Luego que Fiscalía confirmara que los restos hallados en la ruta 150 frente al mirador de Lirquén correspondían a Rennatta Rozas, joven de 20 años de edad extraviada desde el 6 de mayo, desde la familia han realizado diversas intervenciones exigiendo justicia y celeridad en el proceso. En la tarde de este miércoles una marcha en el centro de Concepción fue reprimida por Carabineros.
Por Juan Contreras Jara
Con represión por parte de Carabineros se encontraron familiares y amistades de Rennatta Rozas luego de protestar exigiendo justicia por su asesinato. El pasado viernes realizó una concentración afuera de la Fiscalía exigiendo respuestas en la identificación de un cuerpo hallado el día anterior, justamente a poca distancia del último lugar donde fue vista Rennatta, junto a la carretera y el cerro frente al mirador de Lirquén. El martes se anunciaron los resultados de ADN que confirmaron que los restos correspondían a la joven desaparecida.
Este miércoles en la tarde se realizó una velatón y una marcha en el centro de Concepción. Al avanzar por la Avenida O´Higgins hacia las cercanías de la Plaza Independencia, manifestantes protestaron con barricadas hechas con basura del lugar. Allí la marcha fue reprimida por Carabineros.
A continuación compartimos el registro del medio La Zarzamora de la marcha y la velatón.
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El viernes pasado, la familia, redes de apoyo y distintas individualidades, habían llegado hasta el Juzgado de Garantía de Concepción para protestar por la demora en la confirmación de la identidad del cuerpo hallado camino a Tomé, como contra la inacción de las policías en su búsqueda.
Hoy, mientras exigen justicia por este horrendo crimen, la familia y amistades de Rennatta Rozas, se encontraron con la represión de Carabineros, que interrumpieron solo momentáneamente su manifestación, y que luego continuó como una velatón en los tribunales penquistas.
Desde la familia de la joven de 20 años de edad continúan exigiendo celeridad en la búsqueda de los eventuales responsables de su asesinato. Solamente después de 20 días y en medio de un fuerte viento y lluvias que caían en la zona, un aparente deslizamiento de tierra hizo que sus restos mortales cayeran desde el cerro a un costado de la ruta 150, precisamente frente al mirador de Lirquén, a una corta distancia del lugar donde se le perdió la pista el pasado 6 de mayo.