En nuestro país hasta 1930, el aborto de un embarazo no deseado se practicaba de forma común pero privada, y no representaba problema para las instituciones del Estado, hasta que significo un grave problema de salud pública de modo que a través del Artículo 119 del Código Sanitario, se autorizó el aborto terapéutico que entró a regir el año 1931.
En los años posteriores, gracias a los planes estatales de alimentación y salud más el descubrimiento de los antibióticos, disminuye la mortalidad infantil aumentando dramáticamente el aborto en mujeres pobres. En el año1960 hubo aproximadamente 300 muertes maternas registradas, derivadas de interrupción del embarazo. El año 1962 entran en circulación las píldoras anticonceptivas. Hacia 1964, la tasa de mortalidad materna era de 118 por cada 100.000 nacidos vivos, este mismo año bajo el gobierno de Eduardo Frei Montalva, se implementó una campaña de planificación, salud familiar y regulación de los nacimientos cuyo objetivo fue diminuir el aborto provocado, y no tener las consecuencias de daños a la salud de mujeres y niños, que representarían grandes costos al Estado.
En los años setenta junto con la preocupación por el crecimiento demográfico y sus eventuales consecuencias políticas y del desarrollo de nuevas tecnologías anticonceptivas, se inició el debate internacional en relación con los derechos de las personas a la información y a los medios para decidir cuándo tener hijos y cuántos. El año 1971 la regulación de la natalidad se incorporó definitivamente a las políticas de salud pública. Las tasas de mortalidad por aborto en el país han disminuido fuertemente desde el programa de Planificación Familiar en la década de los 60, con tazas que van de 10,7 a 0,5 muertes por cada 10.000 nacidos vivos entre 1960 y 2000.
La política durante la dictadura de Augusto Pinochet tendió a la pro-natalidad, con disposición de servicios e insumos, pero fuertemente controlados. Hasta que finalmente en septiembre de 1989 el régimen, derogó la disposición que por más de cincuenta años había permitido el aborto terapéutico en Chile. Actualmente el aborto es prohibido en todas sus formas pero es practicado comúnmente de forma clandestina.
De acuerdo a las estadísticas de la OMS al año 2009 el 60,7% de las mujeres que viven con su pareja usan método anticonceptivo. Sin embargo en Chile las organizaciones internaciones preocupadas por el crecimiento de la población mundial y feministas pro derechos sexuales continúan llamando la atención sobre el problema del aborto clandestino. El año 2002 el Comité de Derechos Sexuales y Reproductivos de la Federación Internacional de Ginecólogos y Obstetras dio a conocer un estudio donde Chile registra la tasa de abortos más alta de América Latina. El 35% de los embarazos de las chilenas, termina en aborto; de ellos 10 % son practicados por adolescentes, incluso niñas menores de 14 años. La cifra alcanza 40.000 abortos al año, 50 por cada 1.000 mujeres en edad fértil. El número de interrupciones se eleva a los 160.000, ya que los registros oficiales reflejan sólo las mujeres que son arrestadas por practicar el aborto, las que mueren tras un aborto clandestino y las que acuden a hospitales producto de una complicación. La mayoría de estas mujeres que son procesadas son mujeres jóvenes, con hijos, con o sin relación de pareja estable, de baja escolaridad y pobres.
En Chile, el aborto es la primera causa de muerte materna; la taza de madres muertas es de 31 por cada 100.000 bebes nacidos vivos, el 25% de las mujeres que se practican un aborto sufren secuelas serias. Mientras más pobreza mas son los riegos, en primer lugar de orden médico, pues la mayoría de las personas que realiza intervenciones clandestinas no tiene competencias técnicas, además de contar con precarias condiciones de infraestructura y materiales adecuados, además al actuar en clandestinidad o sin la preparación medica muchas veces no se responsabilizan por las complicaciones derivadas, en segundo lugar existen secuelas de tipo psicológico al no poder compartir con otras personas esta experiencia.
El mismo estudio del año 2002, indica que en los países donde esta práctica está legalizada no se produce tan frecuentemente, como es el caso de Brasil donde el aborto se permite en caso de violación o por razones terapéuticas, a razón de 40 por cada 1.000 mujeres. En Alemania, Bélgica y Holanda, donde esta práctica es legal las tasas de aborto son menores a 10 por cada 1.000 mujeres.
ANTICONCEPCION DE EMERGENCIA
La anticoncepción de emergencia (AE), se refiere a los métodos que impiden la fecundación del óvulo inmediatamente después de una relación sexual, entre ellos encontramos las píldoras de anticoncepción de emergencia (PAE). El uso de las PAE es la única alternativa para evitar el embarazo después del acto sexual y en casos de emergencia como cuando una mujer olvidó tomar su píldora anticonceptiva regular por más de dos días seguidos, una mujer que ha sido violada y no estaba protegida por ningún anticonceptivo o para quienes no han tenido acceso a otras formas anticonceptivas, de modo que el uso de las PAE previene también un futuro el aborto
El funcionamiento de las PAE depende del momento del ciclo menstrual en el que se encuentra la mujer cuando las toma, si se usan antes de producirse la ovulación, pueden retrasar o impedir la ovulación, si ésta ya ocurrió, las PAE pueden alterar el moco cervical impidiendo el transporte de los espermatozoides o interfiriendo con otras funciones hormonales que se dan antes de la fecundación o fertilización y por lo tanto de esta manera prevenir la fertilización. Si el embarazo se ha producido seguirá su curso normal.
La legislación otorga el deber a postas, consultorios, hospitales, médicos y matronas de poner a disposición la llamada píldora del día después (levonorgestrel), si quien lo solicita es menor de 14 años el funcionario del sistema público o privado debe informar a un adulto responsable.
Sin embargo no siempre es oportuno el acceso al levonorgestrel, pero existe una alternativa que consiste en dosis de ciertas marcas de píldoras anticonceptivas que actúan igual que la llamada "pastilla del día después", el Método se llama Yuzpe. Estas son las marcas y dosis:
METODO YUZPE
Nombre de píldora |
Primera dosis antes de 72 hrs. Idealmente 24 hrs. | Segunda dosis 12 hrs. Después de la primera dosis. |
MICROGYNON CD | 4 | 4 |
ANOVULATORIOS MICRODOSIS | 4 | 4 |
ANULETTE | 4 | 4 |
NORDETTE | 4 | 4 |
NORVETAL | 4 | 4 |
NORDIOL | 2 | 2 |
Estas PAE son más eficientes durante las primeras 24 horas, se pueden comprar en cualquier farmacia, son baratas. Pero hay que tener las siguientes consideraciones:
– De un paquete completo de 28 pastillas anticonceptivas, se pueden usar como pastillas de emergencia las primeras 21, las 7 últimas son placebo.
– No se deben mezclar las marcas.
– Pueden causar nauseas vómitos, fatiga, dolor de cabeza, que desaparecen con máximo en 24 horas si vomitas antes de dos horas de haber tomado la primera dosis debes volver a tomarlas.
– El sangrado se produce días después de la segunda dosis mas menos de la fecha normal, pero si el atraso es mayor a una semana existe la posibilidad de embarazo.
– Si una mujer toma muy seguido las PAE se le puede presentar irregularidades en el ciclo menstrual.
– La anticoncepción de emergencia no protege contra las enfermedades de transmisión sexual, como el sida, solo los condones lo hacen.
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