[resumen.cl] Un estudio recientemente publicado evaluó la presencia en el aire de pesticidas de uso corriente en cultivos agroindustriales en la comuna de Peumo (provincia de Cachapoal). El estudio utilizó dispositivos de muestreo pasivo de aire y reveló la presencia de múltiples pesticidas de uso común. Cloripifos y Pirimetanil fueron los compuestos detectados en la más alta concentración.

El estudio señala que en América del Sur, Chile lidera las exportaciones de arándanos y se mantiene segundo en uvas de mesa. Según un informe de la FAO publicado en 2018, en 1990 eran aplicados un promedio de 2,42 kilogramos de pesticidas por hectárea arable, mientras que en 2015 era aplicados más de 25 kilogramos de pesticidas por hectárea.

El estudio cita el reporte de ventas anual publicado por el SAG, que señala que la sexta región de O’Higgins contabiliza más del 28% del total nacional de productos químicos fitosanitarios, con más de 450 principios activos comúnmente aplicados en Chile en el control de las denominadas pestes agrícolas. Entre estas sustancias se encuentran: insecticidas organofosforados, fungicidas inorgánicos y mezclas basadas en glifosato y atrazina.

Cabe recordar que los pesticidas pueden alcanzar la atmósfera no solamente durante su aplicación sino también por volatilización desde el suelo, superficies de agua, desde los propios cultivos y por la acción del viento en las partículas del suelo. Una vez en la atmósfera, los pesticidas pueden presentar fases gaseosas y particuladas, dependiendo de las propiedades de los compuestos.

Resumen gráfico del estudio. Fuente: https://doi.org/10.1016/j.scitotenv.2019.01.302

Estudios anteriores constataron que los pesticidas pueden ser degradados por la luz solar, transportados por el viento hacia áreas lejanas desde el sitio de aplicación o alcanzar la superficie terrestre a través de deposiciones secas y húmedas. De esta forma, los pesticidas pueden permanecer en la atmósfera por días, semanas o meses después de sus aplicación, generando riesgo a la salud.

Los pesticidas organoclorados (OCPs) son hidrocarburos clorinados (aldrina, endrina, dieldrina, heptacloro, clordano, mirez, toxafeno, dicloro difenil tricloroetano (DDT), hexachlorobenceno (HCB), clordecona, lindano (γ-HCH), pentaclorobenzeno y endosulfan que han sido usados desde la década de 1940 pero por su alta toxicidad fueron prohibidos en la década de 1970 formando parte de las sustancias prohibidas por la Convención de Estocolmo en Contaminantes Orgánicos Persistentes (POPs, por sus siglas en inglés)

El estudio señala que alternativas a los pesticidas organoclorados son los pesticidas de uso corriente, caracterizadas por ser menos persistentes, más solubles en agua y menos bioacumulativos que los pesticidas organoclorados. Sin embargo, estos han sido detectados lejos de sus áreas de aplicación, demostrando su capacidad de transporte regional y global a través de la atmósfera.

Los pesticidas organofosforados con amplio uso en la agroindustria exportadora y la industria forestal y un escaso control para uso residencial son altamente tóxicos aunque se degradan relativamente rápido en el ambiente.

El estudio menciona que en muchos trabajos publicados hasta la fecha, el endosulfán es considerado un pesticida de uso corriente, pero en este trabajo es considerado un contaminantes orgánico persistente, debido a su prohibición global bajo la Convención de Estocolmo desde 2012.

El estudio indica que para investigar los pesticidas de uso corriente en el aire se usan muestreadores activos, los cuales permiten que estos compuestos sean determinados en fases gaseosas y particuladas, simultáneamente. Sin embargo, también son utilizadas muestras pasivas de aire para determinar compuestos de variada naturaleza química en muestras de aire.

El estudio destaca que estos muestreadores pasivos de aire no requieren energía, son simples de usar y tienen bajo costo. A diferencia de Europa, Estados Unidos y Canadá, en América Latina hay pocos estudios que han determinado la presencia de pesticidas de uso corriente en el aire, y estos han sido enfocados al comportamiento y distribución de pesticidas organoclorados en la atmósfera de áreas rurales, urbanas, industrializadas y zonas remotas.

