[resumen.cl] La bancarización del negocio inmobiliario a nivel global ha traído aparejada la especulación y alza de valores de las viviendas y sus arriendos hace  décadas, pero durante la pandemia se ha generado un sobrecalentamiento de este sector a nivel mundial.

Las imágenes de jóvenes durmiendo en las calles y plazas han inundado las redes sociales desde mediados de septiembre, cuando se iniciaron las protestas por el alza de precios de los arriendos, que coincidió con la vuelta a clases presenciales de las y los estudiantes universitarios en Turquía. 

Según algunos medios de comunicación independientes turcos, las alzas en los arriendos varían entre el 50% y 300% en algunos casos.

La problemática social que apareja este negocio especulativo (alza de arriendos) y la concentración de la propiedad, ha traído como consecuencia el desarrollo de un nuevo movimiento social de arrendatarios que solicitan controles estatales e incluso expropiaciones para garantizar el derecho a la vivienda.

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Este movimiento ha ido creciendo en diversos países Europeos, el triunfo de las expropiaciones en la ciudad de Berlín durante las últimas elecciones alemanas, es una prueba de ello.

Es tal el desarrollo de este movimiento por el derecho a la vivienda que incluso en Turquía, país reconocido por su autoritarismo y la represión a diversos movimientos sociales, han llegado estas protestas. Han sido los estudiantes universitarios, quienes han desarrollado una original manifestación para visualizar el alza de los valores de los arriendo, saliendo a dormir a las calles.

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