El lunes 26 de septiembre de 2022 fue un día histórico no solo para Colombia y Venezuela, sino para toda Latinoamérica: tras años de cierre, la frontera colombo-venezolana era reabierta.
Joaquín Pérez
El propio presidente de Colombia Gustavo Petro estuvo presente en el acto, ante la alegría de las ciudades vecinas como Cúcuta (Colombia) y San Cristóbal (Venezuela), que ven con ello reactivada sus economías y sus vínculos familiares. Ese mismo día, la extrema derecha colombiana convocó manifestaciones en las principales ciudades de Colombia, donde grupos salieron a protestar contra las medidas adoptadas por el gobierno recién asumido de Gustavo Petro, criticando la reforma tributaria que grava las más altas fortunas del país.
De aquellas manifestaciones quedará la imagen y las palabras expresadas por una mujer, quien, en la Plaza de Bolívar de Bogotá, señaló que el gobierno del presidente Petro es "de simios como Francia Márquez" y que "con los comunistas no se dialoga, se les pega un tiro en la mula (la boca) y pal´ río". El discurso del odio es signo de identidad de todas las extremas derechas en el mundo.
Sin embargo, fueron estas protestas escasamente concurridas, las que coparon los medios de comunicación empresariales en Colombia, quienes naturalizaban de paso los discurso de odio, silenciando el hecho histórico de la reapertura de frontera entre Colombia y Venezuela, en una clara señal, que como a otros procesos de cambio político en el continente, le falta una estrategia comunicacional, para atenuar el impacto que la propaganda de medios empresariales monopólicos, de claro signo ideológico tienen en Latinoamérica.
Por otra parte, ese mismo día ocurrió otro hecho: junto a la apertura de fronteras terrestres, estaba contemplada la reapertura de fronteras aéreas, con vuelos comerciales entre Colombia y Venezuela, sin embargo Estados Unidos dejó caer las amenazas de sanciones a Colombia, lo que obligó la suspensión del vuelo. Así lo señaló el diario El País de España: "Las personas y entidades que ayuden materialmente, patrocinen o brinden apoyo financiero, material o tecnológico, bienes o servicios, en apoyo a Conviasa, puede exponerse a sanciones. Alentamos al Gobierno de Colombia a negar derechos de aterrizaje".
Este mismo medio señala que Colombia es el primer país que es objeto de estas amenazas, ya que la línea aérea estatal venezolana Conviasa , tiene vuelo a otros países como España o Ecuador, sin que se sepa de amenazas desde Washington.
Foto extraída de laprensadelosangeles.com/