[resumen.cl] En 93 de las 346 comunas chilenas se realizó, este domingo 19, elecciones primarias para elegir candidatos a alcalde. 43 para el pacto de ultra derecha, Chile Vamos y 53 para la Nueva Mayoría, a estas alturas de inclasificable nomenclatura en el arco político. Solo en 3 municipios se realizaron elecciones en ambos pactos.
En este segundo párrafo vendrían los datos y cifras de la jornada, decir que ganó DJ Méndez en Valparaíso, que otro Van Risselberghe vendrá por la alcaldía de Concepción y otras lindezas del sistema político-electoral, pero no, no es lo relevante todo eso. Lo importante es informarlos del cerca de 5% de participación. Todos los números están en servel.cl ahí lo pueden desagregar. Lo significativo es reparar en que nadie pesca, a nadie le interesa y es por eso que, en los próximos meses y años veremos a políticos viejos y nuevos haciendo denodados y ridículos esfuerzos por mantener a flote una "democracia" que no da para más, en un estado que tampoco da, y esa es la cuestión. No faltarán los nuevos profetas y los renovadores de diverso color, los llamados a la recuperación de la democracia y cantos de sirena por el estilo, en fin, nada que no se haya visto.
Bien, este patético ejercicio de la elite política puede tener muchas lecturas y alguna proyección, a continuación dejamos nuestras elucubraciones que, en futuras ocasiones, profundizaremos:
1.- Una primera cuestión es cerciorarse que los partidos políticos del orden no querían primarias, vimos hace un tiempo el payaseo de la Nueva Mayoría con el Servel, Isabel Allende y demases personeros dirigentes, claro, sabían perfectamente que esto sucedería, dejando en evidencia el nivel de desastre en que está la política formal del país. Nunca quisieron este trago amargo.
2.- La baja participación proyecta, a nivel de deseo latente, la rápida descomposición de la "democracia" chilena: sin lugar a dudas es el momento de los partidos de jóvenes rostros, pero de métodos viejos, la renovación del partido del orden parece venir por incorporar ofertas y marcas nuevas; por muy remozados que aparezcan las agrupaciones tradicionales, estas calientan menos que sol de invierno.
3.- Los resultados son irrelevantes en relación a los partidos, viendo el marco de mínima participación, obviamente dirán cualquier cosa para no reconocer esto, los que ganaron, seguramente lo hicieron llevando a la familia, militantes y amigos, y ya estamos listos, ese mínimo de disciplina decidió la balanza en la mayoría de los casos. El asunto es que el integrismo del partido del orden es completo y total, el problema vendrá cuando, crecientemente, las organizaciones populares les cobren esa adhesión a quienes mantienen al pueblo en la cuerera.
4.- En la DC y grupos de derecha de la NM, se desató una histérica reacción en torno al voto obligatorio y su retorno. Sin duda esta será otra batallita pobre a librar con la "izquierda" del pacto regalón del yerno SQM de Pinochet, respecto a esto solo recordar que el voto voluntario solo funciona en sociedades con profundas convicciones liberales, y en Chile eso murió junto con el bombardeo a La Moneda, reemplazado en los noventa por el mercadeo electoral que tiene a Orpis en cana y a muchos en la lista de espera. Pronto se anunciará la ampliación de la capitán Yaber.
Por otra parte, podríamos comparar esta mini participación en las primarias municipales con la cantidad de gente en el proceso constituyente, ambas solo funcionales al partido del orden, la despolitización del pueblo chileno llegó a niveles tales que, ni en los espacios formales, facilistas y tradicionales, como el sufragio hay participación; menos se podría esperar de este intento cambón de domesticar asambleas que solo reafirmen un proyecto de constitución escrita por el guatón Correa u otro charlatán (es) por el estilo. Ese será el otro fracaso rotundo que anuncia el fin de la Nueva Mayoría.
El patetismo fue la tónica de la jornada y, por más explicaciones ridículas que ensayó la prensa y los analistas de panel televisivo, -léase mucho frío, día del padre y partido de Chile el día anterior- la razón de fondo es el desmoronamiento de la feble "democracia" chilena y una ciudadanía cansada de una retórica tan inútil como agotada. Si bien esta instancia se convocó solo para los pactos del partido del orden, es decir, las dos derechas; cabe preguntarse por varias cuestiones, por ejemplo ¿Qué sentido tiene la lógica liberal de una persona un voto, cuando vota menos del 50%?, ¿Qué rol tienen los partidos políticos, incluidos los nuevos, en un sistema electoral tan poco convocante como el chileno?, ¿Esto preludia el fin del proceso constituyente, en cuanto valida la institucionalidad vigente?
Bueno, visto lo visto, las posiciones de la radicalidad política chilena parecen distanciarse de esta discusión, centrándose en la organización, dispersa todavía, de las luchas territoriales y sectoriales, eso esperamos y si, eso es un espacio tan amplio como insospechado de desarrollo, pero hoy hemos visto que conservadores y progresistas están peor, no están en ná, como dice la canción.
Imagen de Fiestóforo