"¡Ellos los soñadores!
Las modas, las vanguardias...
Alcohólicos con pase escolar
Y tarjeta sodexo.
Entre regaloneos te pregunto por el futuro:
Tacos altos, corbatas y equipajes,
O quizás la jipesa del norte.
No coseré tus libros me dices,
Mientras me abrazas la garganta con tu lengua.
Hoy no nos levantaremos,
Quizás a la noche volveremos a bajar a la ciudad
Antes que ella suba a nosotros".
"Cementerio de estudiantes", Arnolfo Cid.
La literatura regional resiste ante la precariedad del medio, la solidaridad entre escritorxs y el desarrollo de iniciativas editoriales autogestionadas ha sido fundamental para mantener a flote la escena literaria regional, que a pesar del abandono que vive por parte de los diferentes gobiernos, nacional y local, sigue la publicación y difusión del trabajo de distintxs creadorxs de la región.
HACHE / resumen.cl
Nos reunimos junto a Arnolfo Cid, escritor, editor y poeta de la ciudad de Talcahuano, autor de distintas publicaciones entre las cuales se encuentran "Perversiones en la ciudad", "Poesía para antes de tirar la cadena", "Oasis de perdices", y de otros textos que también transcurren entre la narrativa y la poesía. En esta ocasión comentaremos sobre el regreso de los recitales poéticos, convocatoria que desde hace mas de cuatro años reúne a distintxs escritorxs de la Región del Biobío principalmente y el trabajo que ha desarrollado el Taller del Libro, editorial manufacturera penquista que ha editado y promovido la lectura del trabajo de diferentes autorxs y géneros literarios de la región.
– Arnolfo, sería interesante que comentaras sobre los orígenes de los recitales poéticos, ¿en qué contexto surge esta iniciativa y cómo ha logrado mantenerse en el tiempo?
Los recitales surgen hace cuatro o cinco años aproximadamente como una instancia para compartir con personas que se dedicaban a escribir poesía, algunas publicaron sus primeros libros o se atrevieron a mostrar su trabajo en los recitales, además transformarse en un punto de encuentro entre escritorxs nuevos y con mas trayectoria. En un principio, y antes del Taller del Libro, organizábamos lecturas en distintos espacios de los cuales en su mayoría fueron centros sociales okupados que habían en ese tiempo, luego nos cambiamos a Carrera donde se comienzan a consolidar estos encuentros realizándose todos los jueves por más de dos años consecutivos de manera ininterrumpida y donde no solo hubo poesía sino que también música, teatro y danza, sumándose en el tiempo otras instancias similares en otros lugares del gran Concepción, como las lecturas en Tomé, la Casa de Colores, entre otras.
Los recitales parten desde los distintos talleres de creación literaria donde se encontraban personas que a lo mejor no tenían mucha relación con el mundo de la poesía o la escritura, pero sí tenían las ganas de escribir, inclusive nosotros mismos, que veníamos desde una trinchera más periférica de la escritura conocimos a escritorxs y editoriales antiguas, poetas con harta trayectoria, eso nos permitió generar un punto de encuentro entre generaciones que con el tiempo sumaría publicaciones y lecturas de personas de otras ciudades de Chile, como la Elisa Monti o el Juan Carreño, reproduciéndose este formato que en realidad no es nada nuevo, ya que en distintos momentos en Concepción se han generado instancias similares, quizás la permanencia de estas en el tiempo es lo que hemos roto, ya que hemos logrado que perdure.
Cabe destacar que los recitales, actualmente más que pertenecer al Taller del Libro, es de un gran número de escritorxs y poetas que le tienen cariño a este espacio y siempre tienen la disposición a participar, disfrutar y compartir de su trabajo, sin esas personas este espacio no tendría sentido, tanto escritorxs consagradas como personas que se atreven a mostrar sus escritos, nunca he visto una actitud competitiva o de vanidad entre los participantes, sino que todo lo contrario.
– ¿Cuál es el aporte de los recitales a la escena poética y literaria regional?
Un espacio para visibilizar el trabajo de escritorxs y poetas nuevxs, quienes a partir de los recitales han mostrado su trabajo abiertamente. Yo creo que la poesía se escribe harto, pero se lee poco, entonces lo que pasaba aquí es que esa gente que escribe poesía le da una oralidad a lo escrito generándose un ambiente algo teatral, esto de estar frente a frente y con las palpitaciones que tiene la misma poesía, entonces creo que esa visibilización ayudó bastante a que mucha gente se animara a escribir y publicar, en este sentido, hemos generado un catálogo bien potente a nivel regional.
La gente que tiene más tradición en la escritura también ha valorado el espacio de los recitales ya que les ha permitido conocer a las nuevas voces de la poesía generándose un espacio de respeto y retroalimentación en base el cual se ha ido profesionalizando con el tiempo. En la última jornada leyeron sin interrupción cinco poetas, veinte minutos cada uno, en total cien minutos de poesía donde el público escuchó con respeto, valorando lo que estaban presenciando.
