Casi tres meses después del golpe dado por el Congreso y las Fuerzas Armadas al gobierno democráticamente electo de Pedro Castillo, y de las masacres contra manifestantes, desde el alto comisionado para los DDHH de la ONU, enviaron una misiva dando plazo de 60 días al Ejecutivo peruano para que informe sobre las denuncias de uso excesivo de la fuerza, detenciones arbitrarias, asesinatos, entre otros.

Por Juan Contreras Jara

Desde el 7 de diciembre de 2022, Perú está sumergido en una crisis política, que ha decantado en brutales jornadas represivas por parte del gobierno de facto de Dina Boluarte. Pese a la gravedad de la situación y a la condena pública de la situación por parte de distintos mandatarios en Latinoamérica, recién este martes, desde la ONU, le pidieron explicaciones al Ejecutivo peruano.

Por medio de una carta enviada al representante de la Misión Permanente del Perú ante la ONU, Luis Juan Chuquihuara, el organismo de Derechos Humanos solicitó información detallada sobre el uso excesivo de la fuerza, uso abusivo de la tipificación penal terrorista, detenciones arbitrarias y asesinatos contra grupos indígenas, entre otros, en un plazo máximo de 60 días. 

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Tal ha sido la represión del gobierno de facto de Boluarte, que en lo que va desde el derrocamiento de Pedro Castillo, militares y policías se han cobrado la vida de más de 60 manifestantes, entre ellos, indígenas. 

Las exigencias que han volcado a la calle al pueblo peruano son claras: la destitución inmediata de Boluarte, el cierre del Congreso, adelantar las elecciones, liberar a Castillo y enjuiciar a los agentes del Estado que han incurrido en las masacres.

Cabe recordar que, paralelo al pronunciamiento desde la ONU, una unidad especializada en Derechos Humanos de la Fiscalía de Perú mantiene una investigación contra las Fuerzas Armadas, Policía, ministros, exministros y hasta la propia Dina Boluarte, por todos los asesinatos de manifestantes durante las protestas en Ayacucho.

Actualmente, desde distintas partes del Perú, se movilizan nuevamente caravanas con dirección a Lima, con la finalidad de exigir la salida de Boluarte. La jornada de protesta está siendo acompañada de un paro nacional por parte del Frente Nacional de Transportistas y Conductores del Perú.