El pasado 7 de noviembre se realizó una manifestación en apoyo a los presos políticos mapuche. La actividad no se pudo realizar con normalidad pues Carabineros no dejaba pasar ni siquiera por la vereda a los manifestantes. En ese contexto fue detenido José Baeza Galleguillos de 23 años de edad junto con otros 4 jóvenes: ellos fueron liberados tras el control, pero José pasó a control de detención el día siguiente, pues se le habrían encontrado antecedentes relacionados con faltas leves pendientes. Se le estaría acusando por parte de la fiscalía de un ataque con bombas incendiarias en septiembre pasado tras una marcha estudiantil, lo que habría quedado registrado en una serie de fotografías.
Compañeros de José señalan que las pruebas presentadas por la fiscalía no tienen asidero ni relevancia alguna, pues en la marcha donde supuestamente ocurrieron los ataques con molotov, no se presentaron este tipo de confrontaciones, sino que más bien se produjo la destrucción de un semáforo. Acción por la cual los involucrados ya habrían respondido a la justicia chilena. Por ello señalan que se ha construido un montaje para encarcelar a José, y así amedrentar a todos los que solidarizan con la causa mapuche.
La situación de José es compleja, pues se encuentra en prisión preventiva en la cárcel Santiago 1 tras haber sido trasladado desde Concepción por la detención del 7 de Noviembre. Está arriesgando una posible condena de entre 3 y 10 años de cárcel en un juicio que se le realizaría el 9 de diciembre próximo.
Los montajes de las fiscalías contra los luchadores sociales en los últimos años no es nuevo. El paradigmático caso Bombas ha sido la mayor muestra de la represión ejercida a través del Ministerio del Interior y la fiscalía contra los movimientos sociales. Entre las comunidades mapuche, la figura del montaje es de una cotidianidad bestial. En Concepción, el caso del Ex presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Concepción Recaredo Gálvez fue una muestra de lo que puede llegar a hacer un organismo represivo, manteniéndolo en prisión preventiva en la Cárcel El Manzano y persiguiéndolo judicialmente. Que lo de José sea un montaje, no sería una sorpresa para nadie.
Foto: momento de la detención de José en Concepción.