Como comunidad del Valle del Huasco que ha resistido al megaproyecto Pascua Lama por más de dos décadas, recordamos con emoción que hace un año celebramos comunitariamente la noticia del fallo de clausura de este nefasto proyecto.
Si bien seguimos ratificando la importancia de ese fallo que le dio la razón a una comunidad -tanto local, nacional como internacional- que nunca dejó de defender la integridad de su territorio, es imperioso denunciar a la opinión pública que, nuevamente, estamos ante una situación grave de impunidad socioambiental en nuestro país: a un año del fallo, la clausura del proyecto Pascua Lama no se materializa y la empresa ha seguido interviniendo a nivel social y ecosistémico.
Un par de ejemplos de dicha intervención son las ayudas monetarias que Barrick sigue entregando para encontrar apoyo con lo cual ahondan aún más el daño de nuestro tejido social y los 13 sondajes ilegales realizados entre noviembre de 2020 y mayo de 2021, en la misma zona del rajo supuestamente clausurada, al lado de los glaciares ya destruidos. Este último y gravísimo hecho fue denunciado y todavía se espera la respuesta de la Superintendencia del Medio Ambiente.
A esto se le suma la preocupación por la reciente noticia del Plan de Cierre actualizado de la faena propuesto por la empresa. En síntesis, Barrick plantea restituir al río Estrecho y sin tratamiento todas las aguas contaminadas que se generan constantemente en el proyecto.
Este plan de cierre dista absolutamente de la propuesta original por su Resolución de Calificación Ambiental (RCA); no sólo ignora la contaminación sostenida de las aguas que provocó la empresa, sino su propia declaración de 2006, donde transparentó que la intervención en la naciente de las aguas las afectaría y contaminaría por lo menos 100 años, razón por la que se comprometía a tratarlas durante dicho lapso.
Como comunidad sabemos que, incluso si lo mejoraran, el sistema de manejo de aguas no da abasto y que no logra impedir la contaminación de los ecosistemas y de las personas. Ésa es precisamente la causa de la actual contaminación. No obstante, tampoco podemos permitir que descarguen de manera directa toda el agua de contacto o contaminada a nuestros ríos y afluentes.
Para concretar este nefasto plan que vuelve a poner en riesgo el ecosistema del Valle, la empresa pretende presentar una Declaración de Impacto Ambiental (DIA) ante el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) en octubre de 2021. La exigencia de la comunidad es que la SMA y Sernageomin, entes de gobierno encargados de ejecutar la clausura por mandato del Primer Tribunal Ambiental, no acepten esta burda artimaña de Barrick y, que ejecuten el cumplimiento del fallo que hoy conmemoramos, siguiendo su espíritu de resguardo estricto de las comunidades y ecosistemas, y en diálogo permanente con las éstas.
Finalmente, queremos hacer notar que éstas son situaciones inaceptables en el marco del proceso constituyente que vive el país hoy. Cabe recordar que este mismo proceso es el resultado de la movilización social exigiendo dignidad, justicia social y ambiental, y el fin de un modelo economicista que no tiene consideración alguna por la vida de comunidades y ecosistemas, y del cual Barrick es un fiel exponente.
Barrick asesinos, Barrick Criminal ¡Materialización del fallo Ahora!
¡FUERA DEL VALLE DEL HUASCO!
ASAMBLEA POR EL AGUA DEL GUASCO ALTO