[resumen.cl] Esto no es Chile es una plataforma que junto con exponer diversas expresiones del neoliberalismo en Chile, mediante infografías e ilustraciones, también contiene propuestas constitucionales generales e información de candidaturas a la Convención Constitucional que declararon trabajar por el establecimiento de diversas normativas calificadas como urgentes por las organizaciones populares.
En Esto no es Chile, además de exposiciones y referencias bibliográficas para ahondar en problemas como las repercusiones de actividades extractivas, la privatización del agua, el sistema de AFP, el lucro en la educación y la salud, se puede leer: "Este espacio es una invitación a conocer el estado actual de la precariedad de la mayoría de quienes habitan este país […] y lo más importante, las alternativas levantadas desde las organizaciones sociales al neoliberalismo en Chile…".
Loreto Contreras, Sophia Boddenberg y Stefanía Vega, investigadoras y encargadas del contenido de Esto no es Chile, respondieron a las consultas de Resumen respecto a esta iniciativa y su papel en esta coyuntura.
-Una de las propuestas que plantean es el reconocimiento «del rol social, público y colectivo del derecho de propiedad». Háblennos de cómo operaría este principio y qué posibilitaría.
La actual constitución le da protección y un valor preponderante al derecho de propiedad individual por sobre el bienestar común; este mismo derecho ha permitido la concentración de los bienes comunes, fundamentales para la vida; y ha agudizado conflictos históricos como es el caso del permanente asedio, apropiación, despojo y militarización del territorio ancestral mapuche por parte del Estado chileno. El reconocimiento del bien social, público y colectivo opera directamente contra la concentración de la riqueza y está sujeto a las definiciones y pertinencias que sean dadas por las mismas comunidades y territorios. Más que hablar de cómo operaria este principio de manera transversal y rígida, hay que considerar la diversidad de cada espacio, negada por supuesto desde el discurso hegemónico y homogeneizador. Sin embargo, nos gustaría rescatar la breve pero ejemplar experiencia de los asentamientos productivos de las comunidades mapuche, propiedades colectivas, durante la reforma agraria en la que tuvieron participación desde su especificidad sólo gracias a la movilización.
-Cuéntennos, cómo fue el proceso de consulta a las diversas candidaturas y en qué medida sus resultados podrían ser confiables para la comunidad.
Construimos una encuesta que aborda catorce ejes que como equipo consideramos fundamentales para poder subvertir las consecuencias que ha traído el sostenimiento de una política neoliberal que ha desvencijado la institucionalidad, saqueado los territorios y vuelto mercantilizable aquello que debiese ser concebido como un derecho. Por tanto, bajo este criterio es que se erigen los catorce ejes consultados a 60 de 79 listas independientes, tras revisar sus programas, publicaciones y apariciones en prensa, todo ello lo pueden encontrar en la sección de metodología en el sitio.
Si bien los ejes son bastante simples, hablan también de proyecciones socioculturales a mediano y largo plazo, como es por ejemplo replantearse los extractivismos, que en la actualidad vemos que constituyen una de las principales fuentes de inequidad, posibilita a los sectores supermillonarios continuar lucrando y enriqueciéndose a costa de los territorios y sus comunidades. Este tipo de preguntas, son las que justamente nos permiten establecer una suerte de «barómetro» para analizar las distintas candidaturas de las diferentes listas. Por tanto, aquí lo que está «empeñado» es la palabra de cada candidatura, y a su vez, el programa que les respalda, y en muchos casos sus trayectorias organizacionales. Recordemos que este proceso se viene gestando desde hace décadas, por tanto no todxs lxs actores vienen recién apareciendo en este escenario, hay quienes llevan años organizándose y forjando las transformaciones que acaben con el exceso de centralismo que existe en la política y en la toma de decisiones.
-Se ha normalizado que los procesos electorales estén predominados más bien por un ejercicio publicitario, en perjuicio de una práctica comunicativa donde los planteamientos de cada candidatura sean contrastados y dispuestos a ser debatidos públicamente. En este sentido, ¿qué valor le asignan a Esto no es Chile?
Somos testigos de la farandulización de lo reconocido como lo "político", entendiendo este espacio como lo meramente institucional, enmarcado en la crisis de la representatividad que es propia de los partidos políticos. Este fenómeno que sobrepone la forma por sobre el contenido es reproducido por el mismo espacio político institucional y, por supuesto, por los medios de comunicación que son parte de los grupos empresariales o dependen del pago por concepto de publicidad. El problema que surge de lo anteriormente descrito es que lo político se sigue entendiendo como el quehacer propio de los partidos e invisibiliza el quehacer político de otras formas organizativas con fines emancipatorios.
El Servel y el Consejo Nacional de Televisión son ejemplos claros de esta mirada parcial sobre lo político y que se evidencia en el trato que se le ha dado a las candidaturas y listas independientes, desde la junta de patrocinios para poder ser candidatxs, el financiamiento desigual en comparación a los partidos políticos y el minutaje vergonzoso que se les dio a los independientes. La misma Convención Constitucional es producto del ninguneo de quienes ostentan la administración del país a las miles de personas que se manifestaron exigiendo una Asamblea Constituyente.
Durante este proceso no se ha velado por el derecho a la información, a elegir y votar de manera informada y situada del momento que vivimos. Esto no es Chile busca relevar y alumbrar este quehacer político invisibilizado y a los movimientos que hoy buscan estar en la Convención, que son alternativas al poder constituido; y que, a la vez, traen por añadidura otras formas de concebir la política, donde el contenido, lo programático y la participación vinculante es central.
Esto no es Chile, en particular es una plataforma que toma temas concretos y muy profundos, sentidos por la ciudadanía y los territorios. Dispuestos en un formato legible, rescatando en parte, una antigua tradición narrativa como es la historieta, que permite dialogar con otros lenguajes, no tan ortodoxos, ni académicos, pero con datos reales. Para posteriormente visibilizar las distintas candidaturas independientes a nivel país, que tienen una apuesta por la superación del neoliberalismo y el objetivo es informar a quien esté dispuesto a ello.
-¿Qué expectativas tienen en el proceso constitucional y cómo creen que la comunidad puede continuar incidiendo en él?
Entendemos que el proceso constitucional se enmarca en un proceso más extenso que es el proceso constituyente, donde desde los movimientos sociales y territoriales se busca incidir y disputar pese a la disparidad de condiciones. Nuestra apuesta como colectivo es pulsar a una figura que sea lo más próxima a una Asamblea Constituyente, por tanto, esta plataforma permite visibilizar de manera horizontal a las diferentes candidaturas/listas, señalando programas que en muchos casos están vinculados a las temáticas desarrolladas en el sitio. Una vez más la apuesta es a participar en miras a los horizontes planteados durante el alzamiento popular, o estallido social del 2019, con procesos asamblearios para tomar decisiones, con movilización y construcción de espacios colaborativos, donde en definitiva lo que se planteó fue transformar la subjetividad del poder, donde los pueblos en las calles pulsaron un mandato. En este contexto participar en las elecciones es una herramienta más en un contexto nunca antes vivido. Lograr que los gobiernos se rijan por los mandatos populares, y no como se ha hecho hasta ahora, es un horizonte. Para ello, la apuesta debe ser colectiva, asamblearia, participativa y organizativa, como base, para lo que se construya.