Pese a que su principal promesa de campaña fue bajar la altísima inflación que afectaba a Argentina, los datos señalan que en el breve tiempo que lleva Milei en el gobierno trasandino y sus extremas medidas de shock, ésta no ha hecho más que aumentar todavía más los altos números que ya arrastraba de antes, perjudicando principalmente a las clases populares que están llevándose el costo de estas medidas.
Por Joaquín Pérez
Javier Milei triunfó en las últimas elecciones presidenciales argentinas, principalmente gracias al proceso inflacionario que vivía el país ya desde el fracasado gobierno de Mauricio Macri, el que continuó con Alberto Fernández y su ministro de economía, Sergio Massa, a quien Milei derrotó en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales del 22 de octubre del 2023.
La inflación había superado el 100% interanual, llegando a peak de dos dígitos en agosto y septiembre de 2023, 11,2% y 12,4% respectivamente. Para muchos, este supuesto experto en economía, entre otras cosas venía a resolver la escalada inflacionaria, sin embargo, a espera de datos oficiales se estima que la inflación en Argentina en diciembre de 2023, cuando asumió Milei, se dispare a cerca del 30% mensual y ya muchos hablan que en enero y febrero esta escalada inflacionaria continuará, ya que el shock económico del que habló Milei al asumir su mandato, está básicamente pensado en que el ajuste económico, lo paguen los sectores populares y las clases medias.
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A espera de datos oficiales, el Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (ISEPCi), desarrolló un estudio en 850 negocios de barrios de 20 distritos del conurbano bonaerense, para medir el efecto de las alzas de precios en una familia de dos adultos/as y dos hijos/as pequeños/as. Si en noviembre de 2023 una familia de estas características necesitaba para adquirir sus alimentos indispensables durante todo el mes $182.905 pesos argentinos, en diciembre ya con Javier Milei en el Gobierno, la misma familia requirió para tener los mismos alimentos en su mesa la suma de $271.572 pesos argentinos o sea 48,48% más que treinta días antes.
Por su lado, la Canasta Básica Total (CBT) que incluye, además de los alimentos, un conjunto de productos que son igualmente indispensables para la vida cotidiana de las personas, tuvo en diciembre un alza de 45,71%.
Los principales aumentos se registran en productos como la leche con 128,5%; bebidas gaseosas 82%, arroz 63%, carne para asado 62,5%, harina de trigo 55,6%, polenta 50% y fideos 49,25%.
Desde que asumió Milei, las grandes cadenas distribuidoras se liberaron de los estudios y controles de precios por parte del Estado argentino, también de leyes que obligan a los supermercados a exponer productos de pequeñas y medianas empresas. Hoy todo está entregado a los grandes monopolios. A ello debemos agregar que las familias argentinas comenzaran a sufrir el fin de los subsidios al transporte público y los servicios básicos, por lo que se viene un alza significativa de tarifas en todas estas cuentas, empobreciendo aún mas a quienes viven de un salario.