La iniciativa conservadora ingresada por los diputados Cristóbal Urruticoechea (Biobío) y Harry Jürgensen (Los Lagos) busca prohibir "alteraciones gramaticales y fonéticas que desnaturalicen el lenguaje" en la educación parvularia, básica y media, lo cual apunta directamente al uso de lenguaje inclusivo y neutro.
Por José Figueroa Soto
Durante los últimos años se ha estado debatiendo sobre la necesidad de fortalecer la inclusión en los sistemas educativos evidenciando diversos puntos a tratar. Uno de ellos es el lenguaje, el cual ha priorizado los pronombres masculinos invisibilizando a mujeres, personas no binarias, entre otras identidades; ante esto hay quienes han optado por modificar el lenguaje utilizando la letra "e", "x", "@" para abarcar todas las identidades.
No obstante, en el último tiempo se ha visto una nueva arremetida conservadora que busca eliminar y prohibir este tipo de lenguajes. Este es el caso de Francia, país que en mayo de este año prohibió el uso de lenguaje inclusivo dentro de sus escuelas por considerarlo incensario y confuso para niños, niñas, niñes y adolescentes.
Basados en este antecedente, los diputados oficialistas Cristóbal Urruticoechea y Harry Jürgensen, ambos militantes de Renovación Nacional, ingresaron un proyecto de ley que buscar prohibir la utilización de lenguaje inclusivo dentro de los establecimientos educacionales reconocidos por el Estado chileno, afectando a la educación parvularia, básica y media.
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"Estamos convencidos que esta reforma constitucional tendrá un impacto positivo en la educación nacional y promoverá el uso correcto, oportuno y adecuado del lenguaje dentro de las aulas de clase, impidiendo que las ideologías contaminen mediante el lenguaje la educación de los niños y adolescentes, y evitando que de este modo se coarte o restringa el derecho preferente que tienen todos los padres y madres de educar a sus hijos según los valores y principios que estimen pertinentes", señala la iniciativa.
Bajo ese argumento el proyecto busca modificar el artículo 19 N°11 inciso tercero, que actualmente señala: "La enseñanza reconocida oficialmente no podrá orientarse a propagar tendencia político partidista alguna«.
En caso de ser aprobada la iniciativa se añadiría: "Asimismo, se prohíbe en la educación parvularia, básica y media el uso de alteraciones gramaticales y fonéticas que desnaturalicen el lenguaje dentro de la enseñanza oficial reconocida por el Estado".
El proyecto ha recibido diversas críticas por parte de organizaciones y activistas disidencias sexuales por intentar imponer un paradigma conservador y negar la diversidad que existe dentro de los sistemas educacionales.
Fotografía principal: LT