Plataforma Conmover: por una política del encuentro, conectar y mover

Por Paulina Barrenechea Vergara / resumen.cl

En tiempos vertiginosos como los actuales, cargados de gestos y archivos que nos regresan a esos cuerpos heridos por la violencia estructural y estatal de una dictadura que sigue vigente; detenerse y observar cómo y porqué nos movemos, no sólo es sugerente, sino que una necesidad. Experimentar y pensar, sin apuro, los procesos que atraviesan los cuerpos en movimiento son las derivas de la Plataforma Conmover, proyecto escénico, formativo e investigativo integrado por Natalia Figueroa, Francisco Carvajal y Loreto Urrutia.

Los pulsos y ritmos que atraviesan su trabajo en danza apuestan por los procesos lentos de creación, la potencia del contact y la improvisación, la dimensión política de lo vocal, la visualidad y el jamás temerle a las complejidades de lo corporal, sus sensibilidades, sus tiempos, sus relatos y subjetividades. De esos procesos emerge, precisamente, la pieza "Des Atar. Atmósferas para sellar", estrenada a mediados del 2019, en Artistas del Acero. Su dramaturgia transita en torno a lo afectivo y lo evocativo de los cuerpos habitando un territorio, como espacios de memoria y agencia política. Carne y piedra, como comparte el sociólogo Richard Sennett.  "Des Atar" tiene tres texturas escénicas, siendo la video danza, el eje de una experiencia creativa que, además, es una instalación y un ejercicio coreográfico en escena. Un trabajo que está pensado desde su potencial mediador, sobre todo hoy, cuando el estallido social ha hecho caer las grandes narrativas del capital y emergen las historias de un tejido social que se renueva desde lo personal, como acto de memoria, y lo colectivo, como accionar político.

Actualmente, "Conmover", está trabajando en un nuevo proceso creativo llamado "Primario" y planificando su año 2020, en un escenario donde la autogestión no sólo será un contexto, sino que una toma de posición dentro de su quehacer escénico. Conversamos con el trío, en esa coyuntura, en un diálogo desde el presente y mirando lo que ha sido su recorrido en estos cinco años como plataforma.

¿Cuáles creen que son los elementos que caracterizan el proyecto de Conmover en términos creativos?

 

Natalia: "El proyecto Conmover surge en la búsqueda de una danza que acogiera la sensibilidad como sustento del movimiento, de la creación y de la colectividad en sí misma. Se orienta desde dos conceptos: conectar y mover. Deseamos generar una conexión con uno/a mism0/a, con los/as otros/as y con el entorno. Esta conexión, creemos, que viaja por distintas comprensiones del cuerpo, un cuerpo anatómico, un cuerpo energético, un cuerpo biográfico, un cuerpo sensible, un cuerpo emocional, un cuerpo en movimiento, y así muchas más".

Francisco: "Quizás, en este sentido, hemos querido poner en el centro de nuestra exploración distintas formas de ser cuerpo y abrir nuestra danza a algo más que la coreografía".

Natalia: "Pensamos la danza contemporánea como un acto abierto a la sensibilidad de quien la ve, de ahí el nombre Conmover, como el acto de incidir en la sensibilidad y en el imaginario, tanto de nosotros como de con quien compartimos nuestro trabajo".

Francisco: "Claro, a nivel creativo, no nos centramos en un discurso narrativo, sino que intentamos resonar en el otro, en donde converjan discursos, sensibilidades, imaginarios y visualidad, siendo siempre distinto en cada persona. Por esto nos sentimos cerca a prácticas que habilitan estas búsquedas, como el contacto improvisación, la improvisación, la vocalidad, las artes marciales, las prácticas somáticas y la meditación".

