La Corte Suprema confirmó las condenas de 8 años de presidio impuestas a los entonces miembros del Servicio de Inteligencia de Carabineros (Sicar) Manuel Agustín Muñoz Gamboa y Alejandro Segundo Sáez Mardones, en calidad de autores del delito de secuestro calificado de Juan Sebastián Ramos Pastarrieu, estudiante de Derecho, quien sobrevivió a ejecución y posterior lanzamiento al cauce del río Mapocho. El delito fue cometido en octubre de 1974 en Santiago.
Por: Darío Nuñez
En fallo unánime (causa rol 15.137-2024), la Segunda Sala del máximo tribunal –integrada por los ministros Manuel Antonio Valderrama, Leopoldo Llanos, las ministras María Cristina Gajardo, Eliana Quezada y la abogada (i) Pía Tavolari– ratificó la condena y estableció error en la sentencia, dictada por la Corte de Apelaciones de Santiago, que redujo sustancialmente la indemnización que había fijado el fallo de primera instancia, restableciendo el monto inicial.
Sobreviviente
En la investigación judicial la ministra en visita de causas de derechos humanos de la Corte de Apelaciones de Santiago, Paola Plaza González, estableció el día 1 de octubre de 1974, alrededor de las 14:00 horas, Juan Sebastián Ramos Partarrieu, militante socialista, entonces de 22 años de edad, estudiante de cuarto año de la Escuela de Ciencias Jurídicas, Económicas y Sociales de la Universidad de Chile, miembro del Centro de Alumnos de dicho plantel hasta el 11 de septiembre de 1973, en circunstancias que caminaba por Alameda Bernardo O´Higgins con calle Victoria Subercaseaux, fue interceptado por cuatro funcionarios que se identifican como miembros del Servicio de Inteligencia de Carabineros, quienes de manera violenta lo introducen en una patrulla para trasladarlo a una comisaría cercana al sector de su detención.
Enseguida es conducido en otro vehículo motorizado a la Primera Comisaría de Carabineros de Santiago, donde el capitán a cargo de esa unidad no lo recibió como prisionero fundado en que no existía orden de detención en su contra. Desde ese recinto Ramos Partarrieu es trasladado por los mismos cuatro funcionarios policiales hasta el quinto piso del edificio ubicado en calle Bulnes N°80, donde funcionaba la Dirección General de Carabineros. En ese lugar se le interrogó por el entonces capitán del Departamento de Contrainteligencia Germán Esquivel Caballero, hoy fallecido, y en presencia de otros funcionarios de la misma repartición.
Luego de ser objeto de golpes, amenazas y agresiones reiteradas en su cuerpo, los mismos cuatro funcionarios de Carabineros que procedieron a su detención, alrededor de las 22:00 horas, lo introducen en una camioneta en la que es trasladado hasta la ribera del río Mapocho en el sector de Pudahuel, donde le propinan cuatro disparos con armas de fuego, lo golpean y lo lanzan a las aguas del río, todo ello en supuesta represalia por su actividad política y estudiantil, opositora al régimen imperante.
Encontrándose herido, el joven Ramos Partarrieu logra por sus propios medios salir de ese lugar para pedir ayuda a vecinos del sector, quienes lo asisten contactando a sus familiares, tras lo cual, al cabo de unos días y medianamente recuperado, con la ayuda de terceros abandona el territorio nacional por el riesgo inminente que afectaba su vida.