Por Juan Contreras Jara / resumen.cl
Cientos de trabajadores y trabajadoras a honorarios del Biobío marcharon este miércoles por Concepción, sumándose a la convocatoria nacional, denunciando la precarización laboral que existe en el sector público y la necesidad de prorrogar la ley de cotización obligatoria, que está mermando, desde enero de este año, los salarios de los funcionarios a honorarios del Estado.
Más de diez sindicatos marcharon por el centro penquista, en la segunda movilización nacional de trabajadoras y trabajadores a honorarios, quienes expresaron su total rechazo a la nueva ley de cotización, que implica el pago de las cotizaciones previsionales del bolsillo de los mismos trabajadores y no de su empleador – el Estado-, restando hasta en un 30% los salarios de las y los funcionarios.
Mariela Mardones, presidenta del Sindicato de Honorarios de Penco y Secretaria de la Coordinadora Regional de trabajadoras a honorarios del Biobío, expresó que las demandas de este sector van por dos lineamientos claros; "el primero es el reconocimiento como trabajadores del estado, reconocimiento que no hemos tenido con ninguno de los gobiernos anteriores. Nosotros seguimos en una situación de precariedad laboral, sin derechos laborales como pre y post natal, derecho a descanso, derecho a reajuste o derechos sindicales para nuestros dirigentes. Muy de la mano con esta situación laboral, va nuestra negativa a la ley 20.255, que nos obliga, desde el 1 de enero a cotizar, disminuyendo drásticamente nuestros ingresos".
Para María Elena Mella, representante del sindicato de trabajadores a honorario de Talcahuano y funcionaria a honorarios hace 18 años, lo más importante es acabar con la precariedad y la incertidumbre al interior del sector público. "Si bien hay veces que se llega a optar a beneficios, como vacaciones, licencias médicas, días administrativos, pero son eso: beneficios que quedan a merced de la autoridad. Dependiendo de quien ocupe el cargo, nosotros podemos alcanzar o no acuerdos y eso es mantenernos en la duda. Aquí no valen los años de servicio, ni indemnización; no vale los servicios que he prestado, no hay ningún reconocimiento por parte de la municipalidad, por los años que he trabajo en ella."
Por su parte, Gonzalo Reyes, secretario del sindicato N°1 de la Municipalidad de Tomé, enfatizó en que la medida que más urge tomar para este sector, es frenar la cotización obligatoria. "Estamos en contra de esta ley que nos obliga a cotizar, además estas cotizaciones serán fondos frescos para las AFPs, que ya nos hemos de cansado de cuestionar. Las AFPs hurtan dinero a los trabajadores todos los meses, por eso el llamado de hoy es a movilizarse para detener esta injusta exigencia. Rechazamos la cotización porque no tenemos ningún derecho asegurado como trabajador. Necesitamos que el gobierno entienda que hay que postergar esta ley".
Gorky Sanhueza, secretario de las y los trabajadores a honorarios de Coronel, destacó la urgencia que tiene darse cuenta de las condiciones laborales de este sector: "En nuestros contratos, no se estipula en ninguna parte ningún derecho como trabajador, por eso denunciamos como se ha deteriorado en estos años la calidad laboral de los funcionarios públicos. Creemos que todas las autoridades comunales debiesen manifestarse en pos de mejorar la calidad de vida de los funcionarios en su comuna. En Coronel somos más de 350 trabajadores a honorarios y esta es una realidad que queremos erradicar".
Con respecto al impacto que tiene la precariedad laboral de las y los honorarios, en el servicio entregado a los usuarios del sector público, Mariela Mardones comentó que "nosotros somos los que implementamos las políticas públicas, hacemos que los programas de gobierno se echen a andar, por ende, esta problemática atañe también al usuario. Si tú no puedes tomarte pre y post natal, si no tienes derecho a un reajuste salarial, hace que en tu trabajo no estés tranquilo, no puedes proyectarte en él, no puedes hacer carrera funcionaria y por el contrario, todos los años tenemos que vivir el temor de que nos despidan. Obviamente, no se puede entregar un mejor servicio".
La movilización de las y los honorarios convocó a funcionarios en varios puntos del país, como Antofagasta, Coquimbo, Alto Hospicio, Valparaíso, Santiago, Temuco y Concepción, donde marcharon alrededor de 600 personas.
Durante la marcha, trabajadores y trabajadoras a honorarios realizaron una performance, donde caminaron encadenados y con pancartas que dejaban ver mensajes como, "soy la fuerza invisible del Estado, sin derecho a previsión social, no tenemos derechos ante despidos injustificados", entre otros. Al terminar la marcha, quemaron sus cadenas y pancartas, simbolizando el repudio a la ley 20.255 que los obliga a cotizar de manera personal en las AFP.
Los manifestantes que marcharon desde los tribunales penquistas, atravesando la avenida O'Higgins, llegaron hasta la gobernación, donde enfatizaron en que las y los honorarios trabajan a la par con el personal de contrata y de planta, en las instituciones públicas, e hicieron un llamado al Estado de Chile, para que sea garante de sus derechos como trabajadores públicos.
Al finalizar la marcha entregaron una carta con las exigencias de las y los honorarios del Biobío al gobernador Robert Contreras, exigiéndole que se reactivara la mesa de negociación, comenzada con el ex seremi de trabajo Rodrigo Alarcón. En la reunión apuntaron entre otras, a la necesidad del fuero sindical para la organización de estos funcionarios públicos.
La organización del descontento frente a su precarización laboral ha tenido frutos. En el Biobío, la organización pasó de tener 4 sindicatos a 15, incluyendo además de los socios de la Provincia de Concepción, afiliados de Curanilahue, Contulmo, Sta. Bárbara, entre otras, por lo que están prontos a crear la segunda federación de trabajadores y trabajadoras a honorarios de Chile.