[resumen.cl] Pese a las múltiples denuncias de falta de pruebas, los vicios en los procesos legales, las golpizas y torturas que han enfrentado diversas personas privadas de libertad durante el estallido social, estos continúan sufriendo extensos periodos de prisión preventiva. Por esto, organizaciones y grupos de familiares y redes de apoyo de las y los prisioneros del estallido hacen un llamado para marchar hacia la cárcel El Manzano en Concepción.

Para este martes 17 de marzo ha sido agendado el llamado hecho por familiares y colectivos de solidaridad, el cual busca poner en alerta sobre los injustos procesos que viven las personas que se encuentran encerradas en las distintas prisiones de la intercomuna y el país. Recordemos que son cientos de casos de hombres y mujeres que, sin existir pruebas contundentes o aún con procesos judiciales llenos de irregularidades, han sido castigados con la medida cautelar más grave que contempla el código penal.

La prisión preventiva, que es aplicada cuando las personas acusadas son reincidentes en un delito, o consideradas peligro para la sociedad o que puedan entorpecer la investigación, ha sido el castigo que el Ministerio Público ha ejercido sobre una cantidad de personas involucradas en protestas y desórdenes, como una forma evidente de intimidar a todo un país que se moviliza y protesta. Pese a la desproporcionalidad en su aplicación y considerando además el trato desigual de la justicia chilena con los delitos cometidos por la población más pobre y los crímenes perpetrados por clase política, empresarios y oficiales de Fuerzas Armadas y de Orden, de los cuales ninguno ha tenido que pisar la cárcel.

La marcha, que comenzaría a las 18:30 horas desde la plaza Juan Bosco, busca llegar hasta las dependencias de la cárcel El Manzano de Concepción, para realizar un "barrotazo", el cual consiste en hacer sonar las rejas del perímetro exterior de la cárcel de forma simbólica para visibilizar la injusta realidad de quienes se encuentran encerrados por motivos ocurridos durante el estallido social.

El último viernes de febrero se realizó una actividad similar en las afueras del recinto, la cual contó con música en vivo, olla común y múltiples muestras de apoyo de diversas personas y organizaciones que apoyan a las y los presos del estallido