Por: Santa Juana Aprueba
Las elecciones municipales del 2021 reflejaron parte del nuevo ciclo político de nuestro país, desencantado del bipartidismo que por treinta años había distribuido el control entre derecha y concertación. Emergieron liderazgos independientes, algunos partícipes de la Revuelta Popular, se instalaron liderazgos jóvenes, posicionándose tanto el Frente Amplio como el Partido Comunista en la Convención como en los municipios.
Comúnmente los resultados electorales se leen desde las grandes capitales, pero es el otro Chile el que pervive en el claroscuro, lejos de los grandes debates políticos y contiendas electorales descarnadas.
Este 28 de junio se cumple un año del gobierno local liderado por la alcaldesa Ana Albornoz Cuevas, hecho que marcó un cambio revolucionario en Santa Juana, comuna rural de la Provincia de Concepción. El que haya sido electa una mujer como primera autoridad comunal en su historia, es a priori un síntoma de los nuevos tiempos que la sociedad chilena experimenta, más aún, si consideramos la cultura conservadora y machista que ha perdurado por siglos en los sectores rurales, donde los indicadores de violencia de género contra las mujeres sobresalen a nivel regional.
Una radiografía del Chile de los treinta años, fue la administración del último alcalde demócrata cristiano de la comuna, quien estuvo más de dos décadas en el poder en una suerte de régimen patronal clientelizado por relaciones de subordinación y asistencialismo crónico de los grupos sociales, donde la participación se reducía a decir amén para recibir ayuda social. El mérito de Ana Albornoz Cuevas sin duda es un fenómeno político digno de imitar, razón por lo que nos atrevemos a decir que esta lideresa desde el Chile rural y marginado vino a marcar la ruta hacia donde debemos caminar como región y país. Si atendemos al escenario político y social que ha debido sortear, la batalla electoral desde un colectivo de izquierda sin recursos contra todos los poderosos partidos tradicionales y la maquinaria electoral de la DC, el desafío parecía una locura insuperable. Transcurrido un año, esa batalla se ha extendido contra el Concejo Municipal compuesto solo por hombres, en una peculiar alianza de los partidos de la UDI, RN y la DC; la resistencia de la edil ha sido una vuelta de mano a las miles de mujeres que han sido violentadas, asesinadas e invisibilizadas por tanto tiempo, que heroicamente ha resistido el ataque permanente, y al mismo tiempo, impulsado cambios importantes en solo 12 meses.
El programa de gobierno local liderado por Ana Albornoz, considera desafíos en varias dimensiones, muy sentidas por la comunidad santajuanina, que increíblemente no habían sido abordados en profundidad hasta la fecha. Apenas asumió las riendas de la comuna en plena pandemia, implementó el programa Plan 80, para ayudar a las personas mayores que se encontraban abandonadas en diferentes sectores de la extensa comuna. Este primer simbólico gesto de justicia social marcó la hoja de ruta del trabajo del equipo municipal, sin descuidar las otras dimensiones. Hace sólo unos días, con la visita a la comuna de Cristóbal Pineda, Subsecretario de Transportes, anunció la licitación del transporte público que conecta con el gran Concepción, un anhelo de siempre de miles de estudiantes, trabajadoras y trabajadores que viajan todos los días a la capital regional a estudiar o trabajar.
El lunes 20 de junio en el sector de Balseadero se anunció una alianza público-privada que permite dar inicio a la construcción de un Servicio Sanitario Rural, que dará solución al serio problema de abastecimiento de agua de 13 familias. El déficit hídrico que vive la comuna desde hace varios años se transforma en el gran desafío para desarrollar la agricultura campesina y familiar, así como para el desarrollo agro turístico del Plan de Desarrollo Comunal. En este sentido, se avanza en un trabajo coordinado con los comités de agua, universidades e instituciones públicas como la DOH. El objetivo es concretar inversión pública para proyectos de riego y Servicios Sanitarios Rurales o APR. Se ha innovado con ferias en el gran Concepción para comercializar la producción campesina, dando así valor agregado a la misma como una forma de incentivar la producción local.
La Oficina de la Mujer y Equidad de Género inaugurada el 1 de junio, es una iniciativa concreta para avanzar en políticas y acciones que promuevan el desarrollo y protagonismo de las mujeres en la comuna. Desde la Dirección de Desarrollo Comunitario, anuncian iniciativas para la implementación de la Oficina de la Inclusión por medio del proyecto EDLI, Estrategia de Desarrollo Local Inclusiva, ahora se está implementando el Programa de Atención Temprana del Senadis para niños y niñas entre 0 y 6 años. La Oficina de Personas Mayores está finalizando un proyecto para implementar el primer Centro Diurno Comunitario para Personas mayores con dependencia leve, una necesidad urgente en una comuna con el 22% de población adulta mayor. Desde lo deportivo se están impulsando políticas inclusivas y avanzando más allá del futbol para llegar a un público más diverso, así como proyectos de infraestructura anunciados con la visita de la ministra del deporte. La Oficina de Cultura está trabajando en el rescate patrimonial agrario, como una forma de poner en valor la cultura local y promover la participación ciudadana.
De esta manera, a un año de iniciado este nuevo ciclo político en Santa Juana, en junio mes del Wetripantu o San Juan, celebración ancestral que inaugura un nuevo ciclo de la naturaleza, en el valle de Catiray donde está emplazado el pueblo, la esperanza y el trabajo colectivo proyectan la ruta de una mejor vida para sus habitantes.