Agnic vuelve a estar en el centro del huracán por permitir una nueva fusión con una AFP fantasma -esta vez de Metilfe- que le permitirá al conglomerado financiero ahorrarse alrededor de 280 millones de dólares que debería descontarse de sus impuestos durante los próximos 10 años.
La semana pasada Agnic permitió la creación de AFP Acquisition que permitió seguir adelante a Metilife para fusionarla con AFP Provida. En la operación de fusión, que la Superintendenta conocía, al igual que en el caso CUPRUM/ARGENTUM, permite ahorrarse a Metlife el pago alrededor de 280 millones de dólares que debería descontarse de sus impuestos durante la próxima década.
Agnic a pesar de lo señalado por la titular de la cartera de trabajo Ximena Rincón y algunos parlamentarios quienes le exigieron no permitir una operación como la realizada por Principal Financial Group -Rincón calificó de al menos irregular la acción permitida y recomendó a Agnic abstenerse de «autorizar operaciones de la misma índole»-, se refugió en la "autonomía" de la Superintendencia una operación de elusión tributaria que perjudica a la recaudación del Estado.
Agnic como representante de una entidad del Estado debe velar por los intereses del fisco, pero al permitir este tipo de actividades eso queda en entredicho. El goodwill es un mecanismo que permite la elusión tributaria, justamente una de las aristas que la "reforma tributaria" de Bachelet intenta detener. Agnic ha puesto en entredicho su "autonomía" refugiándose en argumentos técnicos pues indicó que no era atribución de la Superintendencia determinar las intenciones de beneficiarse de la operación por parte de las AFP y que esa atribución la detenta el SII.