En octubre de este año, la resistencia collipullense al proyecto San Andrés triunfó cuando la empresa española renunció a sus derechos de construcción. Sin embargo, hace tan solo unos meses, el proyecto Cancura de la empresa Chilena/Española Sociedad Vientos de Renaico, entró en operación entre Angol y Collipulli. Y Roberto Standen ya tiene avances en las excavaciones y los caminos que conectará los aerogeneradores entre sí, que el fondo de inversiones Atlas Energy pretende instalar en el fundo Santa Elena. El proyecto, al igual que la mayoría de los proyectos eólicos, no contó con consulta indígena. En un predio que, igual que la mayoría donde se quiere instalar turbinas, se encuentra en proceso de reivindicación territorial.
Por Colectivo Barricada Sur
Mientras la opinión pública pone cada vez más en cuestión el avance de la energía eólica por Malleco, debido a su nula contribución a la economía local, su conflicto con las demandas Mapuche, su alianza con terratenientes locales, y sus impactos ambientales negativos, el Servicio de Evaluación Ambiental ha, solamente este año, aprobado dos proyectos eólicos más, alcanzando ya un número de siete proyectos eólicos preparados para iniciar construcción (véase Tabla). En el siguiente Mapa se aprecia todas las turbinas proyectadas entre las comunas de Angol, Collipulli, Ercilla y Victoria.
Los proyectos, con una excepción, pertenecen a empresas forestales chilenas y empresas energéticas de Estados Unidos o la Unión Europea y pretenden instalar un total de más de 350 turbinas eólicas. La mayoría de los proyectos se han aprobado sin consulta indígena o ciudadana y casi la totalidad se instalan en predios de grandes terratenientes agrícolas o empresas forestales, quienes son los actores locales que más se benefician monetariamente mediante contratos de arrendamiento. Para los vecinos, dejan poco más que efectos negativos, cerramiento de caminos rurales, y la llegada de guardias de seguridad y presencia policial y criminalización de la protesta política Mapuche y no-Mapuche.
Si bien las empresas energéticas hacen hincapié en la utilidad de la electricidad para los hogares, la realidad es que la electricidad se inyecta en el Sistema Interconectado Nacional, donde casi 60% de ella se consume por empresas mineras. Además, las proyecciones de demanda eléctrica a futuro contempla su destinación a la exportación a través del llamado hidrógeno verde.
A continuación se presenta la totalidad de los proyectos instalados y proyectados en el territorio: