Los Estados de Bahía y Espíritu Santo en Brasil, fueron sede de un encuentro internacional contra la expansión de arboles transgénicos. Los organizadores y asistentes afirman que son una amenaza para la integridad de ecosistemas y comunidades en todo el planeta. Resumen estuvo y registró el evento internacional.
Texto y fotos por Nicolás Salazar Maleras
Alerta internacional ha provocado el anuncio de aprobación comercial de Eucalipto transgénico resistente al glifosato en Brasil durante el año 2022. El glifosato es un potente agrotóxico y herbicida. La variedad transgénica de eucalipto fomentará el uso de este cuestionado agroquímico.
Estas experimentaciones transgénicas implican todo el «paquete tecnológico» asociado a ello, es decir, los pesticidas y químicos para que las plantas transgénicas se desarrollen, ya que son muy dependientes a los insumos externos de origen industrial.
En Chile, instituciones como la Universidad de Concepción y empresas como Forestal Arauco y CMPC han desarrollado investigaciones con árboles transgénicos, entre otras.
En este contexto, representantes de diversas organizaciones de países como Chile, Argentina, Brasil, Canadá, Estados Unidos, Nueva Zelanda y Japón, entro otros, se reunieron para discutir los impactos del monocultivo de eucalipto transgénico y otros árboles con esta característica.
El encuentro es parte de la iniciativa internacional «Detengamos los Arboles Trangenicos» (Stop GE Trees)
El peligro de los árboles transgénicos
La actividad fue organizada por la campaña internacional «Detengamos los árboles Transgénicos» la cual lleva más de 15 años alertando sobre los impactos que podría generar la liberación masiva de árboles transgénicos a los ecosistemas del planeta. La organización detrás de la convocatoria fue también Global Justice Ecology Project.
Ann Peterman, organizadora del evento, expresó que actualmente son «Brasil y Estados Unidos los dos países que han desarrollado más la industria de los árboles transgénicos o genéticamente modificados. A esto se le puede agregar China, la cual también ha experimentado de forma importante, sin embargo los datos no son públicos».
Ricarda Steinbrecher es bióloga experta en investigación molecular de la organización ECONEXUS. La especialista afirmó en el encuentro que «Los impactos de los árboles transgénicos pueden ser mucho mayores que otras especies vegetales como los cultivos agrícolas, ya que son organismos que pueden vivir durante cientos de años, incluso más que los humanos. Por tanto liberarlos al medio ambiente puede generar grandes impactos inmediatos y a muy largo plazo».
Steinbrecher además expresó que «no sabemos ni existen suficientes investigaciones que nos puedan dar luces sobre lo que sucederá si son liberados masivamente a los ecosistemas. Los árboles transgénicos pueden producir más celulosa y esto puede, por ejemplo, aumentar el consumo de agua, por tanto puede tener impactos poco predecibles. No sabemos tampoco que sucederá con la micorriza y con los organismos del suelo con esta biotecnología».
Según la bióloga, es necesario «que exista una moratoria a los árboles transgénicos a nivel internacional, para poder detener lo que podría ser un desastre a escala mundial».
Por su parte, la investigadora Lucy Sharratt de la Red Canadiense de Acción Biotecnológica realizó una completa exposición del estado actual de los árboles transgénicos en todo el mundo. Sharrat es la principal escritora de un informe internacional titulado «Estatus global del desarrollo de árboles genéticamente modificados: una creciente amenaza».
La presencia de América Latina en el encuentro
Diversos representantes del continente latinoamericano estuvieron en la cita.
FASE fue la organización anfitriona, una ONG con más de 60 años de experiencia en la defensa de derechos humanos y causas ambientales.
Los representantes de Brasil expusieron sobre diferentes impactos socioambientales del monocultivo de eucalipto. Además, se declararon en total oposición a la expansión de las variedades transgénicas de eucalipto.
De especial interés fueron las presentaciones de las comunidades afrobrasileñas quilombolas, las cuales expresaron los permanentes conflictos con las grandes empresas de monocultivo forestal y celulosa en Brasil. Hicieron hincapié en la contaminación por medio de fumigaciones de pesticidas con drones no tripulados. Además la creciente represión y despojo de sus tierras por parte de estas empresas.
Por su parte, el Movimiento de los campesinos sin tierra de Brasil (MST) también estuvo presente, mostrando sus experiencias de sustitución de monocultivo de eucalipto por proyectos agroecológicos. Los integrantes del MST también se encuentran en pie de lucha contra las grandes celulosas, a través de la recuperación de tierras y la acción directa.
De Argentina se presentó Silvana Romero, representante del pueblo originario Guarani y la Provincia de Corrientes. Al respecto, Silvana comentó que la expansión del monocultivo de eucalipto está generando graves problemas en su territorio. En particular, sobre los ecosistemas de humedales y también, por los cada vez mayores incendios forestales.
Silvana Romero también expresó que Argentina tiene un elevado desarrollo de la transgenia, principalmente por el cultivo de soya y otros productos agrícolas. Ven con preocupación el avance de las variedades de eucalipto transgénico en Brasil. Además, mencionó la presencia cada vez mayor en su territorio de la empresa Forestal Arauco, de origen chileno.
Desde Chile estuvo presente el Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (OLCA) el cual realizó una presentación sobre los impactos del monocultivo forestal en Chile y territorio mapuche. Además los representantes del observatorio mencionaron las diversas investigaciones transgénicas que se han desarrollado en Chile en torno al Pino y al Eucalipto.
Al respecto, mencionaron que existe la necesidad de seguir investigando y contar con recursos para indagar sobre el actual estado de la transgénesis en arboles en Chile.
Brasil: el país que ha aprobado 2 variedades de eucalipto transgénico
Actualmente, Brasil es el principal exportador de celulosa con aproximadamente 8 millones de hectáreas plantadas de monocultivo de eucalipto. Además, se encuentran dos variedades transgénicas de eucalipto aprobadas en el país.
Las variedades transgénicas de eucalipto aún no se expanden masivamente de forma comercial en Brasil, principalmente por las trabas que el sello internacional de sustentabilidad FSC ha interpuesto.
Sin embargo, algunos grupos de científicos ya han pedido a la FSC que deje de poner trabas a los arboles transgénicos, y se teme que la industria forestal realice presiones para eliminar este elemento dentro de la certificación forestal de la FSC.
Actualmente, es la empresa Suzano, principal productor mundial de celulosa, la que está detrás de las principales investigaciones tras la producción de arboles transgénicos en Brasil.
Cabe destacar que la trasnacional de origen chileno Forestal Arauco está operando en el estado de Mato Grosso del Sur en Brasil, por lo que podría verse beneficiada con el marco regulatorio legal y las investigaciones de eucalipto transgénico que se encuentran desarrollándose en el país.
Actualmente, no existe transparencia ni datos públicos del gobierno de Chile en torno a la experimentación con arboles transgénicos.