Esta tarde en la facultad de Antropología de la Universidad de Concepción se presentaron, ante un auditorio repleto, los comuneros de dos localidades que se mantienen en un proceso activo de recuperación territorial y cultural: Erik Catrileo de la comunidad Yeupeko Katrileo y Segundo Suaréz Marihuan de la comunidad de Malla Malla.

En el lugar los comuneros expusieron la situación en la que se encuentran actualmente en relación a su proceso de recuperación territorial, cuál ha sido el papel del Estado chileno y el impacto del negocio forestal en sus comunidades.

El Lof Yeupeko Katrileo es la organización actual del antiguo Lof Yeupeko  que a fines del siglo XVIII fue despojado de su territorio  con la ocupación militar de Wallmapu y su entrega a colonos extranjeros por parte del Estado Chileno, actualmente, denuncia Erik, gran parte de su territorio está en manos del empresario suizo Luchsinger y las empresas forestales Mininco y Temuco.

Desde el año 2000 la lucha por recuperar estos territorios se intensifica y logran recuperar el fundo Margarita. Esto no fue gratuito, ya que la comunidad se vio enfrentada a un sin número de allanamientos, encarcelamientos y golpizas hasta la muerte de uno de sus integrantes: Matias Catrileo.

Por su parte, la comunidad Malla Malla comenzó su lucha hace más de una década, en la cual no ha estado exenta de enfrentamientos con efectivos policiales y la muerte de integrantes de dicha comunidad.

Actualmente el conflicto amenaza con reactivarse, ya que los latifundistas que usurparon sus territorios con el apoyo del estado chileno se resisten a entregar los terrenos que corresponden a esta comunidad. De hecho, el lunes pasado, integrantes de esta comunidad cortaron el tránsito como una medida para llamar la atención.

En cuanto a la participación del Estado chileno, las autoridades hace un tiempo se habían comprometido a realizar gestiones para comprar el fundo Queuco, pero desde mayo que la comunidad espera la respuesta.

Ambos representantes coinciden que sus objetivos son recuperar la totalidad de sus terrenos, ya que esto implica sobrevivir como cultura.

Erik comenta cómo el negocio forestal, las grandes extensiones de pinos y eucaliptus, ha impactado en su comunidad. "ya no tenemos agua, se nos secaron los pozos, las vertientes y riachuelos, esto nos ha afectado en nuestra salud, alimentación y trabajo, pues vivimos de la agricultura"

En relación a los efectos en su salud y alimentación indica cómo las constantes fumigaciones de estas plantaciones destruyen sus siembras, contaminan el agua y provocan el desarrollo de enfermedades en la comunidad. "Antes los remedios que nos daban las machis para combatir diversas enfermedades eran de fácil acceso, ahora con la invasión de pinos y destrucción de las demás especies, las machis no encuentran las hierbas requeridas, han desaparecido"

Denuncia cómo el Estado chileno propicia la destrucción del pueblo mapuche financiando el negocio forestal. "el Estado entrega recursos económicos  a las empresas forestales, éstas están totalmente financiadas, por lo que tienen jugosas ganancias"

Segundo Suárez Marihuán  comenta que para ellos es muy importante la tierra y su conservación, pues viven de la agricultura (hortalizas y trigo), ganadería y apicultura.

En relación al proceso de recuperación territorial que comienza el 2001 denuncian el  asesinato de dos personas, esto nunca se investigó y aun no  se ha hecho justicia. En este hecho, señala,  estuvo activamente involucrado el actual alcalde de Los Ángeles y que en ese tiempo era Gobernador, Esteban Krause.

Finalmente acusa el papel de CONAF en el intento de destruir su cultura y dividir a la comunidad. "CONAF llegó a nuestra comunidad imponiéndonos plantaciones de Eucaliptus y pinos, pero nosotros nos negamos y decidimos eliminar estas especies porque queremos recuperar nuestras tierras no destruirla, plantando  bosque nativo y cosechando nuestras siembras cuando corresponda "

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