Tras un ataque combinado de fueras aéreas, marítimas y terrestres que se prologo por mas de tres semanas, las fuerzas armadas israelíes se retiraron totalmente de la franja de Gaza, asediados hasta el final por milicianos del FPLP (Frente Popular para la Liberación de Palestina) que no acepto la tregua y sin cumplir ninguno de los objetivos trazados en la misión "Plomo Fundido", tras de si dejaron el cruento saldo de 1.300 muertos, más de 5.450 heridos, de entre las personas muertas 471 son niños, 108 mujeres, 120 personas ancianas, 14 personas que trabajaban en equipos de socorro, 4 periodistas y 5 extranjeros. 22.000 edificios, el 15% de todas las construcciones de Gaza destruidas.
Israel no pudo rescatar al soldado israelíes Gilad Chalet, capturados por la resistencia palestina, no pudo impedir que durante todos estos días se continuaran lanzando cohetes sobre territorio israelí, sino que además no fue capaz de aplastar al movimiento de la resistencia islámica Hamas, mucho menos la caída de su gobierno, por el contrario la organización salio más fortalecida tanto al interior del pueblo palestino como en el ámbito internacional.
Israel debió forzar una pronta retirada antes de arriesgarse a una nueva vergonzosa derrota militar como la sufrida a manos de los guerrilleros de hezbola en el Líbano, y ante una creciente opinión publica internacional adversa, que pronto se volcaría en pronunciamientos concretos en contra de Israel. Dos de las naciones musulmanas que habían restablecido relaciones con Israel, las rompieron, Bolivia y Venezuela rompieron relaciones con Israel, cuestión que de mantenerse el conflicto se extendería a otras naciones latinoamericanas y del llamado tercer mundo, algunas con tanto peso internacional como Sud África. Además un boicot a los productos israelíes comenzaba a ganar adeptos en las naciones europeas y de Oceanía.
Hamas celebro la retirada del ejercito de ocupación como una victoria, miles de palestinos de volcaron alas calles de una Gaza destruida, con jubilo y sentimiento de victoria, Hamas nuevamente demostró la capacidad de regenerar dirigentes «A pesar de que el ministro de Interior, Said Siam, ha sido asesinado durante la guerra, el ministerio continúa su trabajo en base a un plan de seguridad que él aprobó», declaró un portavoz de Hamas. Interior trabajará «para mantener y proteger el frente interno palestino, porque eso ayudará a apoyar a la resistencia armada contra las agresiones». Resaltaron que mantuvieron el ataque con cohetes sobre Israel y minimizo las bajas. El brazo armado de Hamás, las Brigadas al Qassam Abu Ubayda, reconocio 48 milicianos de las brigadas caidos en combate frente a 49 soldados israelíes muertos, si bien el balance oficial ofrecido por las autoridades hebreas es de solo diez soldados muertos, es sabido el manejo que realizan de las cifras. Los milicianos de Hamas señalan haber contenido una columna de blindados, haber destruido 5 tanques y varios camiones, además de haber capturado a dos soldados israelíes: "al este de Jabaliya el soldado israelí estuvo capturado durante dos días, hasta que la posición fue bombardeada, muriendo los cuatro milicianos que le protegían, así como el propio soldado". Se lanzaron un total de 980 proyectiles, 345 de los cuales fueron de fabricación casera ‘Qassam’, así como 213 ‘Grad’, y 422 proyectiles de mortero. Por su parte, los francotiradores atacaron 53 objetivos y se detonaron 79 explosivos.
Los propios soldados israelíes, en declaraciones que recoge el diario «Haaretz» (el único que logra romper parcialmente la férrea censura israelí), confesaron que por la noche veían «escenas fantasmales, en las que
los de Hamas nos atacaban en un lado y cuando les respondíamos, ya no estaban allí, y recibíamos fuego desde el otro».
La intención de dividir a los palestinos, también fracaso las Brigadas de los Mártires de al Aqsa, el brazo armado de Al Fatá, anunció ayer que sus milicianos en la Franja de Gaza dispararon 102 cohetes y 35 proyectiles de mortero contra Israel en los 22 días que duró la operación hebrea ‘Plomo fundido’ en el territorio costero. Asimismo, según recoge la prensa israelí, el grupo armado asegura que sus francotiradores dispararon e hirieron a tres soldados israelíes y detonaron seis bombas al paso de tropas israelíes. Ésta es la primera vez, destaca el
‘Jerusalem Post’, que Al Fatá reconoce que sus miembros han estado luchando junto a Hamás, si bien no está claro si la decisión fue tomada por la dirección del partido en Cisjordania. Por otra parte, el grupo armado indicó que muchos de sus ataques con cohetes y mortero fueron perpetrados en colaboración con miembros del brazo armado de la Yihad Islámica, las Brigadas al Quds.
La propia dirigencia de la Autoridad Nacional Palestina reconoce que Hamas salio fortalecido de la crisis, un conspicuo dirigente de Al Fatal, Madura Fares señalo, «si hoy se produjeran elecciones en Palestina, Hamas nos vuelva a arrollar, ya que el pueblo ve en ellos a la auténtica dirigencia para enfrentar al invasor de nuestra tierra». Y por el contrario quienes hoy aparecen como daño colateral de la guerra son los dirigentes palestinos que han marcado la línea de negociación con Israel «Tanto los palestinos de Cisjordania como los de Gaza están inquietos por la actuación de la autoridad dirigida por Mahmud Abbas que no ha hecho nada durante el holocausto llevado a cabo por las fuerzas israelí contra mujeres y niños palestinos inocentes» explica el periódico británico "The Observador"
La frustración del pueblo palestino con la Autoridad Palestina (AP) y Fatah ha sido probablemente intensa en todo momento debido a la creencia, ampliamente extendida, de que la AP ha conspirado contra Hamas. Las sospechas se han visto reforzadas por la represión, con mano dura por parte de las fuerzas de seguridad de la AP, de las protestas de solidaridad en Cisjordania. En Hebrón, los policías de la AP reprimieron violentamente las manifestaciones a favor de Gaza, golpeando a los manifestantes y arrestando a varios de ellos. De forma parecida, el personal de los servicios de seguridad de la AP impidió que los manifestantes ondearan las pancartas verdes islámicas de Hamas y suprimieron los eslóganes a favor de Hamas
Abbas Zaki, el representante de la Organización para la Liberación Palestina en el Líbano, dijo a los informadores la pasada semana que ya era hora de que Fatah volviera a las trincheras. «Fatah debe estar preparado para unirse
a la batalla en cualquier momento». Sin duda Israel no salio vencedor y por el contrario con sus crímenes sembró más odios y nuevamente el cuestionamiento que impedirán la consolidación y reconocimiento de un Estado Hebreo por la naciones árabes y las fuerzas políticas palestinas.