Un estudio de 2008 fue uno de los primeros en demostrar la presencia de estos pesticidas en el aire de América Central, revelando la presencia de clorpirifos, clorotalonil y pendimetalina en Costa Rica.

Otro estudio de 2010 había determinado la presencia de trifluralina, clorotalonil, dacthal, y pendimetalina entre 2004 y 2008 en varios países y continentes, incluyendo en Lago Chungará y Coyhaique. Aunque los niveles detectados fueron bajos, si se determinó que estos podrían alcanzar áreas lejanas a sus zonas de aplicación.

Un estudio de 2016 había reportado tendencias espaciales y estacionales de clorpirifos en la región de la Araucanía, demostrando el efecto de transporte a través del aire de pesticidas en esa región.

Instalación de muestreadores pasivos de aire en la comuna de Peumo

6 discos de espuma de poliuretano contenidos entre dos cápsulas de acero inoxidable (PUF-PAS) y 6 prototipos de muestreadores de aire pasivo o colectores pasivos de deposición seca (Pas-DD) fueron desplegados entre septiembre de 2015 y marzo de 2016 en terrenos rurales de la comuna de Peumo. El estudio detalla que el área total de la comuna es de 151,1 kilómetros cuadrados y que 30,9 kilómetros cuadrados son usados para plantaciones frutales, incluyendo palta, ciruelas, uvas de mesa, peras, limones y kiwis.

Mapa del sitio de muestreo, uso de suelo e instalación de muestreadores de aire (PUF-PAS y Pas-DD) en áreas rurales de la comuna de Peumo. Fuente: https://doi.org/10.1016/j.scitotenv.2019.01.302

Los discos de espuma de poliuretano fueron fueron colectados luego de 30, 60 y 90 días de exposición por un total de 6 periodos de muestreo incluyendo 3 en primavera y 3 en verano.

Las concentraciones individuales de cada pesticida fueron determinadas por concentraciones atmosféricas y deposiciones atmosféricas). De los 34 compuestos químicos estudiados, 11 fueron detectados con discos de espuma de poliuretano contenidos entre dos cápsulas de acero inoxidable (PUF-PAS) y 9 con colectores pasivos de deposición seca (Pas-DD)

Los compuestos: Lindano, clorpirifos etil, diazinon, pirimetanil, y penconazol fueron detectados con ambos muestreos. Los pesticidas Clorpirifos etil y phrimetanil presentaron las mas elevadas concentraciones con ambos tipos de muestreos.

A 60 días de exposición en verano, la concentración de clorpirifos etil alcanzó un máximo de 380,3 nanogramos (ng) por disco con PUF-PAS y un máximo de 633,4 nanogramos por disco con Pas-DD.

En el mismo periodo, pirimetanil alcanzó un máximo de 9,72 nanogramos por disco usando PUF-PAS y 30,4 nanogramos por disco usando Pas-DD.

En general, para clorpirifos etil y piremethanil las cantidades de pesticidas capturados fueron mayores en verano que en primavera. Esto puede ser explicado debido a que durante el verano el promedio de temperaturas es superior a los reportados en primavera favoreciendo la volatilización de estos compuestos desde los cultivos a la atmósfera de Peumo.

Además, los menores vientos del verano comparados con primavera podrían favorecer la captura por los discos de espuma de poliuretano, indica el estudio.

Concentraciones individuales (nanogramos por disco de espuma de poliuretano) de clorpirifos etil (a) y pirimetanil (b) a 30, 60 y 90 días de exposición usando muestreadores PUF-PAS y Pas-DD (en primavera de 2015 y verano de 2016). Fuente: https://doi.org/10.1016/j.scitotenv.2019.01.302

El estudio señala ser el primero en reportar pesticidas de uso corriente en el aire usando colectores pasivos de deposición seca (Pas-DD), así como en reportar ethoprophos, penconazol, difenilamina y pirimetanil con muestreadores (PUF-PAS)

De los 34 pesticidas analizados, 11 fueron detectados en más de una muestra usando PUF-PAS y 9 usando Pas-DD. Clorpirifos etil y pirimetanil fueron detectados en la más alta concentración en ambos tipos de muestras.

