Ecuador: un comunero quichua asesinado tras cumplirse una semana de protestas

En las últimas horas las agrupaciones de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Amazonía Ecuatoriana (Confenaie) informan de una persona asesinada en Pastaza. Se trataría de un comunero quichua llamado Guido Guatatoca. Las autoridades ecuatorianas no han confirmado el hecho, conformando la primera víctima fatal de la represión policial durante este ciclo de manifestaciones.

Por Adrián Ríos Pincheira

La policía nacional, en un comunicado público, señaló que el hecho fatal se produjo por la manipulación de un artefacto explosivo por parte de la víctima y que ellos no utilizarían ese tipo de material. Los grupos indígenas movilizados ya informaron a los organismos de derechos humanos para que se investigue a fondo lo sucedido.

Por su parte, el medio comunitario Wambra informó que el manifestante murió por el impacto de una bomba lacrimógena en la cabeza

En tanto, Leonidas Iza, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas (Conaie), sostuvo que hay un centenar de heridos, 79 detenidos y dos fallecidos durante las protestas.

 

https://twitter.com/confeniae1/status/1539401956753559552

En el sector Estación Sacha Central de la Provincia de Orellana, la represión por parte de efectivos militares ocasionó una herida grave en el manifestante Paúl Nuñes Brunes, que terminó con la amputación de una de sus manos, informó la Alianza por los Derechos Humanos de Ecuador.

https://twitter.com/CONAIE_Ecuador/status/1539430471297142784

La misma organización indica que al menos seis personas han sufrido traumas oculares y 18 presentan heridas de gravedad.

Este lunes en la altura del redondel de Collas, en Guayllbamba el manifestante identificado como Jhonny Saúl Félix Muenala falleció debido a la represión policial, cayendo hacia una quebrada de más de 100 metros de altura.

 

 

Novena jornada de Paro Nacional por mejores condiciones de vida para la población rural, indígena y urbana

Las manifestaciones de diversos sectores populares e indígenas del Ecuador ya pasaron una semana. Es así que este martes el alcalde de Quito, Santiago Guarderas, aseveró que quedarían alimentos para tres o cuatro días en la ciudad. Además, se acercan a una situación crítica de tipo sanitario, ello debido a que no se ha podido recoger la basura producto de las masivas protestas que exigen al Gobierno la reducción del precio de la gasolina, entre otras demandas, según informó la agencia de noticias neoyorquina Associated Press.

El alcalde Guarderas manifestó a la agencia que "es dramática la situación" y continúa afirmando que los mercados "están quedando desabastecidos por el cierre de carreteras y porque los vehículos que traen los productos no han podido pasar". Otro de los aspectos preocupantes radica en que "los carros recolectores de basura no pueden circular y la basura comienza a acumularse en distintos sectores, lo que podría generar una emergencia sanitaria porque no se pueden recoger unas 2.000 toneladas (de basura) diarias".

Desde el pasado 14 de junio, la Conaie, que agrupa a diferentes grupos, mayoritariamente andinos, mantiene un paro nacional de carácter indefinido y que ha afectado en particular a seis provincias del centro norte del país. La principal demanda se relaciona con la reducción del precio de la gasolina, la fijación de precios de los productos agropecuarios, dada la fuerte inflación que afecta a Ecuador, también el reclamo se extiende a aumentar el presupuesto para educación y otros servicios básicos.

Durante la tarde de este martes el medio Wambra informó de agentes policiales y militares disparando con diverso tipo de armamento contra manifestantes y contra la prensa.

Por otra parte, el gobierno del derechista presidente Guillermo Lasso ha intentado controlar la situación declarando estado de excepción para las provincias de Imbabura, Pichincha (capital Quito) Cotopaxi, Tungurahua, Chimborazo y Pastaza, pero la medida ha sido estéril, pues las protestas se multiplican día a día, tornándose cada vez más frontales e incluyendo acciones directas como saqueos a comercios.

 

El alcalde continúa declarando que "He pedido ayuda a la policía y el ejército nacional para que intervengan, porque Quito ha sido declarada zona de seguridad, pero se mantienen los excesos de violencia y vandalismo de los manifestantes".

Así, el país andino vive un nuevo estallido de protestas como las ocurridas en octubre de 2019, gatillas nuevamente por el precio de los combustibles, pero que apuntan a problemas estructurales que vive Ecuador en diversos ámbitos, principalmente la falta de derechos sociales garantizados por el Estado.

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