Es de conocimiento que acontecimientos como la guerra traen desigualdades, violencias y agudizaciones de otras expresiones de inequidad social. Sin embargo, hay quienes resultan doblemente golpeados por el lugar desde donde se desarrollan en el mundo. Relatos han dado cuenta que mujeres de Ucrania están siendo golpeadas por violencia sexual, tráfico de personas, embarazos forzados y otras violencias al estar a la deriva, en un frente donde nadie se atreve a luchar.

Por Valentina Luza Carrión / resumen.cl 

Los conflictos bélicos siempre han agudizado las debilidades de los países; económicas, políticas y sociales. En efecto, convierten las desigualdades en vulnerabilidades que acechan en la incertidumbre; pues no existe norma o ley que domine territorios donde existen riesgos constantes. Las mujeres, históricamente han sido golpeadas por la guerra al ser tratadas cómo moneda de cambio; o incluso ser también sus cuerpos otro frente de conquista con el que los bandos ejercen violencia. 

Todo conflicto trae consigo crímenes de guerra, vulneración de derechos fundamentales y discriminaciones, así lo ha demostrado la historia y también los hechos, a casi un mes de iniciado el conflicto Ucrania- Rusia. En los últimos días se ha revelado un hecho preocupante para la seguridad de las personas en guerra. Se están evidenciando mafias que buscan trata de personas, específicamente de mujeres y niños/as.

La diputada ucraniana, María Mezentseva, denunció el día de ayer este hecho, confirmando que se vive "un horror" para las mujeres del país. Que se materializan en las violencias sistemáticas, matrimonios y embarazos forzosos, abusos sexuales, esclavitud sexual y tráfico de mujeres y niñas, han sido el ejemplo de lo que constituyen una expresión de guerra que se ha perpetuado desde la antigüedad hasta hoy.

La vulnerabilidad a la que se ven envueltas las mujeres, por la desesperación del conflicto mismo, o necesidades económicas, son contextos propicios para estos crímenes. Todos los ejercitos han transformado la violación en un arma de guerra. 

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En la Segunda Guerra Mundial, se reveló la existencia de esclavas sexuales por montones, o también llamadas "mujeres de consuelo" por el Ejército Imperial, que llegó a tener casi 80.000 víctimas que aún buscan justicia. La guerra moderna,  la que traslada el campo de batalla a la población civil, genera circunstancias donde las mujeres y niños/as son víctimas por partida doble.

Desde organizaciones de ayuda humanitaria, cómo Amnistía Internacional y Break The Silence, han denunciado una situación que irá escalando con los meses; el tráfico y engaño de personas en las fronteras, específicamente en la estación de tren de Przemysl, de Polonia. Evidenciando que la falta de coordinación y medidas de protección Estatal ha aumentado los riesgos de quienes llegan y reciben en el paso fronterizo de Medyka, pues el aumento de traficantes ha estado atentos a esos sitios.

Trata sexual y violencia 

Según datos de A21, ONG que lucha contra el tráfico de personas, se calcula que hay cerca 40 millones de víctimas de trata en todo el mundo, de las que 105.000 serían de España. Se estima que el tráfico es el crimen organizado que más rápido crece y genera más de 126 mil millones de euros al año.

Específicamente en los campamentos de refugiados se está produciendo filtraciones dentro de los recintos, por parte de personas que se hacen pasar por personal humanitario. Así, se da cuenta que se trata de un riesgo que no solo se produce en la travesía hacia la frontera, sino también en el país de destino: «Se nos está informando de organizaciones que llegan y nisiquiera las conocemos» afirman desde Amnistía Internacional.

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Desde la organización Break The Silence, la coordinadora y cofundadora, Alejandra Acosta mencionó que se les pide dinero a cambio de pasaportes y se terminan llevando a mujeres a casas particulares. 

Virginia Álvarez, responsable de política interior de Amnistía Internacional, que también denuncia la falta de coordinación por parte del Gobierno polaco para poder prevenir estos casos, mencionó que: "Las mujeres no saben que van a ser víctimas de trata, es un proceso en el que las captan mediante el engaño o la violencia y quedan atrapadas en esa situación. Los tratantes explotan a las mujeres allí donde hay grietas en el sistema».

Fuente: Mad Nissen.

Aún se desconocen cifras exactas de esta problemática, comentan desde Amnistía Internacional, pero se estima que durante los próximos meses comience a aumentar. Desde la Guerra de Donbass, se conoce de violaciones y desapariciones de mujeres. Una de las dos autoproclamadas Repúblicas Populares, Donetsk, denunció haber encontrado cadáveres de mujeres agredidas sexualmente.

Según indican, presuntamente, fueron agredidas por el ejército ucraniano y se reportaron violaciones y torturas a mujeres por parte de milicias paramilitares. 

Asimismo, Naciones Unidas condenó en su día la impunidad de las instituciones ucranianas en casos de violencia sexual a través de un informe que examinaba el contexto del conflicto armado en el periodo comprendido entre 2014 y 2017.

Según datos del Plan Estratégico Nacional contra la Trata y la Explotación de Seres Humanos 2021-2021 de España, se trata de una de las actividades criminales más rentables. Asimismo, según este mismo informe, mujeres y niñas engloban el 92% de las víctimas por este tipo de explotación a nivel mundial.

