[resumen.cl] El juego del lunes por la noche de la NFL (liga de fútbol americano) llamado «Monday Night Football» que enfrentaba a los Cardinales de Arizona y los Vaqueros de Dallas se transformó en una nueva escalada entre los deportistas de esta liga el presidente Donald Trump, cuando los planteles completos de ambos clubes, jugadores y cuerpo técnico, se arrodillaron durante la entonación del himno nacional de Estados Unidos en la previa del encuentro.

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Arrodillarse cuando suena el himno de Estados Unidos se está convirtiendo en una acción reiterada en la Liga Nacional de Football-Americano (NFL). Comenzó con el Quarterback de los 49ers de San Francisco, Colin Kaepernick, por la brutalidad policial hacia la población afroamericana. En ese entonces declaraba:

"No voy a ponerme de pie para mostrar orgullo por la bandera de un país que oprime a las personas negras y de color. Para mí, esto es más grande que el fútbol y sería egoísta de mi parte mirar para otro lado. Hay cadáveres en las calles y personas que son suspendidas con goce de sueldo y no enfrentan mayores consecuencias tras haber cometido un asesinato"

Desde entonces, ha sido replicada por muchos jugadores a modo de protestas por la violencia racista institucionalizada que ha cobrado mayor relevancia bajo la administración Trump, quién esta semana dijo que los jugadores que no mostraran respeto por la bandera o por el himno deberían ser despedidos y solicitó explicaciones a la NFL por permitir estos hechos. La respuesta de ayer lunes fue que los planteles completos, jugadores, entrenadores, ayudantes, etc., de ambos clubes se arrodillaron juntos durante el himno tomados de los brazos formando una cadena humana para dar una respuesta al presidente Donald Trump, en una seguidilla de acciones que van en escalada de tensiones entre el Jefe de Estado y exponentes del deporte más popular del país.

*Fotografía de ESPN