[resumen.cl] Este primero de junio el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) publicó un nuevo boletín de desembarques pesqueros en el Biobío correspondiente al pasado mes de abril de este 2020. En este periodo el total de desembarques pesqueros en la región del Biobío alcanzó unas 240.449 toneladas. Esto representa un aumento de 40,6 % con respecto al mes de abril de 2019.
El boletín constata que la región del Biobío participó en el 47,9% de los desembarques nacionales. Además, el reporte señala que entre enero y abril de este 2020, los desembarques artesanales e industriales alcanzaron 581.380 toneladas, con un aumento de 8,2 % con respecto al año 2019.
Pesca artesanal
El reporte indica que los desembarques artesanales aumentaron en 66,9% con respecto al mismo mes del año 2019. Estos desembarques alcanzaron las 176.868 toneladas.
El informe apunta que este aumento se debería a la mayor extracción de sardina y anchoveta. Cabe recordar que la mayor parte de estas especies capturadas mediante el arte de cerco, se convierte en en harina de pescado en plantas industriales. Su destino es ser insumo para la industria salmonera o la agroindustria.
En Chile los desembarques artesanales alcanzaron 293.844 toneladas, en un aumento de un 67,3% en comparación a abril de 2019
Entre enero y abril la pesca artesanal alcanzó desembarques por 263.031 toneladas, con un aumento de 0,1% con respecto al mismo periodo de 2019
Pesca industrial
Por su parte, el sector industrial desembarcó 63.581 toneladas, lo que representa una disminución interanual de 2,1%.
El informe apunta a que esto se debe al menor desembarque de Jibia y calamar rojo.
Entre enero y abril, la pesca industrial alcanzó desembarques por 318.446 toneladas, con un aumento de 16,0% con respecto al mismo periodo de 2019.
A escala nacional, los desembarques industriales alcanzaron 113.198 toneladas, en un 10,8% menos con respecto a abril de 2019.
Algunas acciones de la pesca artesanal y la pesca industrial ante la pandemia COVID-19
Una pequeña parte de los desembarques (principalmente de las especies merluza, sierra y reineta) ha podido ser aprovechada por la población afectada por las condiciones impuestas por la pandemia COVID-19 y por la deplorable gestión del gobierno.
En distintas caletas del Chile y de la región del Biobío, pescadores artesanales están comercializando y contribuyendo a que la población pueda consumir pescado y otros productos del mar en su dieta, especialmente en estos momentos de pandemia y crisis económica. Algunas iniciativas han ido más allá y pescadores artesanales han realizado distribución popular de pescado en poblaciones de la región Metropolitana y de la Araucanía.
También puedes ver: Pescadores de Tirúa regalan toneladas de alimento en medio de crisis por COVID-19
La industria pesquera por su parte, también ha participado en la entrega de alimentos. Cabe mencionar que en los últimos años, luego de la disminución drástica de las capturas de especies sobreexplotadas por la propia industria, este sector ha ido dando prioridad al negocio de la elaboración de productos para consumo humano a partir de la pesca de arrastre, ya que el destino de la pesca de cerco sigue siendo la industria de la harina de pescado.
También puedes ver: Los niveles de vitamina D juegan un papel clave en las tasas de mortalidad por COVID-19, señala estudio
Estos productos de la industria pesquera para consumo humano tienen como destino el mercado de exportación o el mercado interno a través de retail. En el contexto COVID-19, algunas iniciativas empresariales también han realizado donaciones de pescado a hogares de adultos mayores por ejemplo en la región del Maule, buscando sostener el consumo de pescado en parte de la población más vulnerable a la pandemia.