El informe Not a private matter. Domestic and sexual violence against women in Eastern Ukraine (2020)  reveló que la violencia hacia las mujeres por parte de sus parejas y por fuerzas militarizadas experimentó un incremento considerable desde 2014: había aumentado en 2018 un 76% en la región de Donetsk y un 158% en Luhansk en comparación con los tres años previos. 

Las estaciones de espera y algunos sistemas 

Según datos de Unicef, -hasta la fecha- más de 3,5 millones de ucranianos han migrado por la intervención rusa. Desde finales de febrero, la población de Polonia ha aumentado en un 15% ya que más de 200.000 refugiados han decidido quedarse en Varsovia hasta que termine la guerra. 

A su estación, llegan aproximadamente unos 6.000 refugiados/as ucranianos, en la hora punta hasta 12.000. Cuando llegan allí, reciben alimentos y productos básicos, y aprovechan de descansar antes del destino final. Este puede ser otro país o un lugar de acogida.

Fuente: Pauline Makov.

Desde Amnistía Internacional comentan que se ha intentado difundir información para que las mujeres tengan cuidado y no reciban ayuda de cualquier persona; además de viajar en grupo y que pidan los datos de quienes les ofrecen ayuda. 

En esta estación, más de un centenar de voluntarios están pendientes para evitar abusos. A unas seis horas de la capital, en la frontera con Ucrania, la policía también ha detectado la presencia mafias de traficantes. 

Sistema para evitar abusos en la frontera

En Przemysl, más de medio millón de personas han pasado, principalmente mujeres, niños y ancianos.  Del mismo modo que, la región desarrolló un sistema en donde los conductores se registran con su licencia y número de matrícula, además de informar el destino antes de recoger a un refugiado. 

Con este sistema, nadie puede abandonar el punto de recogida sin una banda especial en el brazo para que la policía sepa que se trata de un refugiados y un conductor ya registrados.

Sobre esta situación, la agencia Europol subrayó que "los conflictos crean oportunidades para que prospere la delincuencia organizada y amplifican la amenaza que los grupos delictivos pueden representar para la seguridad interna".

Desde la Comisión Europea también alertaron de este riesgo, en especial en situación de niños/as huérfanos que puedan caer en las redes. 

Ayuda coordinada y centralizada

Dado lo anterior, Amnistía Internacional pidió y emplazo a autoridades Polacas – o de ciudades que reciban refugiados- adoptar un sistema de registro institucional y de composición familiar, además de las identidades de quienes se trasladan y quién traslada. 

Ya que, se evidenció que los ucranianos/as llegan a Polonia y reciben ayuda de cualquier persona que pudiera prestarse, perdiendo muchas veces el rastro después del encuentro. Así, todas estas vulnerabilidades han revelado la urgencia que autoridades de Polonia como de países europeos que reciben refugiados deben establecer medidas de prevención y protección.

Muchas mujeres durante el camino, extreman las medidas de cuidado, sin ni siquiera recibir ayuda alimentaria de extraños/as, por miedo a pillarse con proxenetas. Desde la ONG comentan que, una de las primeras recomendaciones mientras se regulariza la situación, es tratar de contactar con autoridades presentes. Asimismo, no pasar ningún tipo de documento personal.

Violencia de género en guerra: algunas normativas internacionales 

La guerra golpea con daño a mujeres y niños, extendiendo las redes de violencia a vulneraciones profundas; cómo la explotación sexual o el incluso el alquiler de vientres. En ese mismo sentido, otro problema ha sido la violencia obstétrica que ha golpeado a ucranianas; pariendo en lugares sin condiciones sanitarias necesarias, en sótanos y con más recién nacidos hacinados. Además de sin cuidados para la madre ni el niño/a.

En ese sentido, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas , en su Agenda sobre Mujer, Paz y Seguridad (2000) menciona algunas consideraciones humanitarias ante conflictos armados y procesos de paz.

Paso fronterizo de Medyka, Créditos: Christoph Reichwein.

Este documento afirma "el importante papel que desempeñan las mujeres en la prevención y solución de los conflictos y en la consolidación de la paz, subrayando la importancia de que participen en pie de igualdad e intervengan plenamente en todas las iniciativas encaminadas".

En este sentido, insta a todas las partes en un conflicto armado a que adopten medidas especiales para proteger a las mujeres y niñas de la violencia por razón de género, particularmente la violación y otras formas de abusos sexuales. En concordancia a los acuerdos internacionales que se establecen en guerras, cómo mínimos humanitarios.

Redes de pornografía: una vía para traficantes

En internet, las redes de trata encuentran un nicho para que el negocio sea aún más lucrativo. Apenas unos días después de iniciado el conflicto en febrero, la búsqueda en redes con términos como "chicas ucranianas", "niñas ucranianas" y "porno ucraniano" se disparó en redes como Pornhub.

Este hecho, para Alejandra Acosta Break The Silence, refleja nuevamente la intención de captación de víctimas que poseen las redes y que puede reflejarse en próximas desapariciones y secuestros, para ser víctimas de la industria pornográfica. 

"La prostitución se empieza a perseguir cada vez más, pero en Internet hay más herramientas para captar masivamente a muchas mujeres de diferentes países", comenta.