Juan Contreras Jara / resumen.cl
La comunidad urbana de la comuna de Florida, a 40 km de Concepción, convive hace más de dos años con serios problemas en sus servicios sanitarios. Denuncian extrema turbidez y presencia de sedimentos en el agua potable, hecho que está afectando a los vecinos y vecinas, tanto en su salud como en su economía. La empresa privada encargada del suministro y calidad del agua es Essbio, compañía que ha presentado distintas irregularidades en comunas de la región del Bío Bío, como Lota, Coronel, Penco, entre otras.
Los vecinos de las poblaciones floridanas como Sargento Aldea, Florida Alto y Glorias Navales se han visto gravemente perjudicados por la pésima calidad del agua potable al interior de sus viviendas. Agua que presenta una excesiva turbidez, que deja restos de metales y minerales en ropa, enseres de cocina y que además, significa un alto riesgo para su salud. Dafne Rebolledo Contreras, vecina de la comuna, comenta que «el agua que sale de la llave es un asco, no se puede tomar. Yo tengo una guagua de un año y medio, y por ningún motivo podría darle una leche preparada con esta agua turbia; yo la hiervo y el sarro queda pegado en la olla… Como no podemos consumir esta agua, porque viene cochina, hay que comprar agua embotellada, o sea aparte de pagarle a Essbio por un pésimo servicio, hay que comprar agua para el consumo en la casa».
Además de utilizar el agua potable para su consumo, los habitantes de Florida deben ocuparla para lavar su ropa y enseres del hogar, sobre esto la vecina Daniela Hermosilla afirma que «el agua mancha completamente nuestra ropa, los cobertores y en general todas las prendas que se lavan; las destiñe, las percude, deja tremendos manchones amarillentos en la ropa que es blanca, ropa que después hay que botar», agregando que «no sirve de nada llamar al número 600 de la compañía para reclamar, es perder el tiempo. Esta situación nos tiene más que saturados».
Por su parte, la subgerenta zonal de Essbio, Ana María Lezcano, señaló que se trata de hechos absolutamente aislados y que el agua presentó turbiedad sólo en algunos sectores de Florida, enfatizando en que ya se había solucionado, versión que se opone diametralmente a la versión de la comunidad afectada. La concejala y trabajadora del hospital San Agustín Florida, Ana Guajardo Ruiz, señala que «las vecinas y vecinos estamos muy molestos con esta situación que se arrastra hace más de dos años. Se han hecho reuniones con Essbio, con la Superintendencia de Salud y la respuesta es que ellos están invirtiendo en la comuna, pero no se ven los resultados. Aquí vienen de Esbbio y hacen medición tras medición de la calidad del agua, pero seguimos estancados en el mismo problema». Respecto a las declaraciones provenientes de la empresa sanitaria, afirma que «hay momentos en que el agua es de calidad, o por lo menos la podemos tomar sin miedo, pero eso ocurre cuando el problema ya se ha sobrepasado y tienen que intervenir, luego de eso el agua limpia dura diez días y vuelve el problema.»
Desde el municipio, el alcalde Jorge Roa señaló a Resumen que «Essbio tiene aproximadamente mil 500 clientes en la comuna, por lo que se le pidió a la empresa que hiciera una inversión en Florida, y si bien se ha estado haciendo, últimamente nos hemos encontrado con muchos eventos de turbiedad en el agua, lo que causa problemas en los hogares, en los colegios, en el hospital y en el usuario en general. La gente no puede lavar la ropa o si la lava le sale sucia. Esto está causando un daño a las familias, muchas de ellas tienen que comprar agua envasada para preparar la comida«. El edil comenta que solicitó «un equipo de personas de la empresa (Essbio) que pudiera ir a los lugares, cada vez que se producen estos eventos de turbiedad en el agua y entregar una respuesta más rápida, además les pedí compensaciones para la gente, pero me dijeron que no».
Cobro por aire
Sumado al impresentable estado del agua potable en la comuna de Florida, desde marzo del presente año los costos de dicho suministro subieron considerablemente, tanto así que en algunos casos, los cobros significaron el doble que en meses anteriores. Dafne Rebolledo Contreras, también afectada por esta subida de precios, afirma que en su familia los costos se han elevado muchísimo: «Nos subió al doble, incluso más. A mi mama por ejemplo, de 12 o 14 mil pesos que pagaba le subió casi a 40 mil pesos». Sobre esta realidad, el concejal por la comuna floridana, Cristian Peña, explicó a este medio que en el mes de marzo los vecinos notaron un importante alza en su boleta, entonces la Superintendencia de Servicios Sanitarios hizo una investigación, cotejó las boletas y concluyó que el alza en las boletas era producto del cobro que Essbio hacía por el paso de aire en la red. Es decir, "cuando se corta el agua y tu abres la llave, [la abertura] marca el medidor [como consumo]. Entonces, a esa gente le están cobrando por aire". La Superintendencia ordenó a la sanitaria realizar una rebaja de 3 millones de pesos destinados a trescientas familias, pero es insuficiente, pues el corte de agua en la comuna tuvo lugar durante los días de los incendios forestales que amenazaron con calcinar el pueblo y afectaron a prácticamente la totalidad de los habitantes del casco urbano, muchos de los cuales están afectos a estos cobros.
Negocio Forestal
La sustitución del bosque por monocultivos forestales en la zona correspondiente a la comuna de Florida ha tenido gravísimos impactos, añadiéndose a la erosión acumulada desde la segunda mitad del siglo XIX hasta la primera mitad del XX, cuando se cosechaba buena parte del trigo para el consumo local y la exportación. Inicialmente, la expansión de estas plantaciones se justificaron con el pretexto de recuperar los suelos dañados por la agricultura intensiva, sin embargo, sus repercusiones han sido las opuestas, extendiéndose la erosión y la sequedad en ellos.
Cabe destacar que la comuna de Florida es una de las zonas con mayor escasez hídrica de la Región del Biobío. De acuerdo a un catastro del 2008, más de un 54% de la superficie de la comuna estaba ocupada con monocultivos forestales, lo cual ha generado diversos trastornos en la vida de los floridanos, tanto de los rurales como de los urbanos. En el caso de los habitantes del pueblo, éstos disponen de agua de mala calidad y potencialmente dañina, pues en ella se han detectado concentraciones de hierro y manganeso sobre la norma sanitaria y una turbiedad excesiva, tal como lo constató la Superintendencia de Servicios Sanitario el 2015.