La historia es Nuestra y la Hacen los Pueblos.
A mi hermano, tío, padre, abuelo y amigo caído en Dictadura
Ayer, febrero de 1975, un hombre cae. Ayer, una patria cae. Ayer, un pueblo cae. Hoy día, el pueblo se ha reunido para hacer la historia. Hoy día rememoramos a Eulogio.
Hombre de pueblo, hijo de Manuel Fritz y Olivia Monsalve. El mayor de los hermanos, estudiante y amigo. Hermano fiel con bromas y risas. Su recuerdo presente radica en el legado de su foto. Como si su mirada estuviera en nosotros, esperando llegar a casa, a ver los viejos después de un tiempo, a sus hermanos más chicos, desde la lejanía del norte, desde Santiago, de Concepción, de Lota, de Coronel y de tantos lugares que nunca supimos.
Hijo y hermano presente y ausente. Como si su nobleza no se extrañara, su voz clara y firme en su relato. Dicen que la historia moldea a los hombres. Eulogio creyó en su propia historia. La historia de su padre, minero de toda una vida. Su madre, leal y cariñosa, maternal y cuidadosa criadora de hijos junto al horno de barro. Tal vez el ejemplo preciso de amor por sus iguales. Eulogio, probablemente jamás pensó que la historia daría un vuelco, pero ella fue la que engendro las convicciones que moldearon su vida.
Alumno de Schwager, estudiante virtuoso y con anhelos. Universitario de grandes lemas, que contradicciones resueltas, de preparativos futuros en la ingeniera.
Nunca pensamos que el desierto y la pampa, darían origen al estudio de las ideas de Marx y Engels, del proletariado y la crítica al capitalismo burgués. Nunca pensamos que aquellos aires del norte, diseñarían estrategias de férrea disciplina, de militante fiel y convencido en la revolución. Jamás pensamos que nuestro hermano, seria líder de encomiendas políticas en nuestro propio pueblo, ni que trabajaba por el poder popular para construir una sociedad más justa e igualitaria. Creemos por tanto, que su trabajo ideológico a tiempo completo, permitió construir una nueva historia en este país. Aquella historia donde los pueblos tienen propia representatividad. Son para él, la pobreza y los trabajadores el ámbito de su lealtad política y por ella, su voluntad combativa.
Hasta el día de hoy, El Duro Pablo, continúa sin decirnos donde está. Como si conservara aun ese perfil del que dan fe sus propias camaradas. Como si aún no quisiera involucrarnos, delatarnos, precipitarnos al vacío. Sólo, afrontando su realidad sin causar daños a quienes lo aman y esperan. Pablo, ¿dónde estás? Por qué no nos hablas?, por qué no deseas entrometernos en tu vida? No seas tan cauteloso y no te guardes tantas cosas.
Después del Golpe Militar, su entrega militante le significo volcar su acción hacia Santiago. Si antes no sabíamos que ocurría con él, menos ahora. Con la conciencia clara de que la tormenta se venía fuerte, sigue en la lucha contra la dictadura. Plenamente convencido de su tarea revolucionaria, cae abatido por disparos de agentes de la DINA. Tratando de generar contactos y nexos estratégicos para mantener la articulación del MIR, los criminales lo trasladan a Grimaldi, desde donde no nos ha querido hablar. Eulogio, nosotros ya conocemos tu historia, permítenos reencontrarnos.
Hoy, la historia ha querido entregarnos nuevas pistas, acerca de cómo debemos concluir nuestro relato en torno a Pablo. Muchos amigos, periodistas, historiadores, políticos, han dado fe que los procesos en contra de los criminales y asesinos de la dictadura, no están resueltos aun. Hay mucha evidencia y compromiso de otras personas que desean cooperar con el esclarecimiento de la verdad. Y no solo es la verdad, sino que lo que realmente interesa es su paradero, es el lugar mismo donde podemos ir a decirle a Eulogio que estamos con él, que su lucha no fue en vano, que sus ideales también son los nuestros y que con más fuerza hoy, queremos cambiar las cosas en este país.
Sabemos quiénes fueron sus asesinos y sabemos cómo lo vieron la última vez. Es un paso para conocer la verdad que nos permita reencontrarnos con mi hermano, tío, padre y esposo, hoy también abuelo.
En los últimos meses, hemos visto como la historia de nuestro país se metamorfosea con los nuevos ideales de propaganda neo burguesa y empresarial. Hemos visto en el último tiempo que han querido borrar la verdad de los libros de historia, aludiendo a una inexistente dictadura. El Régimen Militar del General Pinochet, ha sido y será una de las lecciones más horrorosa y tristes conocidas en nuestro país y en todo el mundo. No solo por la violencia ejercida en contra de personas inocentes, sino también, por la excesiva crueldad con que se manejó el gobierno y la instalación de políticas que nos afectan hasta hoy.
Reabierto el caso en contra de muchos criminales de la dictadura, esperamos que los cómplices de Pinochet, Manuel Contreras, Moren Brito, Krassnoff Martchenko, Bazclay "troglo" Zapata y el Guatón Romo, quienes son los responsables directos de la desaparición de Eulogio Fritz, entreguen la información necesaria para aclarar los hechos y que la justicia se haga presente apoyando los familiares de las víctimas en el esclarecimiento de la verdad.
Hoy día, estamos reunidos para recordar, para sentir por un momento que estamos cerca, que podemos ver a Eulogio, que nos hace bien estar juntos como familia, con los amigos y compañeros. Tal vez, debemos escuchar a Piazzolla para escuchar también a Eulogio, o leer más seguido a Vallejo, pero sin duda, nuestro principal recuerdo será el de un hombre valiente y generoso, que por sobre todas las cosas, nunca permitió que su familia fuera arrastrada por el horror.
Verdad y Justicia para Pablo el Duro.
Coronel, 25 de febrero 2012
Foto: Olivia Monsalve, madre de Eulogio Fritz (Duro Pablo) depositasita flores en el monolito que le recuerda en Villa Mora Coronel.