La tarde de este miércoles 26 de Mayo, en la sede de la población Santa Clara, se realizó una reunión con distintas organizaciones territoriales con el objetivo de fortalecer las redes informativas entre la distintas organizaciones sociales que han participado del proceso de recuperación en las poblaciones de Talcahuano, además de presentar por parte de la directiva de la organización vecinal de Santa Clara su propuesta con respecto a la reconstrucción del borde costero. La reunión se llevó a cabo en la sede vecinal que levantaron de las ruinas con sus propias manos.
La propuesta de los pobladores juega al gallito con la propuesta del gobierno regional:
El gobierno regional ha propuesto como solución para aplacar un próximo maremoto, la construcción de un muro de contención, pero que curiosamente llegaría solo hasta El Morro, es decir que la población más devastada por la tragedia ocurrida el 27 de Febrero del presente año quedaría descubierta. Luego de ese muro, se construiría un muro arbóreo que aplacaría la fuerza de un tsunami. Sí, árboles que detienen tsunamis. ¿Por qué el muro cubriría solo ese sector? porque de esta forma protegerían la plataforma logística, proyecto que desde hace tres años se planea para ser instalado en la costa de Talcahuano. Según las autoridades mencionadas, el único canal que quedaría despejado para recibir un nuevo maremoto sería el de El Morro. Es decir que la población del borde costero volvería a quedar sumergida, puesto que un canal no es suficiente para darle cause a las olas del mar en caso de que se volviera a repetir el hecho.
Por el contrario, los vecinos de las poblaciones afectadas en Talcahuano tienen las cosas muy claras: lo que importa es proteger a las personas, y es por eso que su propuesta esta enfocada a la construcción de un muro que alcance de 15 a 30 metros de grosor y 5 a 10 metros de alto, bordeando la costa desde la industria Sal Lobos, ubicada calle Blanco Encalada a la altura de Sodimac, hasta el canal Ifarle. Además de esto solicitan la limpieza de los canales El Morro e Ifarle para abrirle paso al oleaje en caso de venir otro maremoto.
Es increíble que se piense en volver a construir un peligro para la población del borde costero teniendo la oportunidad de construir algo con visión de futuro, planificado y mejor para todos.
Un claro ejemplo de planificación urbana es el de Japón, que cuenta con canales costeros que permiten la disminución de la fuerza de las olas y por lo tanto su capacidad destructiva.
Foto: Mapa de muro propuesto por vecinos