[resumen.cl] Este jueves fue inaugurada la exposición (In) Visibilidades: Archivo de Artistas Penquistas, en la cual se exhibirá una reunión de trabajos visuales y sonoros de 26 mujeres de la ciudad, representativos de distintos lenguajes y campos disciplinares, elaborados en los últimos cuarenta años. La muestra se extenderá hasta el 17 de abril en la sala David Stitchkin de la Universidad de Concepción, ubicada en Barros Arana 631, al interior de la galería del mismo nombre.
Las curadoras generales de esta exposición son Bárbara Lama Andrade, Constansa Vergara Andrades y Natascha de Cortillas Diego, quienes respondieron las consultas de Resumen, permitiéndonos una aproximación a esta iniciativa.
-Cuéntanos cómo es que surge la intención de realizar esta iniciativa y cómo fue el proceso de reunión de artistas y trabajos.
La muestra "(In) Visibilidades: Archivo de Artistas Penquistas", se inserta dentro de un ciclo de 3 exposiciones realizadas desde octubre a la fecha en el contexto de los 100 años de la Universidad de Concepción, que busca problematizar la idea de archivo y de memoria en las producciones artísticas penquistas. Así, la primera exposición, realizada por Javier Ramírez e inaugurada justo al inicio de la revuelta social en octubre, aborda la construcción de archivo en las artes visuales durante las décadas de los 40´- 60´. La segunda muestra fue presentada en diciembre por Leslie Fernández, Carolina Lara y Gonzalo Medina quienes, a partir de una investigación previa, acercan la discusión respecto a arte y política durante el periodo de la unidad popular y la dictadura cívico militar (1972-1991).
En este contexto, y atravesado en la actualidad tanto por distintas manifestaciones de protesta que dan continuidad al estallido de octubre y diversas acciones feministas en el marco de la conmemoración de la mujer trabajadora, presentamos el 12 de marzo la tercera exposición que viene a cerrar el ciclo, y que justamente, hacen eco de algunos de los problemas que se evidencian en este devenir de digna rabia o malestar, diría también.
El proceso de la expo, quiso ser una reflexión desde una perspectiva de género sobre la memoria y sus relatos, considerando como punto de inicio a las artistas mujeres, pero no excluyente de la diversidad de identidades de género existentes. La idea fuerza fue la noción de invisibilidad de las mujeres en los grandes relatos de la oficialidad institucional pese a que nuestra existencia siempre ha estado presente. Quisimos poner en valor la fuerza plástica oculta tras esa invisibilidad.
Erigido desde procesos colectivos realizamos un mapeo de actoras para reconocer y estructurar tramas de las artistas que desde los 80 a la fecha conocíamos de diversas áreas de las artes (gráfica, grabado, ilustración, fotografía, audiovisual, sonoro, danza, poesía, ilustración, música, teatro, arquitectura, etc.). Para esto hicimos entrevistas iniciales con algunas personas que han formado parte del campo del arte, apareciendo una red densa de sujetas y relaciones interdisciplinarias e intergeneracionales, escuelas, referencias, colaboraciones.
Ante esto, durante nuestras sesiones de trabajo, fuimos desarrollando la idea de armar una narrativa de la producción artística en estos archivos que operara de manera colaborativa, invitando a algunxs actorxs, principalmente mujeres y colectivas que se sitúan dentro del tejido sociocultural penquista, para conversar sobre sus biografías, experiencias de vida y motivaciones, las variables que influyeron en su modo de comprender su propuesta artística, el contexto sociopolítico en el que se insertan, los procesos de creación y lugares que ocupan dentro de las escenas artísticas. Desde una lógica orgánica, horizontal y colaborativa se fue armando la exposición colectiva, desde la experiencia situada de las subjetividades de las propias expositoras, quienes, a través de diversos lenguajes, han ido manifestando sus reflexiones sobre la cuestión general.
Un último momento del proceso fue reunirnos todas alrededor de una comida, mirándonos, reconociéndonos y compartiendo nuestros sentires y reflexiones sobre la invitación, conversamos y definimos cuestiones sobre el montaje de la exposición, la inauguración, programa y clausura.
