[resumen.cl] Devastadores incendios arrasan selvas y sabanas por más de 16 días en los estados de Rondonia, Acre, Mato Grosso y Mato Grosso del sur en Brasil. Es el mayor número de incendios en los últimos 7 años y la temporada aún no termina. Expertos indicaron que los incendios habrían sido causados por las condiciones climáticas de la temporada seca y la acción de terratenientes y asaltantes que buscan explotar las tierras. Desde distintos sectores apuntan al gobierno de Bolsonaro por su desprotección ambiental y por facilitar las condiciones para la explotación del Amazonas a todo nivel. 

Según el instituto nacional de investigaciones espaciales (INPE) de Brasil se han registrado 71.497 focos de incendios entre este 1 de enero y el 18 de agosto.

Los datos arrojaron que el número de focos ha aumentado un 82% con respecto al mismo periodo del año pasado, donde se registraron 39.194 focos.

Imagen de satélite del INPE muestran centenares de focos de incendio (asignados como cruces rojas) Extraída de Brasil de Fato 

Según datos de la NASA un 50.5% de los incendios se registran en la selva amazónica, mientras que un 39,1% se registraron en el bioma Cerrado, principalmente sabanas.

Imagen del sistema de monitoreo meteorológico Windy del 18 de agosto que muestra una alta concentración atmosférica de monóxido de carbono CO en los estados de Acre, Rondonia, Mato Groso y Mato Groso del Sur junto a la triple frontera de Bolivia y Paraguay. Fuente: windy.com imagen extraída de Brasil de Fato 

El pasado 10 de agosto terratenientes del Estado de Pará habían declarado el «día del fuego»  según informó Folha de Sao Paulo. 

Ayer martes se oscureció a las tres de la tarde en la megalópolis de Sao Paulo. Aún no hay claridad sobre las causas pero se cree que la influencia del material de las quemas en la atmósfera en combinación con otros factores meteorológicos incidió en el fenómeno.

La ciudad de Sao Paulo se oscureció este martes 19 a las tres de la tarde. Foto: Otavio Valle / Folhapress imagen extraída de https://www1.folha.uol.com.br

A principios de este 2019 un estudio reportó que las emisiones de carbono por incendios forestales han superado a las emisiones asociadas a la deforestación de la selva amazónica según consignó el INPE.

Looking more closely at yesterday’s smoke over South America, the aerosol index from #NOAA20 #OMPS was in double digits! Values on the right refer to the UTC of the measurements. pic.twitter.com/3XBqoEVs4M

-- Colin Seftor (@colin_seftor) August 19, 2019

En junio comenzó la temporada seca que posibilita una tala más fácil, y se registraron un 80% más de pérdidas que en junio de 2018.

Solamente en el pasado mes de junio se perdieron 762,3 kilómetros cuadrados de selva, un equivalente a casi cuatro veces el área de la ciudad de Buenos Aires.

Las medidas de Bolsonaro han incidido fuertemente en la destrucción de la Amazonía

A inicios de este mes de agosto, el gobierno de Bolsonaro despidió al director del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE) la institución que monitorea datos sobre deforestación. Según el presidente, el despido se debió a la divulgación de información «irresponsable».

La porción del Amazonas brasileño ha perdido más de 3.000 kilómetros cuadrados de selva desde que Bolsonaro asumió la presidencia, en un aumento del 39% con respecto al año pasado.

Con la llegada del verano amazónico, la floresta queda suceptible a incendios, su principal método de desmonte por terratenientes y delincuentes. Foto: Prefectura de Diamantino, imagen extraída de https://www.brasildefato.com.br 

Desde 2018 Bolsonaro ha buscado hacer más flexibles los controles que evitan la deforestación, quitando capacidad de acción al Instituto Brasileño de Medio Ambiente y de Recursos Naturales Renovables. También Bolsonaro ha impulsado la extracción minera en tierras indígenas.

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Las políticas de Brasil en materia forestal han chocado con Alemania y Noruega quienes apoyan el Fondo Amazonía que financia proyectos de conservación de la selva.

Recientemente ambos países han congelado los fondos para estas iniciativas.

Por su parte, este miércoles, Bolsonaro señaló que los incendios podrían haber sido provocados por ONGs de protección del medio ambiente según informó Folha de Sao Paulo. Sin embargo el presidente no presentó pruebas de aquello.