Este martes el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) entregó el boletín de empleo del trimestre septiembre-noviembre que arrojó una alta cifra de desempleo a nivel regional. El promedio nacional de desempleo alcanzó el 6,1%, mientras que la Región del Biobío alcanzó un 7,4%, la mayor a nivel nacional.
Fue Lota a nivel de ciudades quien alcanzó el ingrato trono de la con mayor desempleo a nivel nacional alcanzando el 12,3%, variando un 0,1 pp respecto del trimestre anterior y 2,8pp mayor respecto al mismo trimestre del año anterior. La siguen Ovalle con 11,7, Los Ángeles con un 10,1, San Antonio con un 9,8%, Linares 9,5%. Chillán alcanza un 9.3%. 9º lugar alcanzó Talcahuano con un 8,6%, 12º Coronel con un 8,1% y 24º Concepción con un 5.6%.
La crisis del desempleo ha sido tema permanente durante el año, con la región encabezando las cifras durante gran parte del año. Las ramas que más incidieron en el desempleo fueron "Transporte,almacenamiento y comunicaciones con 5.780 trabajadores menos (10,2%); Administración pública y defensa, que decreció en 3.650 ocupados (6,2%); Pesca, que disminuyó en 2.100 personas (30,9%); Otras actividades de servicios comunitarios, sociales y personales, que disminuyó en 1.050 trabajadores (4,8%)." A ellos se agregan "1.000 personas menos en Construcción (1,4%); Explotación de minas y canteras que restó 4,2%; y Suministro de electricidad, gas y agua que disminuyó en 0,4%."
Las cifras no solo muestran el creciente proceso de desaceleración de la economía, sino también problemas estructurales de desempleo de la región, que vienen a confirmar el 2014 como otro año del Biobío inserto en la dinámica desempleo y trabajo precario. Cabe recordar que gran parte del trabajo creado durante los últimos 4 años » entre los periodos EFM 2010 - EFM 2014 corresponde en un 97,4% a la suma de empleos externos y por cuenta propia, lo cual significa que el empleo que se ha generado no ha sido otro que empleo con altísimas posibilidades de ser precario, el cual coloca en riesgo las posibilidades de generar estabilidad laboral y por sobre todo aumenta las condiciones de precarización de la vida misma de quienes trabajan y sus familias» según datos aportados por Recaredo Gálvez, de la Fundación SOL.