Finalmente, reconocemos que esta exposición es un recorte de la realidad, y que de seguro no es la única propuesta existente sobre el problema. Creemos, por ello, que la muestra se constituye como una obra en proceso que, en permanente construcción, invita a quienes asisten a participar del proceso de mapeo, que en constante agenciamiento busca incrementar su densidad nombrando y visibilizando a quienes existen y crean, pero aún no conocemos y por tanto no aparecen en nuestra propuesta.
-Sería interesante que pudieras compartir el significado y también la potencia que tiene para ti el concepto de (In) Visibilidades.
Recurrimos al juego de palabras utilizando el prefijo (in) entre paréntesis para problematizar la visibilidad e invisibilidad que se contiene relacionalmente, ya que en la medida que se decide visibilizar o relevar algo, se invisibiliza lo otro. Es un proceso de selección, que al igual que la memoria en el acto de recordar, decide consciente o inconscientemente, atravesado por una serie de condiciones estructurales y experiencias subjetivas propias de quienes realizar el acto de visibilizar y olvidar.
Y esto nos lleva a reconocer, retomando el problema de la visibilidad propuesta por los distintos feminismos, que las mujeres y disidencias han estado históricamente relegadas a un lugar oculto, no reconocido por el patriarcado y el capitalismo, que es lo privado, lo cotidiano, situado en la reproducción de la vida, no obstante, procesos creativos, culturales y sociales han ocurrido pese a la invisibilidad de sistemática; por otro lado, lo visible, lo que se muestra, lo público, gobernado por agentes institucionales y medios de comunicación hegemónicos, no implica ni obliga calidad técnica, política ni significativa a la hora de pensar la producción cultural de una comunidad. El problema es mucho más complejo y sistemático y responde a las formas en cómo y desde dónde tradicionalmente se ha significado el mundo (positivismo epistemológico) para qué y para quienes funciona el aparato.
Pero estos procesos son porosos, en estos se presentan fisuras e intersticios de agencia social que no necesariamente desean o deciden estar presentes en estos espacios de lo visible, y buscan resistir desde y en otros lugares políticos y cotidianos.
Dicho esto, esta exposición no presenta una definición única respecto al problema, son aproximaciones más o menos consensuadas a partir del proceso de creación colectiva y que se problematizan situadamente según las generaciones donde se inscriben las artistas.
Esto porque, finalmente, lo que se esconde no deja de existir, siempre sigue ahí su potencia.
-La exposición contará con tres archivos. Háblanos de ellos, bajo qué consideraciones hay reunido las obras de cada uno.
El ejercicio que se propone cuenta con 3 ejes constituyentes
El Archivo Documento: narración de creatividad y sobrevivencia que en contextos políticos complejos supieron abrir y construir espacios de resistencia en los que florecieron propuestas y discursos artísticos en contra una adversidad patriarcal institucionalizada. Las artistas son: UcaTorres Mora, Arinda Ojeda Aravena, Colectiva Urdiendo Memoria y VAMP, Orietta Escámez Carrasco, Paola Aste von Bennewitz.
Archivo Obra: Las artistas presentan propuestas artísticas que revisa y actualiza la historia y sentido de los hitos en sus producciones, ellas son: Pilar Hernández Arroyo, Brigada de mujeres Muralistas, Eileen Kelly Millán, Ibi Díaz, Paulina Yañez, Colectiva Te cosiste
Archivo objetual: Sacadas de la vida cotidiana, objetos de la vida personal portan la mirada simbólica que ha constituido sentires y pensares para las relaciones creativas de las artistas: Karina Kapitana, Susana Chau, Valentina Villaroel, Leyla Selman Soto.
-Qué esperan de esta exposición.
Más que esperar algo en específico, la propuesta colaborativa es más una invitación a conocernos, a compartir y mirarnos. Acercarnos a las diversas formas en que cada una ha pensado su devenir artista. A pensar, abrir y contribuir a la discusión en el campo artístico cultural de Concepción sobre la cuestión de lo visible e invisible y el género en sus múltiples expresiones (aunque esta sea principalmente de mujeres), en los procesos de archivo y memoria. Así también, deseamos activar relatos y redes pasadas y presentes, que legitimen otras maneras de producir cultura y arte, que admitan la diversidad de los campos subjetivos e íntimos, que también son políticos.