LITERATURA| A Quemarropa, los inicios de la novela policiaca

Ramón Díaz Eterovic / Trazas Negras

La novela negra y policiaca es un género literario que en España goza de una envidiable salud, tanto en lo que se refiere a la cantidad de autores que lo cultivan como a los académicos y especialistas que analizan sus distintas expresiones, contribuyendo a la constitución de un cuerpo teórico en constante crecimiento. De las tantas publicaciones publicadas en el último tiempo podemos mencionar: A Quemarropa. La época clásica de la novela negra y policiaca de Álex Martín Escribá y Jordi Canal i Artigas (Editorial Alrevés). El primero de los autores es profesor de literatura en la Universidad de Salamanca y codirector del Congreso de Novela y Cine Negro que organiza la misma universidad. El segundo, es director de la Biblioteca La Bóbila, entidad que cuenta con un gran fondo dedicado a la literatura negra y policiaca. Por lo tanto, estamos frente a un libro cuyos autores tienen un conocimiento amplio para abordar con profundidad el objetivo de revisar las diversas terminologías, etiquetas y clasificaciones que ha tenido la literatura criminal desde sus comienzos con algunos cuentos de Edgar Allan Poe. El texto aborda los orígenes de la novela policial clásica (la novela de enigma y los detectives de sillón); la novela negra y sus variantes: la novela de detectives duros, de delincuentes, penitenciaria; la novela psicológica criminal y la novela de procedimiento criminal. Junto a lo anterior se tratan algunos géneros que los autores denominan "compañeras de viaje" de la novela policial como la novela de espionaje, la crónica policial y la novela de suspenso.

La novela negra y policial ha producido una serie de términos y clasificaciones que suelen ser motivo de debates. Uno de los méritos de este libro de Álex Martín Escribá y Jordi Canal es que explica muy bien, a expertos y aficionados, el desarrollo de la terminología que ha acompañado la evolución del género; y que lo hacen de un modo simple y recurriendo a muchos ejemplos de obras y autores, lo que no sólo evidencia el conocimiento de los autores, sino que además terminan siendo una buena guía para lectores interesados en conocer la evolución del género policial y a sus principales exponentes. Otro atractivo de este libro son sus anexos. Uno de ellos lo constituye la reproducción de treinta portadas de clásicos de la novela policial, con lo cual los lectores del género pueden recordar o conocer las presentaciones originales en español de varios clásicos del género. Este anexo también permite apreciar la propuesta estética, siempre llamativa y en muchos casos innovadora, que ha acompañado la publicación de los libros policiacos novela policial.

En el prólogo de este libro, Claude Mespléde se refiere a los prejuicios críticos y editoriales que durante décadas afectaron al género policial. "Afortunadamente -dice-, esta época tan triste ya no está en boga. ¿Se deduce de ello que todos los prejuicios que han afectado a la novela policíaca desde su nacimiento han desaparecido? ¡No! ¡Algunos censores aún están al acecho por si acaso! Y a veces se atreven a preguntar: "Dígame, ¿cuándo va a escribir una novela de verdad". Esta mentalidad comenzó a cambiar a finales de los años setenta y principios de los ochenta del siglo pasado". Y ese cambio, podemos agregar, sigue siendo más profundo y efectivo gracias a libros como el de Álex Martín Escribá y Jordi Canal. Un texto que informa y al mismo invita a recorrer el siempre sorprendente paisaje de la novela negra y policial. Un género que al decir de estos autores "adquiere hoy dimensiones gigantescas y deleita a espíritus de toda índole, convirtiéndose en uno de los fenómenos literarios de moda". De permanente moda, me atrevería a decir, porque con distintos autores y tendencias, desde sus orígenes nunca ha dejado de tener el afecto y la complicidad de los lectores.

Esta reseña ha sido publicada en el quinto número de la revista que puede ser adquirida a través de su sitio web trazasnegras.cl

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