El President, perseguido por las autoridades españolas conjuntamente con el resto de exiliados catalanes por la organización del referéndum de determinación de Catalunya del 1 de octubre de 2017, se dirigía a la ciudad de l'Alguer, enclavamiento catalán en la isla de Cerdeña, (Italia) donde tenía previsto participar de unos actos oficiales y culturales, cuando fue detenido en el mismo aeropuerto por parte de la policía italiana.
Por Marc Serra i Torrent
Una detención irregular
En julio pasado, las autoridades españolas comunicaron al Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) que habían suspendido temporalmente las euroórdenes de detención en contra de Puigdemont, por lo que el TGUE dispuso que no había razón para mantener medidas cautelares consistentes en otorgar inmunidad al President catalán, que también es europarlamentario.
Por este motivo las defensas están confiadas en que brevemente se decrete la libertad de Puigdemont, y por otra parte, sale a la luz de nuevo las malas artes de las autoridades españolas que habrían comunicado una cosa al TGUE pero que en realidad no habrían ejecutado (la suspensión de las órdenes de detención), tensando nuevamente y gravemente las costuras democráticas de las instituciones europeas.
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Respuesta de la sociedad catalana
Desde todos los ámbitos de la sociedad catalana se ha criticado duramente la detención de su presidente al exilio y esta mañana diferentes entidades sociales y políticas catalanas ('mnium, ANC y CDR) han convocado una concentración delante del Consulado italiano en Barcelona que se prevé multitudinaria. Por la tarde se han convocado concentraciones en los cerca de 1.000 ayuntamientos catalanes para protestar por esta nueva detención que desoye las resoluciones de las principales instituciones judiciales y de derechos humanos europeas.
Cabe recordar que este mismo mes de junio, el Consejo de Europa instó al Reino de España a dejar de perseguir a políticos catalanes por sus ideas e instó al retorno libre y sin cargos de todos los exiliados.
Consultado por RESUMEN, el abogado de Puigdemont, el chileno Gonzalo Boye, señaló que el Tribunal Supremo español ha hecho una maniobra para provocar una detención ilegal:
La detención de este jueves puede tener consecuencias directas tanto en la relación entre los gobiernos catalán y español, que retomaron la semana pasada una mesa de diálogo que ha sido muy criticada por la parte catalana que no ve compromisos para abordar el conflicto en su raíz, por parte del gobierno español; como dentro del mismo gobierno español y catalán que a su vez están formados por coaliciones con diferentes estrategias delante del conflicto político.
Nota de actualización: Puigdemont quedaría en libertad este viernes sin medidas cautelares hasta que el juez resuelva sobre el caso, pero deberá continuar en Cerdeña durante el proceso judicial.