Biobío presentó en las últimas tres semanas, según el último informe ICOVID un alza de contagios de hasta un 44%. Gonzalo Bacigalupe, doctor en psicología y magíster en Salud Pública enfatiza que la atención ahora debe estar centrada en la trazabilidad y las dinámicas de contagio, ante el fallido escenario de políticas públicas que no lograron frenar las alzas de la "primera ola".

Por Valentina Luza Carrión

En este sentido, el profesional comenta que "el escenario es bastante predecible, el Paso a Paso nunca funcionó para aplazar el nivel de contagios, ni reducir la movilidad". Por lo que no es sorpresa que regiones como Araucanía, Magallanes y Los Lagos estén también sufriendo disparadas cifras de contagiados.

Esto podría explicarse dado en estas regiones el contacto entre personas en espacios cerrados se intensifica producto de las condiciones climáticas. El especialista comenta con respecto a la curva de crecimiento del Biobío «es como si la epidemia se estuviera trasladando desde el sur, más hacia el norte. En el Biobío existe más hacinamiento que Magallanes, Los Ríos, etc., que respondería al porqué de esto", comenta.

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Asimismo, esto implicaría que en las regiones del sur se requiere intensificar pronto el testeo en poblaciones con mayor probabilidad de contagio.

También, en palabras del experto, el escenario a futuro se determinará en unas cifras similares en la mayoría de las ciudades, alcanzando críticos indicadores en la capacidad hospitalaria. Cabe considerar que según el último informe ICOVID en La Araucanía existe un 97% de ocupación de camas totales, en Coquimbo, Valparaíso y Metropolitana un 90%, mientras La Araucanía y Los Ríos presentaron una ocupación por pacientes COVID 19 cercana al 60%.

Pensando en meses como enero y febrero, donde se evidenciarían los contagios que se están produciendo ahora, el sistema hospitalario no daría abasto y podría colapsar.

En ese sentido, para Gonzalo Bacigalupe la próxima respuesta no se hallaría en retroceder a las cuarentenas, sino más bien intensificar en reducir al máximo las aglomeraciones en espacios cerrados, tales como: restaurantes, transporte público, tiendas comerciales, etc. Es el denominado "aforo" o capacidad de llenado. Una medida que se ha estado utilizando sin mucha rigurosidad en las zonas de comercios ya abiertos, por lo que no tendría directa incidencia en la reducción de contagios.

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"Se debe pensar mucho más las dinámicas de contagio y como ocurre en comercios cerrados, restaurantes lugares públicos y transporte público donde no existe mucha ventilación. Recordemos que gran transmisión es por vía aerosol y no por la superficie. Lo que termina sucediendo es que las congregaciones sobre todo en el sur, el contagio no se controla." explica

LO QUE SE DEBE POTENCIAR

Según como se indica en el informe ICOVID, y en lo que concuerda el profesional, los recursos para la trazabilidad en este punto serían fundamentales para saber dónde está el contagio y así poder aislar. Esto no habría estado funcionado de forma eficiente y no se ha implementado de manera adecuada lo que ha generado irremediablemente el aumento de contagios porque no se sabe dónde están los casos activos que terminan contagiando a más personas.

"Hay una falta de colaboración de parte del gobierno central hacia las regiones y las comunas, que genera mucha desconfianza. Algo que ha sido muy complejo, es que desde que empezó el plan Paso a Paso, las cifras que salen en la televisión son el promedio y no el escenario completo. La pandemia se ha controlado de maneras diferentes en regiones", enfatiza.

En este sentido, para el experto nunca se ha logrado aplastar totalmente la primera ola. En Biobío específicamente, se logró un breve respiro, pero que luego del desconfinamiento, dejó los números en el mismo punto.

"Hay que enfatizar en las medidas de seguridad y salir a lo imprescindible, ya no funciona el confinamiento a estas alturas. Volver a cuarentenas en este contexto es una medida muy cruel, que tampoco está funcionando. Se debería también cerrar el comercio los fines de semana. A su vez hay que cerrar las partes comerciales, reducir la ida al trabajo donde se evidencia la necesidad de una renta básica." indica

Asimismo, las recomendaciones para las fiestas de fin de año es que éstas realicen al aire libre, y si no se cuenta espacio para aquello, que lugar cuente con ventilación, es decir, ventanas abiertas donde circule el aire. También el llamado es a no reunirse con personas desconocidas.

Para Gonzalo Bacigalupe, la responsabilidad que atraviesa el Gobierno en estos días decisivos también engloba la parte comunicacional de la crisis sanitaria. Debe existir menos tiempo de espera en la información hacia la población, que a largo plazo permita reducir los riesgos inminentes de la propagación y alzas de contagios.