[resumen.cl] Tras el triunfo obtenido esta jornada, el boxeador cubano Julio César La Cruz expresó la consigna «Patria o muerte, ¡Venceremos!» considerando el escenario político que continúa latente en Cuba, donde es esencial el fin al bloqueo para frenar la crisis humanitaria del hermano país latinoamericano.

Mucho morbo acompañó hoy la jornada de boxeo en el marco de los Juegos Olímpicos de Tokio. Todos los ojos estaban puestos en los pesos pesados, allí se daría un enfrentamiento por el paso a las finales entre dos pugilistas cubanos, uno de la isla y otro compitiendo por bandera extranjera.

El cubano Julio César La Cruz, tres veces campeón mundial de boxeo y campeón olímpico en 2016, compitiendo por su país, luchó contra Emmanuel Reyes, un boxeador de origen cubano y formado en Cuba, que ahora representa a España en estas olimpiadas.

Tras finalizar el combate, La Cruz -también conocido por su pseudónimo "La Sombra"- no pudo ocultar su alegría ni tampoco el contexto político que este enfrentamiento deportivo tenía tras de sí: "Patria o vida no.... Patria o Muerte, ¡Venceremos!, gritó tras concluir el combate que le da el paso a las medallas.

La Cruz de rojo se ha impuesto por decisión de los jueces. (Luis ROBAYO / AFP)

La Cruz y Reyes tienen una larga historia de enfrentamientos, cuando Reyes aún vivía en Cuba, por ver quién de los dos representaba a Cuba en la categoría, donde siempre se impuso La Cruz.

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En la próxima semifinal, el cubano se enfrentará al brasileño Abner Texeira.

Este hecho forma parte de las diversas expresiones políticas que han marcado los Juegos Olímpicos de Tokio, donde durante la primera semana de competencia el judoca argelino Fethi Nourine renunció a competir (categoría -73 kg) para no tener que enfrentarse a un rival de Israel: «La causa palestina es más importante», señaló a los medios tras tomar su decisión.

Nourine no es el primer deportista que se suma a la causa del boicot a Israel por el genocidio que comete contra del pueblo palestino. En los anteriores Juegos Olímpicos de Río de Janeiro el año 2016 un judoca egipcio, El Shahaby, se negó tras su derrota a estrechar la mano del israelí Sasson.