– La pandemia ha significado un revés para el desarrollo de las artes y la cultura, desde la pérdida de los escenarios y la vida pública hasta el abandono absoluto del Estado con artistas de diversas áreas, ha significado la precarización permanente del trabajo artístico. ¿Cómo han enfrentado lxs escritorxs este último periodo cruzado por el Covid?.
En cuanto a las editoriales, en nuestro caso estuvimos prácticamente quebrados después del estallido social y la pandemia, estábamos en el centro, pagábamos arriendo, trabajábamos con más personas y todo eso sin estar vendiendo prácticamente nada, fue mucho rato de resistencia y darnos cuenta que esto era para largo, pero aun así comenzamos un proceso de transformación y lentamente esto empezó a crecer, en pandemia la gente empezó a escribir más y se dio esta relación con la extinción, la muerte, la incertidumbre de no saber qué iba pasar, generando que mucha gente escribiera y también publicara, por eso la realidad nuestra es que hoy en día tenemos mucho trabajo, sobre exigiendo inclusive nuestra propia capacidad productiva en lo que respecta a la edición y manufactura de libros.
– Respecto al taller del libro, hace un año aproximadamente desde la "Cooperativa de editoriales Fío Fío" realizaron la convocatoria "Bio Bío despertó" la cual estuvo enmarcada en el estallido social en la región, compilando distintas experiencias y valoraciones de lo que fue la revuelta social de Octubre del 2019. Sería importante conocer cómo surge esta cooperativa y tu experiencia en el trabajo colaborativo con otras editoriales autogestionadas.
En primer lugar, recién a un mes de la revuelta como taller tuvimos la capacidad de generar una convocatoria de escritura tanto narrativa como poética, "Escritos en tiempos de cólera" en la que participaron alrededor de 50 escritorxs y que fue presentado en la Remodelación Paicaví. En el caso de la Fio Fio, la cooperativa debe tener ya tres a cuatro años, en primera instancia tenía el carácter de feria, de ser un primer llamado a organizarse, aunque con el tiempo ha ido cambiando y hasta ahora se puede ver un crecimiento de distintas maneras de cada una de las partes que la componen. Bío Bío despertó fue el primer libro que se hizo como publicación desde la cooperativa y tuvo una recepción importante a nivel nacional, hubo mucha gente que escribió para esta convocatoria.
Ahora, en el presente, estamos viviendo un proceso de transformación con el taller, entonces hemos estado avocados en nuestros procesos internos, intentando profesionalizar nuestro trabajo en términos de producción, los tiempos de entrega y la manufactura, lo que implica una inversión de tiempo y recursos, entonces no estamos tan activos en la cooperativa. La pandemia significó que cada cual se refugiara en sus procesos tanto personales como editoriales, por lo que hay que ver cómo va a transformándose también la cooperativa, actualmente estoy viviendo este proceso y decidiendo como distribuyo mis energías, pero de igual manera se sigue trabajando y la cooperativa sigue funcionando.
– Siguiendo en el contexto del estallido y el actual proceso constituyente, ¿Existe algún posicionamiento político de lxs escritorxs y editoriales frente al acontecer nacional?
Sobre este tema existen publicaciones de distintxs escritorxs y convocatorias al respecto, nosotros realizamos instancias virtuales donde se abordaba este tema, sin embargo y a pesar de que hay gente que se dedica a la escritura y que también se encuentra activa en organizaciones políticas, no existe un posicionamiento colectivo más allá de la individualidad y el trabajo que cada uno ha realizado en este sentido. Lamentablemente cada vez los discursos son menos colectivos.
– Chile se caracteriza por un bajo nivel de comprensión lectora, lo que pareciera estar vinculado con el alto costo de los libros en nuestro país y con ello el difícil acceso a textos por parte de la población nacional, ¿Cuál es tu posición frente a este problema?
Yo creo que cada vez se leen menos libros, ahora la gente lee de otras formas, desde las redes sociales, los extractos, los memes, los formatos han cambiado, el libro a pesar de que se venda, la experiencia de leerlo es valorada en menor grado que en años anteriores, lo cual genera un desafío de apertura y aceptación a las nuevas formas de escritura. El tiempo también es un factor importante para entender este problema, cada vez la gente lee menos, estamos pendientes del celular, de los mensajes que nos llegan y se hace difícil concentrarse únicamente en la lectura, definitivamente los medios de escritura y lectura han cambiado.
– ¿Qué se viene con el taller del libro, hay alguna información que quieras compartir?
Seguimos publicando libros, ahora estamos trabajando con alrededor de diez publicaciones entre novela y poesía, estamos planificando volver a armar una librería destinada a la venta de nuestro catálogo que ya va en más de cincuenta libros ya que desde el comienzo de la pandemia que solo estamos en nuestro taller y también tenemos el proyecto de una librería móvil que recorra distintos territorios de la región, como por ejemplo Talcahuano, Tomé, Lenga, etc.
Finalmente, estamos pensando en hacer otro encuentro de escritores a nivel nacional, algo similar al primer encuentro que realizamos el año pasado, al menos la idea es que tenga la misma magnitud, esto de manera independiente ya que no hemos podido acceder, ni siquiera postular a ningún proyecto para gestionarlo.
Arnolfo Cid .
Arnolfo Cid
Arnolfo Cid