La (ChDI) nació a partir del levantamiento popular del 18 de octubre de 2019 en el país. Nos conformamos en asambleas y cabildos territoriales, autónomos y autoconvocados en Oceanía, Europa y las Américas, con el compromiso de apoyar las demandas populares y las movilizaciones en Chile y NguluMapu (territorio Mapuche en Chile).

Tras comenzar nuestro andar como colectivo, muchas de las mujeres y disidencias sexo genéricas hicimos patente la necesidad de articularnos de manera separatista para reivindicar demandas específicas y generar un espacio de trabajo con otras lógicas de cuidado, razón por la cual nace --de manera autónoma e independiente-- la Red feminista de chilenxs migrantes. Si bien muchas de nosotras trabajamos activamente en ambas redes, fue hasta ahora --ante esta coyuntura política y electoral tan relevante-- que decidimos trabajar en conjunto para potenciar nuestro trabajo y alcance.

En ambas redes nos declaramos como apartidistas, anticapitalistas, antifascistas, abogamos por la plurinacionalidad, apuntamos a que nuestras prácticas sean antipatriarcales y proponemos como formas de trabajo la democracia directa y la horizontalidad, teniendo como eje transversal la perspectiva migrante. Nos reconocemos como sujetos y sujetas políticas migrantes y, por ende, seguiremos trabajando para que la migración sea reconocida como un derecho humano en la nueva Constitución.

Durante estos dos años de trabajo hemos realizado contribuciones importantes para el proceso sociopolítico que se está desarrollando en el país. Logramos hacer el nexo con los eurodiputados para visibilizar las violaciones a los derechos humanos, tanto en dicho continente como en el resto del mundo; instalamos el tema de la revuelta en las discusiones parlamentarias en Australia, Argentina, México, Alemania, Portugal y España; hemos apoyado a los distintos territorios en Chile (generando un vínculo directo con diversas agrupaciones de ollas comunes, víctimas de trauma ocular, presos y presas políticas, entre otras colectividades) y también hemos trabajado intensamente en la propuesta de generar un Distrito Internacional, que garantice la participación política de la comunidad chilena en el exterior, entendida ésta como un derecho democrático esencial.

Desde la firma del pacto por la Nueva Constitución, buscamos que la comunidad chilena en el territorio internacional fuese visibilizada en esta discusión. Junto a otros espacios organizados en el exterior participamos de los debates en torno a varios proyectos de ley en el Congreso, en los cuales lamentablemente no lograron darnos ni voto ni participación directa en la Convención Constitucional. Aún así persistimos y, tras un arduo trabajo, lanzamos hace algunas semanas la colectiva de constituyentes por las y los chilenos en el territorio internacional, donde trabajaremos con: Ignacio Achurra (distrito 14), Adriana Ampuero (distrito 26), Jorge Baradit (distrito 10), Elisa Giustinianovich (distrito 28), Natalia Henríquez (distrito 9), Bastián Labbé (distrito 20), Tania Madriaga (distrito 7), Malucha Pinto (distrito 13), Bárbara Sepúlveda (distrito 9) y Manuel Woldarsky (distrito 10). En conjunto retomaremos la lucha histórica que las colectividades de migrantes de chilenas y chilenos en el exterior han realizado en el contexto de la dictadura y retorno a la "democracia", y continuaremos exigiendo: Verdad, Justicia, Reparación y Garantías de no repetición; Distritos en el exterior y Ciudadanía Plena e Irrenunciable (pueden ver el vídeo del lanzamiento de la colectiva en el siguiente enlace: https://youtu.be/N_8CSF8MAu8).

En concreto nuestras demandas se traducen en el reconocimiento efectivo de nuestros derechos político-electorales, culturales y sociales de todas las personas que habitamos en el territorio internacional. Exigimos que nuestro derecho a la ciudadanía sea irrenunciable. Buscamos que, en el eventual proceso de descentralización y redistritaje, se reconozca al territorio internacional y se establezca un Distrito Internacional que permita la representación efectiva de chilenas y chilenos en el exterior en las instancias deliberativas como el Congreso Nacional y otras instituciones representativas que establezca la Convención Constitucional.

Ese ha sido parte de nuestro andar, que se vio abruptamente trastocado tras los resultados de las elecciones de primera vuelta del pasado 21 de noviembre de 2021. En este escenario, siendo ambas redes apartidistas y antifascistas, nos une la voluntad de defender la democracia, la igualdad de derechos, el medioambiente y la justicia en Chile, es por ello que hemos aunado fuerzas para apoyar la candidatura de Gabriel Boric, porque creemos que es la única forma que permitirá cuidar la democracia y avanzar hacia un Chile más justo y sustentable.

Creemos crucial en esta oportunidad formar parte de la unión para detener el pinochetismo fanático y su programa presidencial que pretende continuar con la desestabilizacion del país, revocando derechos básicos a través de un discurso violento y de odio, en particular hacia las mujeres y disidencias sexo genéricas. Su propuesta representa un peligro para la vida, la democracia, el estado de derecho y los derechos sociales de millones de personas dentro y fuera del territorio nacional. Además de proponer un continuismo económico, concentrando los recursos del país en manos de unos pocos, para profundizar las abismantes desigualdades que nos atraviesan.

A todas aquellas personas que no votaron, votaron nulo/blanco o votaron por otro candidato, les decimos que urge asistir a votar este 19 de diciembre y sumarnos a la campaña para llevar a Gabriel Boric a la presidencia el 2022, y frenar el clima de opresión, negacionismo e impunidad en el país, que ha imperado desde la dictadura y que se ha agudizado con la represión en el mandato de Sebastián Piñera.

Sabemos que todas nuestras demandas no caben en las urnas, por lo que éste es un llamado a votar de manera crítica y consciente, y a continuar organizándonos. Debemos resguardar los derechos que tanto nos ha costado alcanzar y ampliar los que nos faltan, para seguir luchando por un Chile nuevo, más justo para todas, todos y todes. Por eso es fundamental defender la labor de la Convención Constitucional, que ha sido boicoteada desde sus inicios por la derecha, y seguir trabajando por nuestra Nueva Constitución.

Entre las dos opciones presidenciales y sus programas de gobierno, creemos que Boric es el candidato que le dará continuidad a esta importante labor que ha sido el fruto de una larga lucha en las calles y los territorios, además de encaminar la recuperación de la estabilidad del país tras las crisis que ha generado el autoritarismo y las violaciones sistemáticas a los derechos humanos. Sabemos que es un proceso largo y que depende de la sociedad en su diversidad, pero necesita de la mantención de unas condiciones mínimas para detener la violencia contra las comunidades indígenas, especialmente la mapuche, las periferias de las ciudades, las juventudes, las mujeres, las infancias, las disidencias y nuestras hermanas y hermanos migrantes. Solo la democracia a través del diálogo y la igualdad hace posible la seguridad social, económica y política que necesita un país; retomando el clamor popular "sin justicia, no hay paz".

Por esto hacemos un llamado a votar por Gabriel Boric en esta segunda vuelta el día 19 de diciembre, y a unirnos como comunidades chilenas en todos los territorios, apelando también a la solidaridad internacional, para seguir construyendo un país más justo, digno y feliz para todos nuestros pueblos. Tenemos la convicción de que la lógica de odio, individualismo y violencia que históricamente ha desplegado la derecha, no podrá contra la organización colectiva por la defensa de nuestros derechos y de la vida.

¡Venceremos y será hermoso!

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Foto de contexto extraída de chilewokeup.eu/