Loreto: "Hasta el momento nuestro foco ha sido investigar y potenciar en el territorio en nosotros y nosotras, en espacios de exploración y estudio, con una perspectiva de la danza y del movimiento que se basa en la escucha, la sensibilidad y, precisamente, desde el presente. El 2016 comenzamos a profundizar en el estudio del contacto improvisación, y a partir de ello surgieron las jams como un espacio vital del Conmover".

Imagino que la creación, entonces, se vuelve una pulsión constante en todos los espacios y acciones que como plataforma activan, no necesariamente está pensada con tiempos de producción tradicionales.

Natalia: "A nivel creativo, confiamos en el proceso y en su temporalidad. Al hablar de proceso nos referimos a algo que no tenemos claridad en cómo va a terminar, sino que tenemos una atención que viene de un campo sensible y que nos invita a crear algo. El proceso va develando ciertas necesidades que se van cubriendo con la conformación de un equipo muy diverso, respondiendo a las sensibilidades que se van despertando y esto ha abierto un espacio de interacción-conversación con otros(as), en contextos íntimos de trabajo con un círculo de compañeros".

Francisco: "Nos hemos dejado llevar por el flujo que tiene el proceso de crear, sin tener siempre definidos el formato, el propósito, el contenido ni su duración en términos de obra ni proceso. Esto, claro, tiene desventajas, pero igual confiamos en que estamos habitando los trabajos que queremos crear". 

Natalia: "Nuestro proyecto apela a una política de lo sensible, referido a habitar el presente y entrar en un estado de danza, que requiere reforzar la escucha de lo que somos y cómo estamos para poder llevarnos un poco más allá y reflexionarnos desde y con la corporalidad y el movimiento. Esto requiere tiempos que el sistema no promueve. Por ello, la autogestión, que si bien complejiza el proceso, también es una apuesta política pues que nos permite crear en un tiempo laxo, que no tiene que ver con un tiempo productivo, sino que un tiempo creativo; ajeno al sistema actual".


A propósito de eso y pensando en las dimensiones políticas que tiene la danza hoy, ¿Qué tensiona o incomoda dentro de la escena actual? 

Natalia: "Estamos en un momento donde vivimos mucha automatización y homogenización de las prácticas, en que es mejor no mostrar lo que es demasiado íntimo, lo que no está acabado o lo sucio. En el Conmover partimos desde allí, en el sentido de que no buscamos un producto perfecto, sino más bien vivo, con todos sus registros. Si bien, tenemos un sentido de disciplina, y estudiamos para ello, está orientada a habitar en su máxima complejidad nuestra danza, y ello requiere que no todo sea liso y previsible". 

Francisco: "También, algo no menor, es que somos una plataforma y, como tal, creemos y nos basamos en la colaboración horizontal. En espacios abiertos a la comunidad, como las jams; hemos ido abriendo, por un lado, el campo de lo que entendemos como comunidad de la danza, y qué cuerpos y experiencias la componen. Y por otro lado, cómo construimos comunidad, ya que no sólo nos juntamos en el cotidiano, sino que de frentón, bailamos juntos y nos apoyamos dentro de nuestras danzas, espacios y exploraciones. En ese ámbito, podríamos hablar de una política del encuentro dentro de nuestro actuar".

 ¿Hay una escena actual en danza contemporánea en Concepción? ¿Dónde sienten que están posicionados ustedes?

Loreto: «En Concepción, creemos que se viene gestando hace bastante tiempo una escena de danza contemporánea fuerte y, por sobretodo, muy diversa, con distintos abordajes de lo que se considera contemporáneo y con distintos dispositivos de creación y producción. Esa diversidad fortalece el hecho de su existencia, puesto que es imposible delimitar desde una sola visión lo que es y lo que no es contemporáneo".

Natalia: "Vemos que hay un circuito que se vincula desde allí, sin que todas las propuestas que convergemos ahí sean homogéneas en las formas de comprender la danza contemporánea. Algunos, desde la técnica corporal contemporánea, otros desde la comprensión contemporánea de la obra o del lugar del intérprete, otros desde el formato o soporte desde sus obras, o de todas estas cosas un poco".

