Este martes 7 de octubre, nuevamente los vecinos de Mirador del Pacífico denunciaron tanto a la Constructora Noval, del grupo SALFACORP, como al SERVIU del Bío Bío por el pésimo estado de los departamentos que fueron entregados recién en mayo del 2013. A los reclamos de los vecinos del Lote 7, como informó Resumen la semana pasada, se han sumado las denuncias el lote 12, 10, 4 y 9 los últimos meses. En el 12 se filtra desde el 4º al primer piso.

«A los vecinos que se han ido sumando a las denuncias, se les mojan las paredes, se estropean sus cosas con los hongos y la humedad, tienen a los niños enfermos» señala Débora Salazar, vocera del Lote 7. La problemática de este conjunto de departamentos es que los vecinos no saben si son habitables o no «aún estamos esperando el estudio de los taludes» afirma.

«Nos dan puros calmantes, pero no hay ninguna solución. No saben como pasa la humedad a los departamentos. Según han dicho ellos, no pasaría la humedad desde afuera. Pero ¿Si no es de afuera, de donde es? o ¿somos nosotros los que les tiramos agua a las paredes?»

Los problemas del conjunto son múltiples. Débora comenta que «hace 3 meses que tengo problemas con las llaves. Están malas, se gotean, sale mucha agua, han estallado. Cierro una y se abre la otra» agrega que las ventanas no se cierran y que al cerrarla con fuerza, tiembla el muro y se abre la puerta de entrada.

La Constructora responsable de las obras se retiraría del lugar el 10 de octubre. «Si se va la constructora ¿qué vamos a hacer nosotros?» comenta Débora, agregando que no tienen como resolver los graves problemas de sus hogares. Además indica que las soluciones de la Constructora no duran más que un par de meses, como ha sido la tónica «y para el próximo invierno va a haber más problemas con el agua y la humedad. Pero la Constructora no estará, entonces, ¿A quién vamos a recurrir?»

Los vecinos damnificados por las constructoras de viviendas sociales están haciendo públicas sus demandas por las pésima calidad de las construcciones. Es posible que pronto se articulen en alguna instancia para exigir al Estado una pronta solución al problema, que afecta a una parte importante de la población de la Región, muchos de ellos damnificados tras el desastre del 27/F.