[resumen.cl] Desde agosto de 2019 se está generando un conflicto en la Isla Grande de Chiloé, en la comuna de Ancud, derivado de la instalación de un vertedero de basura en una zona en donde organizaciones ambientalistas afirman existen cuerpos de agua que se verán afectados. Además el mismo territorio donde se pretende instalar el vertedero es reivindicado por comunidades Mapuche Huilliche de la Isla de Chiloé que comenzaron un proceso de reivindicación y recuperación territorial del Fundo «Los Millanes» actualmente propiedad de Bienes Nacionales. El municipio, por su parte, ha insistido en la idea de instalar el vertedero en el lugar, mientras que el gobierno ha actuado mediante la represión de los y las comuneras que buscan detener la iniciativa y recuperar sus tierras ancestrales.
Las comunidades realizaron la acción luego de que las autoridades de la isla modificaran cursos de agua en trabajos que implicarían la instalación de un relleno sanitario en la zona en donde brotan las aguas que beben las comunidades. Además reclaman el fundo como territorio ancestral con un título de comisario otorgado por la República de Chile a la familia «Los Millanes» en 1829, después del tratado de Tantauco. Frente a la recuperación un fuerte contingente policial se dirigió al lugar el 1 de septiembre desalojando a los comuneros y dejando diversos detenidos/as.
Cristián Frêne académico del Instituto de Ecología & Biodiversidad explica el conflicto de la siguiente manera "en la comuna de Ancud, al norte de la Isla Grande, el municipio necesita encontrar un nuevo sitio para instalar un vertedero municipal, debido a que el antiguo fue clausurado en abril de este año, tras 40 años de operación, dejando a la comuna bajo Alerta Sanitaria. Para solucionar el problema, el alcalde toma la decisión de instalar el nuevo vertedero en una zona afectada por la escasez hídrica estival, específicamente en el predio fiscal "Fundo Los Millanes", cubierto con bosque nativo que actualmente está siendo explotado ilegalmente".
En la zona que será contaminada además se encuentra relacionada a una estación biológica dedicada al estudio de la biodiversidad. En este sentido, Mariela Nuñez, de la Fundación Senda Darwin ha recalcado al respecto "la fragilidad del ecosistema y la existencia de esta estación biológica, que aporta no solo el conocimiento de la Isla de Chiloé, sino de los bosques templados del sur de Sudamérica". El Doctor Cristian Frene, por su parte, ha planteado que "efectivamente, lo que está ocurriendo en San Antonio de Hueldén es que está primando el criterio económico, porque la Municipalidad tiene a disposición un predio que le ha entregado Bienes Nacionales de manera gratuita, no tuvo costo ello".
Frene además ha explicado por qué la instalación del vertedero tiene altos impactos en el agua del sector, en donde existirían unas formaciones llamadas morrenas. Al respecto señaló que "lo relevante para efectos de un relleno sanitario, es que estas Morrenas están constituidas principalmente por grava, que es como el ripio, con mucha arena, mucha piedra, lo que lo hace un sustrato muy permeable. Eso genera que el basamento geológico sea muy permeable y que los acuíferos, el agua subterránea, esté de manera libre. Por lo tanto, cualquier evento de contaminación que afecte a algún punto, se va a difuminar a otras partes, por lo que hay un potencial de contaminación muy importante".
Por otro lado, medios como Radio Minga han señalado que en el sector hay "tres comunidades Mapuche Williche: Comunidades Lof Wenul, Pellu Williche y Leufu Wuicha ubicadas en el sector Fundo Los Millanes de la localidad San Antonio de Huelden en la comuna de Ancud, provincia de Chiloé, se encuentran alertas y movilizadas por la probable instalación, por parte de la municipalidad de Ancud y el Gobierno Regional, de un Relleno Sanitario "provisorio" en sus tierras las que están siendo reclamadas (reivindicadas) por estas comunidades como propias ya que poseen Títulos de Comisario".
El denominado como Grupo de Trabajo sobre Derechos Humanos y Residuos en Chiloé también ha declarado que "los efectos sociales, culturales, económicos y ambientales que han venido causando el funcionamiento irregular e ilegal de vertederos industriales y domiciliarios en Chiloé son altísimos, contra una alta cantidad de población rural, cuyas instalaciones además han venido reproduciendo una política estatal de racismo y discriminación ya que se han instalado por años en suelos de sectores campesinos y comunidades indígenas, varios de los cuales han dejado de funcionar sin que se establezcan planes efectivos de cierre que contribuyan a mitigar y reparar los daños, por el contrario, instituciones públicas del estado, como son Municipalidades, bajo el amparo del Poder Ejecutivo, no asumen garantías de no repetición y en el presente, se pretende imponer un nuevo recinto vertedero o relleno sanitario afectando a comunidades indígenas e importantes ecosistemas, junto a lugares de significación cultural, sin que tampoco se atiendan las recomendaciones desde el Comité de la ONU sobre eliminación de la discriminación Racial (CERD) y desde la Relatoría ONU sobre Pueblos Indígenas efectuadas al estado chileno desde hace años en estas materias".
Juan Armesto, Presidente de la Fundación Senda Darwin e Investigador del Instituto de Ecología y Biodiversidad, por su parte señaló que la destrucción causada por la ruta de acceso que están realizando las autoridades tuvo impactos que incluyen "la tala de bosque nativo, destrucción de una plantación de especies nativas financiadas por el MOP, destrucción de afloramientos de agua y la modificación de cursos de agua, el futuro de este relleno puede anticiparse como un "desastre ecológico", como ha sido señalado por colegas de la Universidad de Londres (UK) y la Universidad de Viena (Austria), expertos en el tema de contaminación de aguas".
Además el académico agregó que "en la Estación Biológica Senda Darwin, ubicada en la cuenca del río Huicha (aguas abajo del sitio en donde se pretende emplazar el relleno sanitario), hemos mantenido investigaciones científicas de largo plazo por más de 20 años, estudiando la biodiversidad, el funcionamiento de los ecosistemas y su respuesta frente al cambio climático, formando estudiantes de pre y postgrado de universidades nacionales e internacionales".
Aun se mantiene abierto este conflicto que pone en la palestra la necesidad de cuidar el agua y evitar la escasez hídrica con mejores planificaciones territoriales, así como la justicia histórica de las reivindicaciones Mapuche Huilliche en la Isla de Chiloé y la urgencia de la conservación de los bosques.