[resumen.cl] Pasadas las 17.00 hrs de la tarde de este martes, una veintena  de músicos callejeros penquistas se congregaron en la plaza Tribunales de Concepción para manifestarse por el derecho al uso de los espacios públicos para expresión artística y lugar de trabajo.

La convocatoria fue realizada por Felipe, quien explicó que actualmente no existe una organización que aglutine a músicos o artistas callejeros,  pero que decidió hacer el llamado ante la constante represión que afecta a los artistas callejeros,  agudizada durante la copa América.

A mediados de junio el municipio anunció que no entregarán autorizaciones a los músicos debido a los reclamos de los vecinos del paseo Barros Arana, donde se ubican las principales tiendas del retail y es principalmente, un lugar de tiendas comerciales y oficinas. «Los inspectores municipales hablaron con los artistas que tenían permiso para que se bajará el volumen de sus amplificadores, pero no hubo un grado de compromiso con ellos. Por lo tanto, ahora no se están entregando estas autorizaciones», explicó el administrador municipal de Concepción, Aldo Mardones al diario La Estrella de Concepción.

Felipe  manifestó que los espacios públicos deben ser recuperados porque son de todos,  agregó que la prohibición de que los músicos trabajen o simplemente se expresen en el paseo peatonal trata de esconder una realidad que es la del trabajo precarizado y los altos niveles de cesantía. Nuestra región ocupa el cuarto lugar a nivel nacional en tasa de desocupación a 0.4 puntos porcentuales del primer lugar  y aún así el municipio de Concepción impide que los artistas ocupen el espacio público para trabajar.

Los músicos callejeros sufren constantemente la persecución de carabineros, quienes multan e incluso les quitan los instrumentos que constituyen sus herramientas de trabajo.  Carabineros afirma que no está permitida ninguna manifestación artística sin permiso municipal ya que altera el orden público y molesta a "vecinos" y transeúntes, no obstante los músicos dicen recibir constante apoyo de los penquistas que transitan por el centro de la ciudad o usan el transporte público.