A menos de un kilómetro y medio al sur de Laraquete, en los terrenos de la antigua Forestal Carampangue, se pretende construir una nueva termoeléctrica en la región. El antiguo balneario, verdadero edén, donde hasta mediados del siglo XX llegaban las ballenas a parir, pretende ser transformado en un basurero al igual que otros rincones del Golfo de Arauco, como Coronel.
La situación de Laraquete es crítica desde el punto de vista medio ambiental, la contaminación de la celulosa, la industria química y ahora una termoeléctrica agudizan aún más las precarias condiciones ecológicas en que se encuentra el territorio donde se emplaza la localidad. Contra esto se ha levantado un Movimiento Juvenil, llamado Laraquete Sustentable, que ya ha realizado diversas actividades en la localidad y que también se ha trasladado hasta Concepción para demostrar su protesta.
Jóvenes de la agrupación Laraquete Sustentable intentan crear conciencia y sensibilizar a la población acerca de los daños que conlleva la construcción y funcionamiento de una termoeléctrica a 1,5 kms de Laraquete: "Es inconcebible que se instale una termoeléctrica a sólo mil quinientos metros al sur de una población, teniendo en cuenta como agravante que el viento sur es el predominante en la zona", nos señala Rodrigo Mellado presidente de la agrupación juvenil, y agrega: "Ellos hablan de que es una central mediana (80 Mw), sin embargo nadie nos garantiza que no tengan planes de ampliación, tal cual ya ha sucedido en Coronel"
Consultados sobre sus actividades, Rodrigo nos cuenta "que el movimiento está recién comenzando, sin embargo, ya han instalando gigantografías en la ruta 160 a la entrada y salida de Laraquete expresando su rechazo. Hemos participado de las manifestaciones contra las termoeléctricas en Concepción, organizado actos culturales y realizado entrevistas y denuncias en diversos medios de comunicación".
Consultado sobre los argumentos de los empresarios, que estas empresas permitirán bajar el enorme desempleo de la región, Rodrigo nos dijo: «No se puede permitir que sigan destrozando la calidad de vida y el ecosistema de nuestra población actual y de las futuras generaciones con el fin cortoplazista de tener 200 puestos de trabajo por apenas un año, plazo que dura la construcción de la central Termoeléctrica. Es injusto y contradictorio que un pueblo entero vea perjudicada directamente la salud de sus habitantes, para que inversionistas de Santiago obtengan el beneficio económico».
Cabe señalar que el grupo inversor, donde se encuentra Paul Fontaine, ex asesor de las campañas de Enríquez Ominami y Piñera, no solo planea construir esta termoeléctrica, sino que además un Depósito de Cenizas, donde se acumularán los residuos de ésta y otras termoeléctricas de la zona. Para variar nadie ha informado ni preguntado nada de esto a la comunidad Laraquetina.