Por Ariel Ríos Pincheira
Durante el gobierno de Salvador Allende ya se tenía confirmación de la injerencia Norteamericana en la desestabilización de su administración, actos tendientes a desarrollar en Chile un golpe de Estado en contra del presidente y el proyecto de la Unidad Popular.
A mediados de marzo del 1972, en el "Washington Post", el periodista norteamericano Jack Anderson hizo públicos los documentos secretos de ITT (International Telephone & Telegraph), los cuales fueron traducidos y publicados por Quimantú el 3 de abril de ese mismo año en un libro que se difundiría masivamente en Chile "los documentos secretos de la ITT", en ese texto queda al desnudo no solo la acción de las empresas norteamericanas, también del gobierno estadounidense para impedir el desarrollo del gobierno y luego generar la condiciones para el derrocamiento del gobierno popular.
En 1974 el periodista norteamericano Seymour Hersh, en "The New York Times", develó las operaciones encubiertas de la CIA para derrocar a Allende, el artículo provocó un escándalo internacional y la apertura de una investigación con audiencias públicas en el Senado de Estados Unidos, que resultó en el informe Covert Action in Chile, 1963-1973.
La CIA seguía el acontecer político en Chile, muy intensamente y mucho antes de la elección de Salvador Allende en 1970. Ya a inicios de los años cincuenta desembarcó en Chile un joven periodista norteamericano, contratado como agente de la CIA con el objetivo de infiltrase en organizaciones de izquierda en Chile, su nombre era David Atlee Phillips, bajo la «chapa» de Paul Langevin, en 1952 el agente envió un informe detallado a sus jefes en la CIA, había presenciado el discurso de un dirigente del Partido Socialista y quedó impresionado con la fuerza de su oratoria, el líder socialista se llamaba Salvador Allende y por ello recomendaba prestar atención a este político.
Con los años David Atlee Phillips se convirtió en uno de los más importantes agentes de la CIA, llegando a ser jefe de la agencia para todo el Hemisferio Occidental. Allende fue el primer marxista en ser elegido en las urnas 18 años más tarde, en su cuarta candidatura presidencial. La primera vez que lo intentó, en 1952, apenas obtuvo 5% de los votos.
En 1999, el presidente estadounidense Bill Clinton ordenó una desclasificación masiva de archivos de la CIA y otros órganos referidos a Chile, tras la detención de Pinochet en Londres. El material constituye más de 24.000 documentos secretos y cubre el período entre 1970 y 1990, partía desde la elección de Allende e incluía los 17 años de la dictadura.
A partir de ahí se han escrito diversos artículos y libros, donde se confirma el papel jugado por el presidente de los Estados Unidos, Richard Nixon, y su Consejero de Seguridad Nacional Henry Kissinger. Por el libro "Pinochet File: A Declassified Dossier on Atrocity and Accountability" (The New Press, 2013), sabemos detalles de todo lo ocurrido entre el día 4 de septiembre de 1970, en que Allende fue elegido presidente, y el día 24 de octubre del mismo año, en que asumió el cargo:
"Ese hijo de puta, ese hijo de puta", gritaba Richard Nixon golpeándose la palma de la mano con el puño, al tiempo que Edward Korry (embajador de los Estados Unidos en Chile) y Henry Kissinger entraban en el Salón Oval de la Casa Blanca, a las 12.54 del 15 de octubre. Cuando NIxon vio la expresión de espanto del embajador Korry, Nixon afirmó: "Usted no, señor embajador. Es el hijo de puta de Allende, vamos a aplastarlo".
El plan orquestado por la CIA para impedir la asunción de Allende es bastante conocido, los 50 mil dólares destinados por la agencia para que el general en la reserva Roberto Viaux reclutara mercenarios para desarrollar acciones que impidiesen que Allende asumiera, y que se materializaron el fallido intento de secuestro del comandante y jefe del Ejército de entonces, el penquista y constitucionalista general René Schneider.
