[resumen.cl] Este sábado por la noche, familias amenazadas con desalojos en el Fundo Las Escaleras de la península de Hualpén y personas que han montado un campamento de apoyo denunciaron que desconocidos realizaron un ataque con disparos durante más de una hora directamente hacia las casas y lugares donde pernoctan. Posteriormente, durante la jornada de este domingo, indicaron que fueron amenazados por el conductor de una camioneta con un arma de fuego.

En conversación con Resumen, Ricardo Ibáñez, residente del lugar hace más de 60 años, explicó que esa noche del sábado «como a las 12 hubo unos balazos y después empezaron a balear y balear desde el lado donde viven los Yaconi, desde ahí baleaban para acá, como cuarenta balazos, un balazo pasó por aquí entremedio de los árboles, pasó por arriba, de ahí siguieron disparando, dispararon pal bajo, habían niños chicos» denunció

El vecino indicó que el ataque duró aproximadamente entre una hora y una hora y media. Aclararon que aunque identificaron la dirección desde donde venían los disparos, no pudieron ver a los atacantes en la oscuridad, alcanzando únicamente a parapetarse ellos y proteger a niños y niñas pequeñas, ante el temor de que les llegara un tiro.

Posteriormente explicó que en la mañana del domingo llegó Carabineros al portón de entrada al terreno donde viven y luego se fueron del lugar. Después hubo un altercado entre una de las personas que realiza la guardia en el terreno donde viven las familias, y un conductor que se detuvo frente al portón de forma sospechosa. Ricardo explicó que el joven salió con un palo y el conductor lo amenazó un un pistola, haciendo que el joven tuviera que escapar del lugar.

Ricardo aclaró que si bien las familias residentes del lugar están amenazadas con desalojos por parte del empresario Felipe Yaconi, recalcó que no conocen la identidad de los atacantes, ni cual era su motivo. Personas que están apoyando la lucha de las familias en Las Escaleras indicaron que escucharon gritos, y entre 40 y 50 disparos en 2 zonas, además divisaron linternas y ante el miedo tuvieron que pasar la noche sin dormir. Además se percataron que durante la jornada había gente consumiendo alcohol en las cercanías y escuchando música muy fuerte. «Son situaciones muy violentas que estamos viviendo nosotras, por eso pedimos que las personas que apoyaban esta causa, que se hagan presentes en estos días para acompañar» recalcó una integrante del grupo de apoyo a las familias amenazadas con desalojos.

Un familiar quien volvió ahora hace dos meses a residir permanentemente en la zona para apoyar a su familias indicó que «anoche fue espantoso, nunca pensé que iba a llegar a tal extremo de recibir balas a menos de 50 metros de las casas y sin motivo alguno tampoco». El vecino denunció que sentían el impacto de los proyectiles en los árboles y muy cerca de sus casas. Además, aseguró además que no hubo provocaciones de ningún tipo que pudieran haber gatillado un conflicto.

Ante las amenazas de desalojos, y una eventual próxima arremetida de negocios inmobiliarios, turísticos y de otros negocios como energético y salmonero, las familias y los integrantes del campamento señalan que buscan permanecer en el lugar donde han habitado históricamente. «Queremos quedarnos aquí porque vivimos hace 60 años, tenemos hartas raíces, yo tengo hijos y nietos criados aquí, vivimos del mar, con el sustento del mar, por eso no podemos irnos a otro lado porque con los años que llevamos viviendo aquí, irnos a otro lado y dejar esto sería dejarselos a ellos para que hicieran lo que quisieran, explicó Ricardo.

Fotografía: https://radiokurruf.org