En algunos periodos, la cantidad depositada de clorpirifos etil, penconazol, pirimetanil, malatión y diazinon en muestreadores Pas-DD fueron superiores a las capturadas por discos PUF-PAS, lo que podría ser explicado por el diseño de muestreo, señala el estudio.

Intoxicaciones en la misma comuna de Peumo.

En noviembre de 2018, cerca de 50 personas resultaron intoxicadas, según investigó la Brigada de Investigación Criminal (BICRIM) de la Policía de Investigaciones, por la aplicación de un plaguicida sin respetar sus formulación, según había informado El Tipógrafo

El predio agrícola se encontraba colindante a recintos educacionales, donde funcionarios de un jardín infantil y de un establecimiento educacional en el sector de Rosario de Codao, se vieron afectados.

Según había informado Cooperativa 29 menores de edad y 6 adultos de la escuela Rosario de Codao fueron afectados.

La Red de Acción en Plaguicidas de Chile (RAP-Chile) había alertado que entre enero y diciembre de 2017 se notificó un total de 672 casos de intoxicación aguda por plaguicidas (IAP) a la Red de Vigilancia Epidemiológica de Intoxicaciones Agudas por Plaguicidas, REVEP, del Ministerio de Salud. Este registro de intoxicaciones a nivel nacional incluye casos confirmados de todas las edades y tipo de intoxicación.

Recientes determinaciones de riesgo de exposición de la población a pesticidas en Chile.

Un estudio de 2017 había recolectado 118 muestras de hortalizas desde áreas agrícolas en las regiones Metropolitana de Santiago, de Valparaíso y de Coquimbo entre 2014 y 2015. Los resultados indicaron que el 27% de las muestras totales contenían restos de pesticidas por sobre el límite máximo de residuos de cada ingrediente activo. La máxima ingesta diaria obtenida para CS2 (disulfuro de carbono) fue de 0,57 mg/kg, el valor para metamidofos fue de 0,007 mg/kg, para azoxystrobin fue de 0,06 mg/kg y para cipermetrina fue de 0,05 mg/kg, las cuales fueron más altas que la ingesta diaria considerada aceptable.

También puedes ver: Estudio confirma que la población infantil expuesta a fumigaciones con agrotóxicos tiene daño genético en Paraguay

Un estudio de 2011 evaluó la presencia de metabolitos organofosforados en la orina de estudiantes de escuelas rurales en la región del Maule y estimó su asociación con el desempeño cognitivo. Los resultados del estudio arrojaron un 56% de los niños con concentraciones sobre el límite de detección para el dimetilfosfato (DMP) y el dietilfosfato (DEP) sobre este límite. Los resultados del estudio indicaron una relación entre la presencia de pesticidas y desempeño cognitivo.

Un estudio publicado en 2016 había evaluado la exposición a plaguicidas organofosforados y el desempeño neuropsicológico y motor de trabajadores y trabajadoras agrícolas y no agrícolas en la Región del Maule. Este estudio confirmó que la exposición a plaguicidas organofosforados produce desempeño disminuido, especialmente en la velocidad de procesamiento y el coeficiente intelectual total.

Otro estudio publicado en 2016 tuvo por objetivo evaluar las características de la exposición a pesticidas organofosforados y su estado de salud en trabajadores/as agrícolas de la región del Maule. Un 56% de los trabajadores agrícolas sondeados reportaron síntomas consistentes con envenenamiento agudo con pesticidas organofosforados. En 2018 este mismo equipo de investigación detectó la presencia de un compuesto prohibido para su venta en Chile: el Paratión.

El estudio recientemente publicado y que evaluó el aire de la comuna de Peumo señala que es necesario realizar más investigaciones para optimizar el uso de muestreadores pasivos, para aumentar la posibilidad de determinar los pesticidas de uso corriente en muestras de aire de zonas rurales.

Vea el estudio aquí.

Fotografía principal: Equipos de emergencia durante las intoxicaciones en Peumo en noviembre de 2018. Foto: https://www.elrancaguino.cl/