[resumen.cl] Desde el asesinato de Javier Ordóñez tras descargas eléctricas y golpiza efectuadas por policías en Colombia el pasado 8 de septiembre, se han generado intensas y sostenidas protestas en el país contra la violencia policial, en las cuales ya se ha superado la cifra de 13 personas muertas y cientos de heridas en el contexto de enfrentamiento con los agentes del Estado.

Sostenidas han sido las protestas que se desarrollan en Colombia desde el criminal asesinato de Javier Ordóñez el pasado 8 de septiembre luego de haber sido víctima de la violencia policial.

Sin embargo su muerte, producida tras una serie de descargar eléctricas generadas por la utilización de pistolas taser por agente del Estado colombiano, no ha sido la única durante estos días.

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La información recopilada da cuenta de más de 13 muertes en el contexto de protesta, las cuales serían presuntamente producto de enfrentamientos con las fuerzas policiales.

En la misma línea, se han informado cientos de personas heridas en el marco de las masivas movilizaciones que se viven en el país.

Por su parte, el Gobierno ha impulsado el refuerzo de dotación policial en conjunto con el apoyo de militares en las calles.

Contradictoriamente, el cuestionado Ejecutivo colombiano ha solicitado el perdón de la población. El ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, ha planteado que «la policía nacional pide perdón por cualquier violación a la ley o desconocimiento de los reglamentos en que haya incurrido cualquiera de los miembros de la institución«.

Sin embargo, la indignación en Colombia continúa desbordando las calles, generándose fuertes enfrentamientos con agentes del Estado, además de la intervención de diferentes espacios en los territorios.

No sólo en la capital (Bogotá), sino que en todo el país ha resonado la urgente necesidad de reestructuración de la policía.