Por Ángel Sanhueza / Resumen.cl
Hay días en que las informaciones y decisiones de gobiernos y dirigentes que consideramos amigos, porque los sabemos de este lado de la barricada, de la calle, de la trinchera o como quiera llamársele, nos dejan un gusto amargo...
Evo Morales, a nombre de gobierno boliviano, que había felicitado a su "hermano" Jair Bolsonaro por su victoria electoral en las ultimas elecciones brasileñas, nos había dejado perplejos. Hay que recordar que también era hermano de Lula, bueno ¿quizás ahora ya no?, en todo caso es una pregunta legítima que debemos hacernos, porque si es hermano de un enemigo jurado de Lula, independientemente de lo que cada uno piense de Lula, o está con uno o está con otro...
Es muy cierto que la política tienen esa particularidad, que dice que cuando se tiene el poder hay que ser pragmáticos... Si nos vamos por lo bajo, tendríamos que decir que pragmático es alguien que actúa de acuerdo a consideraciones prácticas coyunturales o del momento, independientemente que ello resulte contradictorio con los principios, políticas, dichos o postulados ideológicos o de clase, que pudiera haber tenido en un momento determinado.
Eso, por supuesto, es todo lo contrario de la consecuencia, esa que enciende las grandes causas o anima los grandes sacrificios.
El sábado 13 de enero, Césare Battisti, un ex militante del movimiento Proletarios Armados por el Comunismo, que en los años 70 desarrollaron una gran actividad política y revolucionaria en Italia, país donde fue condenado a cadena perpetua por delitos que Battisti niega, fue detenido en la Bolivia de Evo Morales, por policías... italianos y brasileños...
… Y ¿donde se quedó aquello que en Bolivia mandan los bolivianos?... desde el sábado me pregunto eso... y la verdad es que me da, simplemente pena, tanto discurso y palabra y al final...
A los 64 años para Césare Battisti, la prisión prometida por el ultraderechista Matteo Salvini, será dura.
Para Morales y su nuevo hermano... grandes dudas...
Para Salvini... Nunca buscará con tanto ahínco a los neofascistas autores de la voladura de la estación de Bolonia, el 2 de agosto de 1980, donde murieron 85 personas... pero ese... ese es Salvini...
¿Y que dirá de todo esto la madre tierra, tan citada por las orillas del lago Titicaca...?