Para apoyar a la Familia Marihuén y repudiar públicamente el desalojo del cual serán objeto en las próximas horas, se realizó la cuarta Marcha que recorrió las calles céntricas de la ciudad de Coronel, el pasado día Viernes 05 de Junio de 2013, al mediodía.

La columna llegó hasta la Plaza Jorge Rojas Miranda, en las inmediaciones del Mercado,  donde representantes de Sindicatos, Estudiantes, Organizaciones Vecinales y Agrupaciones Culturales, se convocaron para manifestar el apoyo frente a lo que consideran una injusticia.

La Familia Marihuén lleva más 80 años viviendo en el territorio y viene siendo ocupado por las sucesivas generaciones que al presente son 8 familias las que integran esta Comunidad Mapuche. Han sido testigos del desborde poblacional de Coronel y ha visto cómo se la ha rodeado de Industria Contaminante; ahora ven con impotencia la usurpación de su propio territorio para instalar una industria más a las que ya existen, terminando por encerrar definitivamente a la ciudad. 

De acuerdo a lo manifestado por la Familia en varias declaraciones, los responsables del despojo serían Alejandro Bravo Castillo, que inició este proceso para quitarles las tierras y fue asesorado por el conocido abogado Pedro Catril, pariente directo de una ex integrante de la comunidad, Francisca Catril. Pedro Catril confabuló con Bravo para inscribir los terrenos como propios y completar un lucrativo negocio con la industria contaminante.

Así las cosas, no sólo la Comunidad Marihuén es perjudicada con este desalojo, sino la ciudad de Coronel en su conjunto, porque eliminará a la última Comunidad Mapuche que se encuentra traspasado el Río Bío-Bío y puerta de entrada al Territorio en Recuperación. Por otro lado, seguirán instalando industrias contaminantes, a pesar de la prohibición establecida en el Plano Regulador.

Un dato más; una Campaña de Contra Información, en medios de comunicaciones locales y nacionales, asegura que la Familia Marihuén habría aceptado y estaría instalada en nuevos terrenos que habría entregado la autoridad Regional.

La propia Familia desmiente estas informaciones, las que buscan bajar el férreo apoyo de la ciudadanía y desviar la atención para ejecutar la orden de desalojo, dejando a la Comunidad Marihuén abandonada a su suerte.

Los llamados a la solidaridad para proveer de víveres alimenticios a las 8 familias, puesto que el conflicto les ha impedido desarrollar labores productivas de autosustento; y el acompañamiento y vigilancia frente al desalojo para no permitir que se cometan atropellos a los Derechos Humanos, en especial de niños y niñas integrantes de esta comunidad, es lo que se espera de las comuna de Coronel, Lota, San Pedro y Concepción en lo más inmediato; y del resto del País las acciones informativas y de apoyo internacional que requiere este caso.-