La gente de Viaux no pudo consumar el secuestro de Schneider, al materializar la acción el día 22 de octubre, Schneider ofreció resistencia a sus captores, tiroteado cae herido y luego de tres días de agonía, muere en el hospital, sin que se produjera ningún alzamiento militar que impidiera a Allende asumir el cargo.
El plan había sido detectado por un equipo de inteligencia del MIR, e informado a responsables de la Unidad Popular, quienes mejor podían operar con dicha información en el gobierno aún en ejercicio de Frei Montalva. El miércoles 21 a las 10:00 de la mañana, el MIR tenía claro todos los detalles del plan, y ante la inacción de las autoridades del gobierno, hizo público parte de dicho plan, nombrando solo a los civiles y oficiales en retiro involucrados, solo un detalle se les escapó a los miristas: el plan contemplaba el secuestro del comandante y jefe Rene Schneider.
Hace unos días, entre los nuevos documentos desclasificados se pudo conocer una conversación telefónica entre Nixon y Kissinger transcrita por la NSA (Agencia Nacional de Seguridad por su sigla en ingles): "¿Qué está sucediendo en Chile?", preguntó Nixon a Kissinger, este respondió: "la operación había fracasado". Para asegurarse, Nixon quiso saber si "ellos tomarían el gobierno", "Esta era la teoría" respondió Kissinger", "Pero son una banda de incompetentes", añadió Nixon, refiriéndose a los militares chilenos que apoyarían el golpe, frase reproducida en titulares en algunos medios nacionales la semana pasada.
Últimos Archivos desclasificados de la CIA (26 agosto 2023)
El pasado sábado 26 de agosto dos nuevos documentos de la CIA fueron desclasificados. Se trata de parte de los informes diarios de inteligencia de la CIA sobre la situación del mundo, que el presidente del EEUU recibía todas las mañanas. Los archivos desclasificados este sábado corresponden a los días 8 y 11 de septiembre de 1973.
El informe del día 8 muestra que tres días antes del golpe, la CIA no tenía seguridad del involucramiento, ni del Ejército ni de la Fuerza Aérea: "si los cabezas calientes de la Armada actúan creyendo que van a tener apoyo de los otros servicios se pueden quedar aislados". El informe del día 11, redactado probablemente la noche anterior, señala que el golpe ha ganado apoyo en "unidades militares clave".
Tras el golpe, el gobierno de Estados Unidos dio soporte a la junta militar en diversos planos: financiero, militar y diplomático. Un vínculo significativo fue el de Manuel «Mamo» Contreras con la CIA, a sueldo de la Agencia entre 1974 y 1977, esto incluso después del atentado con bomba en Washington, que costó la vida del excanciller chileno Orlando Letelier y su asistente, la ciudadana norteamericana Ronni Moffitt, en septiembre de 1976.
En 1976 Pinochet recibió a Kissinger en Santiago, con motivo de la reunión en la capital chilena de la VI Asamblea General de la OEA. En esa visita Kissinger advirtió a Pinochet que tendría que referirse brevemente al informe elaborado por la Comisión de Derechos Humanos de la OEA sobre la situación en Chile.
Entre los ejecutados o desaparecidos de la dictadura estaba el ciudadano americano Charles Horman, el periodista cuya historia inspiró a Costa Gavras para su película «Missing» (1982, Palma de Oro en Cannes y Oscar al mejor guion adaptado). Los documentos desclasificados revelan que la CIA no solo conocía la situación, sino que también pudo haber participado del asesinato de Horman.
Con la presidencia del demócrata Jimmy Carter (1977-1981) Pinochet perdió apoyos en EE.UU., cuestión que se mantiene con Ronald Reagan, un neolibreal ultraderechista. En entrevista a "The New York Times", el entonces Secretario de Estado adjunto, Langhorne Anthony Motley, dijo sobre Pinochet: "[Es] el loco más difícil que ya vi. Hace que Somoza y el resto de estos tipos parezcan una banda de ingenuos". Reagan presionó a Pinochet para dar una salida política, pero el dictador se aferraba al poder, finalmente, Washington impone su agenda y Pinochet convoca un plebiscito el 5 de octubre de 1988.