Francisco: "Lo cual está bueno, porque también creemos que estamos en ese proceso de comprender y ampliar más que restringir la definición de lo contemporáneo, y eso requiere de un sentido de comunidad que es necesario e interesante de reforzar". 

El año 2019 estrenaron la pieza en video danza "Des Atar. Atmósferas para sellar". De alguna manera, este trabajo, resumen en mucho la propuesta sensible y creativa que Conmover tiene, ¿cómo se desarrolló ese proceso y cómo se entrama con su actual trabajo Primario?

Natalia: "La apuesta inicial fue un laboratorio, el que bastante avanzado en su camino fue derivando hacia la videodanza. Luego, finalmente, acoge el formato de video instalación. Nuestras búsquedas corporales se orientaron hacia la sensibilidad y hacia la activación de un cuerpo evocativo, que en su conjunción con el lugar se convierte en un propulsor de la memoria".

Francisco: "Aquí aparece la improvisación como mecanismo de creación, el habitar como práctica estética, siendo el espacio y el estado presente de importancia vital para el desarrollo de la propuesta escénica. Trabajamos junto a Natalia, como intérpretes, y Loreto Urrutia, desde la propuesta de diseño integral de la videoinstalación. También trabajamos con un grupo de invitados que fortalecieron enormemente el trabajo, como Antu Miranda y Carlos Silva, en lo audiovisual, también se sumó La Orquesta Flotante, en  la composición musical, y Andrés Pérez en la investigación inicial". 

Loreto: "Ahora, con Primario, nuestra búsqueda corporal está orientada hacia un movimiento activo que se desprende de una escucha afinada y una atención plena. Queremos retornar a nuestro cuerpo vital y activo en la interacción con el otro (a) y con el entorno. Lejos de la automatización de la respuesta, nos preguntamos cómo vitalizar el cuerpo desde la atención, animalizando nuestra humanidad, pero sin abandonar esa cualidad sensible que nos permite percibir el entorno en su profundidad, y así construir un convivir armónico. Para ello estamos trabajando en espacios naturales, para abrir nuestro campo de percepción y acción. Recién abrimos esta exploración, pero sin duda estamos felices de ya estar reflexionando la práctica". 

¿Qué y cómo se visualizan en durante este 2020?

Francisco: "Durante los meses próximos comenzaremos el proceso de laboratorio en Dunas de Yani, para nuestro nuevo proyecto creativo Primario, donde trabajaremos nuevamente en colaboración con artistas audiovisuales, pero esta vez para un montaje escénico. Este proyecto nos tomará al menos el primer semestre, durante el que esperamos generar una apertura de proceso durante el mes de junio y, luego, una temporada".

Natalia: "Además, durante este primer semestre, tenemos en mira una gira por el sur con con la video – instalación Des Atar completa y no sólo el producto audiovisual. Y también una pequeña gira en Santiago, pero con una orientación hacia las comunidades educativas, con un dispositivo de mediación artística en que se aborden los elementos de memoria, patrimonio y socioemocionales del proyecto». 

Loreto: "Nuestro desafío más grande es no cansarnos ante la dificultad tamaña que significa mantener y defender un proyecto así desde la autogestión. Todas (os) tenemos un amor profundo por nuestra práctica artística, y creemos que es necesario mantener a flote la sensibilidad en el cuerpo danzante. Si bien este año, al igual que otros, no obtuvimos el financiamiento necesario para hacer los proyectos de la manera más óptima, creemos que desde nuestras redes podemos activar estos espacios, y seguir con esta convicción sentida".

Si quieres conocer algo más de Plataforma Conmover, las acciones formativas que desarrollan durante el año, las jornadas de Jams y sus procesos creativos, puedes acceder a sus redes sociales en:

Facebook: https://www.facebook.com/conmoverconcepcion/

Ig: @conmoverconce

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