[resumen.cl] Entre el 26 y el 28 de octubre se realizó el segundo encuentro nacional de la Red Nacional de Humedales en la Universidad de Concepción. Espacio en el que 33 organizaciones dedicadas a la defensa y puesta en valor de los humedales tomaron acuerdos en cómo enfrentar los desafíos que suponen la coordinación de las distintas realidades territoriales desde Arica a Punta Arenas.
La actividad se realizó simultáneamente a la Decimotercera Reunión de la Conferencia de las Partes Contratantes en la Convención de Ramsar, relativa a los humedales de importancia internacional especialmente como hábitat de aves acuáticas, celebrada en Dubai entre el 21 y 29 de octubre, y de la cual Chile es parte.
Fue organizada por la Red de Humedales del Biobío, conjunto de organizaciones territoriales, ambientales y/o comunitarias que se habían articulado en la protección de estos cuerpos inundables y que durante este año decidieron oficializar el trabajo conformando dicha estructura.
Este segundo encuentro se enfocó en el desarrollo de los compromisos suscritos por organizaciones de todo Chile en el Primer Encuentro Nacional de Humedales de Valdivia (2017) y en el Encuentro Binacional de Reservas Naturales Urbanas de Punta Arenas (2017). De esta forma se dividió en tres ejes: el establecimiento de objetivos como Red Nacional y formas de trabajo colaborativa a lo largo de Chile; la generación de estrategias de difusión sobre la realidad nacional y estado de los humedales; y establecer un petitorio nacional a partir de la realidad local que se vea reflejada en la elaboración y composición de las leyes que puedan proteger a los humedales en nuestro país.
Rocío Alegría Altamirano, parte de la comisión organizadora, conversó con Resumen para entregar los detalles de la jornada, los análisis y acuerdos tomados por las y los participantes.
A modo de síntesis, durante la jornada «pudimos establecer orgánica, establecer y reafirmar ciertos objetivos de trabajo que ya estaban y establecer un plan de trabajo para lo que queda de 2018 y para el 2019. Somos una red nacional que respeta las formas de organización de cada integrante pero de todos modos establecemos algunas líneas generales», afirmó la organizadora.
En cuanto a las amenazas que tienen los humedales a nivel nacional, Rocío indicó que «el principal es que no existe una ley que proteja a todos los humedales».
«Existen algunas que no se hacen cumplir y que no están hechas para ellos, en lo cual coincidimos todos. Además del incumplimiento de tratados internacionales, como, por ejemplo, de la Convención Ramsar; o regulaciones que tienen que ver con la disposición de escombros y desechos, muchos humedales están llenos de basura», agregó Alegría.
Las organizaciones analizaron la disposición en cuanto a los cambios de uso de suelo, la alteración de los cauces de afluentes y los drenados. «Se rellenan ilegalmente muchos humedales», aseguró Rocío.
«Hay un caso justo ahora sobre una multa cursada a un particular gracias a una denuncia puesta en la DGA (Dirección General de Aguas) por la que debe cancelar alrededor de 50 millones de pesos por rellenar una extensa área en el humedal Los Batros, esto luego de 19 meses en que no sucedió nada y que, con la ayuda de un concejal, pusimos una demanda en Contraloría por incumplimiento de deberes contra la DGA», relató.
Una de las principales preocupaciones evidenciada en la jornada es la expansión inmobiliaria, la cual tiene directa relación con los planes reguladores seccionales, metropolitanos y los comunales. «Por ejemplo, en el Gran Concepción todas las comunas están con ese problema, víctima de esto es el humedal Paicaví, en su tiempo el humedal Los Batros, que cuenta con zonas protegidas pero otras ya se construyeron, lugar donde se construyó San Pedro del Valle. Esto a nivel regional, pero a nivel nacional se repite en el diagnóstico que hicimos», denunció la ambientalista.
La expansión urbana y la lógica del desarrollo lleva de la mano otra gran amenaza para estas reservas de biodiversidad. Las obras viales del Ministerio de Obras Públicas tienen en jaque a los humedales de las más variadas regiones.
«En Dirección de Vialidad hay tres casos que tiene que ver con las organizaciones que estábamos acá, uno es en el humedal Los Batros con el Puente Industrial y la Ruta Pie de Monte, otro en Arica con el humedal de Lluta con la ampliación de una vía que va hacia al aeropuerto y en Punta Arenas con el humedal tres Puentes. Entonces es el mismo Estado el que contradice sus leyes o sus planes y programas, porque el Ministerio de Medio Ambiente lanza programas de protección de humedales y, por otro lado, el MOP tiene este tipo de proyectos».
Durante la jornada las organizaciones también analizaron la propuesta de Ley de Humedales Urbanos que se está discutiendo en el Senado para que pudiera ser aprobado a este fin de año. Según Rocío, la ley sería un avance pero «esta solo protegería a los humedales urbanos», lo que es insuficiente en relación a los servicios ecosistémicos que brindan también a la ruralidad. De todos modos de ser aprobada daría dos garantías principales: «que los humedales sean incorporados en el sistema de evaluación ambiental y permite que los municipios puedan hacer sus propias ordenanzas para protegerlos», relata Alegría.
De esta forma los desafíos de las organizaciones van en líneas variadas. «Por una parte en generar conciencia en los territorios en los que trabajamos cada una de las organizaciones, contribuyendo en la educación ambiental, hasta a las mismas autoridades que ignoran este tema o que no les importa, que es lo más grave», agregó.
Según Rocío es primordial «tener incidencia en las políticas públicas que tengan que ver con la protección y conservación de humedales, creemos que lo que se está actualmente creando (ley de humedales urbanos) tiene que ver con toda la presión que se han hecho desde hace 20 años, en base a conflictos ambientales que se han impulsado».
«Poder ser contraparte cuando el Ministerio de Medio Ambiente propone los planes de protección, queremos que salga una ley desde el ejecutivo que proteja a todos los humedales de Chile. Y los proyectos de ley que se emanan desde un senador tiene muchas restricciones, lo cual es un desafío muy grande», aseguró.