[resumen.cl] Un número aún indeterminado de personas heridas dejó el asalto de agentes israelíes a la mezquita de Al-Aqsa en Jerusalén Oriental. Los hechos se producen en el contexto de las protestas contra el desalojo de familias palestinas que cumplen varios días, en medio del final del ramadán (celebración sagrada del islam) y a días de conmemorar la Nakba, es decir, la expulsión de población palestina para crear el Estado de Israel.

Los manifestantes lanzaron piedras a los agentes, quienes respondieron balas de goma, granadas aturdidoras y gases lacrimógenos para dispersarlos. Posteriormente hicieron ingreso a la mezquita de Al-Aqsa, uno de los lugares más sagrados del Islam (y en territorio Palestino) para continuar con la represión. La Media Luna Roja Palestina informó que al menos 180 personas heridas, de las que 50 fueron trasladadas a hospitales, asimismo, informó que las fuerzas de ocupación no permitían el ingreso del personal médico.

Los hechos se producen en medio de tres semanas protestas por el desalojo de familias palestinas dentro del Estado de Israel que habitan territorios que judíos reclaman como sagrados y que reclaman para ser colonizados.

Asimismo, se dan en el contexto de «Día de Jerusalén» en que el Estado de Israel conmemora la toma de la parte oriental de la ciudad durante la Guerra de los Seis Días, a dos días del fin del Ramadán y a pocos días de la conmemoración de la Nakba.

El Consejo de Seguridad de la ONU programó consultas privadas para el lunes sobre las crecientes tensiones en Israel.

Cabe recordar que el 7 de mayo, al menos 205 civiles resultaron heridos al disparar la Policía israelí balas de goma y granadas de aturdimiento contra jóvenes palestinos que lanzaban piedras en los alrededores de la mezquita.

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