[resumen.cl] El ministro en visita extraordinaria para causas por violaciones a los Derechos Humanos de la Corte de Apelaciones de Santiago, Mario Carroza, dictó auto de procesamiento en la investigación que sustancia por los secuestros calificados de Héctor Velásquez Mardones, Vladimir Jaccard Siegler, Ricardo Ignacio Ramírez Herrera, Ruiter Enrique Correa Arce, Matilde Pessa Mois, Jacobo Stoulman Bortnik y Hernán Soto Gálvez, víctimas de la denominada «Operación Cóndor».
En la resolución, el ministro Carroza encausó a los ex oficiales de ejército y agentes de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA): Jorge Marcelo Escobar Fuentes (brigadier en retiro), René Miguel Riveros Valderrama (coronel en retiro), Federico Humberto Chaigneau Sepúlveda (teniente coronel en retiro), Gladys de las Mercedes Calderón Carreño (oficial de reserva) y Hernán Luis Sovino Maturana (capitán en retiro), por su responsabilidad en los delitos. Todos los procesados eran integrantes de la sanguinaria Brigada Lautaro de la DINA, que dirigía el oficial de ejército Juan Hernán Morales Salgado. Esta unidad actuaba como brazo ejecutor de los crímenes decididos por el dúo Pinochet-Contreras y que operaba en el cuartel Simón Bolívar, recinto del que ningún prisionero salió con vida.
De acuerdo a los antecedentes recopilados en la etapa de investigación, el magistrado logró acreditar los siguientes hechos:
«Ante la necesidad de canalizar ayuda financiera externa para fortalecer las acciones del Partido Comunista en Chile, viaja desde Suecia a Buenos Aires «Alexei Vladimir Jaccard Siegler», con la misión de contactarse con los militantes del partido Ricardo Ignacio Ramírez Herrera y Héctor Heraldo Velásquez Mardones, encuentro que no pudo concretarse, al ser los tres detenidos por la Policía Federal Argentina en esa ciudad el día 16 de mayo de 1977 y entregados a la Dirección Nacional de Inteligencia DINA, quienes le trasladan a Chile y proceden a recluirlos e interrogarlos en el Cuartel denominado Simón Bolívar, ubicado en la arteria del mismo nombre N°8.630, donde fueron vistos por última vez con vida, ignorándose desde ese momento su paradero y hasta la fecha, ni se han tenido noticias de Velásquez y Jaccard, quienes tampoco registran salidas o entradas al país y menos consta sus defunciones».
«Sin embargo, en el caso de Ricardo Ramírez Herrera, parte de sus restos fueron encontrados en la Cuesta Barriga, al igual que el matrimonio formado por Jacobo Stoulman Bortnik y Matilde Pessa Mois, quienes viajan a Buenos Aires para concretar la forma como se enviaría el dinero a nuestro país, pero ellos son detenidos el día 29 de mayo de 1977, en el aeropuerto en los momentos en que bajaban del avión, perdiéndose desde ese momento todo rastro, hasta que se comprueba que fueron inhumados en «Cuesta Barriga» lugar del hallazgo de parte de sus restos óseos. Que, además, dos militantes del Partido Comunista que servían de enlace en Chile para estos efectos, son ejecutados, Hernán Soto Gálvez el día 5 de junio de ese mismo año y Ruiter Enrique Correa Arce el día 27 de mayo de 1977. Todo lo anterior, evidencia una operación coordinada de los servicios de inteligencia de Argentina y Chile, que concordaron el traslado de los detenidos en Argentina y su posterior ejecución en nuestro país, conjuntamente con aquellos que servían en Chile de contacto».
La Operación Cóndor fue un plan de coordinación entre los principales aparatos represivos de las dictaduras militares del cono sur de América Latina implementado desde mediados de los 70 hasta mediados de los 80. Siguiendo las disposiciones del Pentágono, los jerarcas represivos de Argentina, Uruguay, Paraguay, Brasil y Chile, fueron los impulsores y componentes de este macabro plan. Esta coordinación represiva estaba destinada a la persecución y eliminación de militantes de izquierda y opositores a los regímenes dictatoriales mediante el secuestro, la desaparición, el asesinato y otras operaciones de exterminio y represión política que incluyó el robo, apropiación o tráfico de menores de edad secuestrados junto con sus padres o nacidos en cautiverio. Los episodios más notorios del accionar del plan Cóndor que afectó a opositores a la dictadura pinochetista fueron el crimen de ex comandante en jefe del ejército, general Carlos Prats, asesinado en Buenos Aires en septiembre de 1974, el atentado criminal contra Bernardo Leighton en Roma en octubre de 1975, el asesinato de Orlando Letelier en Washington en septiembre de 1976, entre otras decenas de ejecuciones repartidas por el mundo contra militantes de izquierda.
Las implicancias, ramificaciones y consecuencias de la Operación Cóndor es lo que lleva a que el tirano Pinochet sea detenido en Londres en 1998 y a que una veintena de criminales se vieran obligados a no salir de Chile para no correr igual suerte que el criminal en jefe. Solo a partir de este episodio londinense la justicia chilena se atrevió a iniciar procesos judiciales para investigar estos hechos, aunque en algunos casos fuera solo para mantener las apariencias, como en el caso del tirano.